TENIS

La verdad del primer tenista de la historia suspendido por dopaje: "Me ofrecieron una sanción encubierta, hubo muchas irregularidades"

El español Nacho Truyol, suspendido en 1996 por nandrolona y pemoline, asegura que el proceso fue muy oscuro. "A un médico le hicieron cambiar el testimonio", dice a Relevo.

Nacho Truyol, el primer tenista de la historia sancionado por dopaje, durante la entrevista con Relevo. /Salvador Fenoll
Nacho Truyol, el primer tenista de la historia sancionado por dopaje, durante la entrevista con Relevo. Salvador Fenoll
Nacho Encabo
Salvador Fenoll

Nacho Encabo y Salvador Fenoll

El 19 de agosto de 1996, dos días después de cumplir 23 años, Nacho Truyol (1973, Madrid) alcanzó su techo en el ranking mundial de tenis, el puesto 104 del escalafón. Iba en claro ascenso: había comenzado la temporada en la posición 234 de la ATP y fue escalando gracias a sus resultados: octavos de final en el Godó, campeón del Challenger de Estambul y cuartofinalista en El Espinar.

Pero si por algo se acuerda Nacho Truyol de aquel 1996 fue por el control antidopaje al que fue sometido en un torneo en Ostende durante el mes de julio. En la orina le detectaron nandrolona y pemoline, dos sustancias prohibidas, y se convirtió en el primer tenista de la historia en ser castigado por un caso de dopaje: fue suspendido un año sin competir.

Lleva casi 30 años sin hablar de lo ocurrido, hasta que llega al plató de Relevo, se ajusta el micrófono y empieza a disparar contra el precario sistema antidopaje de aquel entonces, un sistema que, según sus palabras, "iba contra todas las reglas de derecho en la vida", que nada tiene que ver con el que ha cazado en este 2024 a Jannik Sinner e Iga Swiatek.

"Si yo hubiera querido, esto no hubiera sido público, porque si hubiera llegado un acuerdo con ellos, se comprometían a no hacerlo público", revela. "Hubo muchas irregularidades. La más gorda es que hicieron cambiar el testimonio de un médico para decir que yo era culpable", añade el extenista, que nunca más llegó a ser el mismo tras la sanción.

Vamos a empezar por el principio. Para la gente que no te conozca, ¿quién es Nacho Truyol?

Es una persona que ha dedicado toda su vida al mundo de deporte, en concreto al tenis. Y que ha pasado por todas las fases: jugador, entrenador y ahora ya básicamente intentando transmitir a gente joven lo que significa el tenis y ayudándoles a llegar a lo máximo que ellos puedan en sus carreras.

Eras de la generación de Bruguera, Corretja, Costa…

Sí, hubo allí una hornada buenísima en la que éramos 14, 15, 16 españoles entre los 100 primeros del mundo. La verdad es que esa fue la época dorada del tenis español. Luego salió Rafa y ahora Carlos Alcaraz. Pero la verdad es que la época que viví yo fue increíble. Había jugadores a patadas, se invirtió mucho dinero, la federación hizo un buen trabajo y es cierto que cada vez que íbamos a un torneo había ocho, diez, doce españoles. Era como encontrarte por todos lados del mundo como si estuvieras en casa.

"No había sistema antidopaje. Si tú vas en contra de alguien y el juez es él, pues obviamente lo vas a tener muy difícil para ganar"

Nacho Truyol

¿Cómo empiezas el tenis?

Lo típico, empiezas por tus padres y jugando los fines de semana. Yo la verdad es que era bastante autodidacta, jugaba mucho con la pared. Supongo que como todo el mundo, empiezas por sábados y domingos, luego ves que vas destacando un poquito y entre que destacas un poquito y que tu afición va aumentando, al final tus padres no tienen más remedio que llevarte a lo que quieres. Supongo que como hacemos hoy en día con nuestros hijos.

En el año 96 llegaste a estar muy cerca de top 100.

Sí, gané Estambul y luego hice semifinales en Espinar. La verdad es que ese año hice una muy buena trayectoria y me quedé cerca de los 100 primeros.

¿Te veías con potencial de seguir escalando?

A ver, cuando estás ahí siempre tienes dudas, pero una persona cuando se mete y coge cierto ranking es porque normalmente se lo merece. Siempre al principio empiezas jugando por los torneos de más bajo nivel y a medida que vas cogiendo nivel, pues tu cabeza va aprendiendo un poquito de todo eso y obviamente vas cogiendo mucha confianza. Y a medida que subes, pues todo eso se fortalece y yo soy una persona bastante ambiciosa. Para mí, el trabajo es básico y ahí hice muy buen trabajo, estuve muy competitivo y es que esto me encantaba y era mi vida.

Nacho Truyol recuerda el momento en el que dio positivo. Salvador Fenoll

En junio del 96, poco después de Estambul, vas a Bélgica a un torneo y das positivo en un control antidopaje. ¿Qué recuerdas de aquel día?

Esto lo tengo grabado como si fuera ayer, toda esta película de mi vida. Era en Ostende y yo nunca había estado en Bélgica. Fue la única vez que he jugado en Bélgica y aparte de ahí, después de todo esto, no lo quise volver a pisar. Me acuerdo perfectamente, fue un control de orina antes de jugar. Sabíamos perfectamente que había controles en este torneo porque era conocido entre los jugadores. Bélgica, no sé por qué, era el único país en el que había controles. Sabíamos que había control y bueno, fui ahí, jugué, perdí en cuartos de final y poco tiempo después me comunicaron que di positivo.

¿Cómo te lo comunicaron?

Te envían una carta diciéndotelo, en la cual se abre un proceso en el que tú tienes explicar por qué diste positivo.

¿Hubo contraanálisis?

Sí, siempre hay, siempre hay, por protocolos. Ellos cogen, como ahora mismo supongo que funcionará, dos muestras y una la dejan para el contraanálisis.

Y diste positivo por nandrolona y pemoline.

Sí, bueno, de nandrolona realmente fueron trazas porque no existía ni cantidad. Y luego el pemoline, que yo no sabía ni lo que era. Es una de las distintas sustancias que venía en un complejo vitamínico que estaba tomando. El tema de la nandrolona fue más por tema de espalda, para fortalecer un poquito la espalda, que llevaba arrastrando una lesión desde hace bastantes meses. Y fue por eso por lo que decidieron sancionarme.

¿Tú eras consciente de que podías dar positivo?

No, yo no tenía ni idea. No hubiera ido al torneo. Básicamente, se me puso eso, no se me comunicó y fuimos al torneo y di positivo. Pero ya te digo, todos sabíamos que en ese torneo había controles antidoping, con lo cual, si yo lo hubiera sabido, obviamente no hubiera ido.

Nacho Truyol habla sobre la indefensión que sintió en el proceso. Salvador Fenoll

El sistema antidopaje ha evolucionado mucho. Ahora está la ITIA, la AMA, el TAS resolviendo en última instancia… ¿Cómo era en aquel momento el sistema antidopaje?

Bueno, básicamente no había sistema antidopaje. Yo de todo esto me di cuenta a través de todo el proceso que llevé contra ellos, en el cual yo desde el primer momento me sentí con muchísima indefensión, me sentí realmente impotente porque te dabas cuenta de que era pelearte contra una pared, porque estabas teniendo un contencioso con alguien que era juez y parte en ese momento. Si tú vas en contra de alguien y el juez es él, pues obviamente lo vas a tener muy difícil para ganar.

Porque a ti te sanciona la ATP y si querías recurrir, ibas a la ATP.

Eso es. Entonces, si te sanciona la ATP, el comité es de la ATP, el arbitraje es con los jueces de la ATP… Era lo que había en ese momento. A partir de ahí ellos se dieron cuenta de que el sistema era, no sé si anticonstitucional o como se pueda decir, pero lo que está claro es que iba contra todas las reglas de derecho en la vida. O sea, tú tienes que tener el derecho a defenderte y yo no lo tuve en ningún momento porque estaba luchando contra ellos. La única arma que tuve para defenderme fue acudir a la justicia ordinaria.

"La cosa iba muy bien hasta que la jueza que llevaba todo esto se quedó embarazada y cambiaron el juez. A partir de ahí se me volvió todo en contra"

Nacho Truyol

¿Y qué recorrido tuvo en la justicia ordinaria?

Hice el recurso hacia la justicia ordinaria. Todo el camino empezó muy bien porque intenté demostrar que hubo bastantes irregularidades en todo el proceso contra mí. Y bueno, al final se archivó el caso, llegué a un pequeño acuerdo con ellos. La cosa iba muy bien, el tema iba muy bien, hasta que la jueza que llevaba todo esto se quedó embarazada y cambiaron el juez. A partir de ahí se me volvió todo en contra. Fue un tema que mis abogados no entendían. Lo quisieron comprobar de primera persona viendo todas las causas que tenía (el juez), pero desde el primer momento me dijeron que la cosa se había ensuciado mucho y así como iba todo bien en un primer momento, desde que cambiaron a la jueza que lo llevaba se me volvió todo en contra.

¿Y a partir de ahí llegaste a un acuerdo?

A partir de ahí llegué a un acuerdo económico con ellos para cerrar el tema.

¿Había posibilidad de recurrir al TAS?

La verdad es que no me acuerdo porque ni lo valoré. Eso ni lo valoré. Ya llevaba tiempo con ello, sabes que es un tema delicado, y si pensabas seguir jugando, como yo en un principio hice, que jugué después del año de sanción, ya no me interesaban más líos porque mi mente ya estaba puesta en volver otra vez, a recuperar otra vez mi forma y mi ranking.

El daño psicológico de Nacho Truyol. Salvador Fenoll

¿Qué te decía tu familia y tu equipo?

Al final todo el mundo trata de ayudarte, sabes que mentalmente es duro, porque en el tenis ya no es solamente que estés un año sin jugar, sino que lo más difícil del tenis es que pierdes el ranking. Tienes que empezar de cero, tienes que empezar por torneos de muy baja puntuación, de muy bajo nivel, porque es lo que puedes acceder con el poco ranking que te queda. Si a una persona la tienes un año sin jugar, además de perder el ranking, pierde todo el ritmo, y quieras que no por tu cabeza pasan mil movidas, mil películas. Tiendes a estar bastante ansioso por querer volver un poco a recuperar el ranking que tenías, sientes cómo que te han destrozado la carrera, porque con todo el dinero que se invierte para llegar allí arriba…

Es uno de los deportes más caros...

Cualquier jugador de tenis sabe que esto es un deporte muy caro, porque tienes que tener una persona que te ayude a crecer en todos los ámbitos del deporte, tanto físico, como psicológico, como técnico, y eso hoy en día es muy caro porque es la atención de mucha gente trabajando para ti, aparte de los gastos de viajes, hoteles, que eso ya contamos con ello. Y al final toda la inversión que has hecho a lo largo de tu vida ves que se ve un poco destrozada por todo esto, pues mentalmente necesitas mucha ayuda por parte de la gente que está a tu lado. Y aun así, es difícil porque tienes que asumir y ponerte en una posición que la ves un poco antinatural. Dices: 'Por esta fase ya he pasado'. Es lo más duro del deporte, porque a ti te pasa esto en el fútbol, o en otros deportes, y tú al cumplir el año de sanción o el tiempo que estés vuelves a jugar y no pasa absolutamente nada, tu equipo sigue ahí, tú tienes tu contrato, tú tienes toda la infraestructura. El tenis es un deporte individual, y entonces cuando te sucede un tema como este tienes que empezar de cero, sin ayuda, sin sponsor, y obviamente con el daño psicológico que te han hecho.

¿Sentiste el apoyo de tus compañeros?

En esto, al ser un deporte individual, cada uno va a lo suyo un poco. Sí que es cierto que recibí ayudas de muchos compañeros que estaban ahí, porque al final a todo el mundo le dio la sensación de que me habían cogido un poquito como para dar un escarmiento y hacer ver a la opinión pública de que en el tenis hay controles antidoping.

Imagino que cuando vuelves al tenis ya nada vuelve a ser lo mismo…

Es todo difícil, llevas un año sin jugar. Quieras o no, has perdido nivel. Obviamente, como cualquier deportista que está un año sin competir en lo que haga. En ese momento estaba ilusionado y empecé bien el año, lo que sí que es cierto es que también, al estar un año sin competir, el cuerpo se tiene que adaptar a todo eso. Juegas también con mucha ansiedad, lo que te hace tener más dolores de lo normal, tener más lesiones de lo normal, parar más de lo normal, y entonces todo eso se va haciendo una pelota y es difícil. De hecho, hay jugadores muy buenos que se han lesionado bastante tiempo y les ha costado luego mucho volver al nivel que tenían. O incluso hay muchos que no lo han conseguido.

Nacho Truyol sobre la oferta de sanción encubierta que recibió. Salvador Fenoll

¿Crees que fuiste el primer tenista que dio positivo o el primero que fue sancionado? Es un matiz, pero que cambia mucho la historia.

Hombre, no se puede saber, es tirar monedas al aire, pero lo que sí que es cierto es que si yo hubiera querido, esto no hubiera sido público, porque si hubiera llegado un acuerdo con ellos, se comprometían a no hacerlo público. Cuando lo hacen público es porque yo me voy contra ellos. Porque veo un poco todas las irregularidades que hay en el proceso y no me dejan otra opción que tener que defenderme. Entonces, al poder defenderme ya entra el proceso en un momento en el que no hay negociación posible. Pero en la primera negociación, si yo hubiera querido esto no se hubiera hecho público, porque ellos me lo ofrecieron.

¿Una sanción encubierta?

Una sanción encubierta en la cual pierdes el ranking, tú dices que estás lesionado y no pasaría absolutamente nada.

Las irregularidades que vio Nacho Truyol. Salvador Fenoll

¿Qué irregularidades viste en el proceso? ¿En qué se basaba tu defensa?

Mi defensa es que el médico fue el que dijo que me había puesto eso sin mi consentimiento. Se avisó a la ATP antes de que yo diera positivo, se avisó a la ATP diciendo que se me había puesto esta cantidad de esto cuando se me hizo el control antidoping. Y luego en todo el proceso hubo muchas irregularidades. La más gorda es que había un comité en el que constaban tres médicos y por parte de ellos tenía que haber unanimidad para que dijeran que yo era culpable. En un primer momento, no la hubo, con lo cual se anulaba todo el proceso, y a ese médico le hicieron cambiar el testimonio para decir que yo era culpable. Eso fue lo más grave y lo más gordo que hicieron contra mí.

Llegaste a decir en aquellos años que te sentías como un conejillo de indias.

Sí, totalmente, porque ya te digo, las irregularidades fueron muchas, ellos eran los jueces y la parte. En ese momento había bastantes rumores, de que si uno daba positivo, de que si los de arriba no pasaban controles antidoping… Un poco había esa aura en el mundo del tenis que yo creo que al final esto les sirvió como para decir: 'Sí, aquí hay controles antidoping, hay unas reglas, aunque sean las mías, las pongo yo y las hago como quiero, pero hay reglas'.

Como para decir 'Controlamos el tenis de alguna manera', ¿no?

Sí, obviamente. Si las reglas las pones tú, tú controlas el deporte y tú dices quién se puede dopar y quién no, básicamente.

Cuando viste que después Agassi admitía en su libro no solo que dio positivo, sino que mintió a la ATP sobre su caso, ¿qué sentiste?

Bueno, la verdad es que no fue muy sorprendente para mí porque básicamente ya lo sabíamos. En todo el proceso que tuve yo con ellos de negociación me di cuenta de cómo funcionaba aquello. Aquello funcionaba de la manera que si querían te sancionaban y si no querían no te sancionaban. Estaba un poco basado en lo que aportas tú a la ATP. Si nos ponemos en el contexto de que en ese momento había 16 españoles entre los 100 del mundo y yo era uno de los 16, obviamente para ellos no es ningún problema quitar a un jugador español, porque no va a tener mucha repercusión. Y así doy un escarmiento a los jugadores para decir: 'Mira, esto es lo que hay si alguien se salta las reglas'.