La paradoja de James en el Rayo y las volteretas del Barça como síntoma de lo que es este mercado

El mercado de fichajes de este lunes deja estampas casi surrealistas: un equipo que se mueve en autobús de línea ha fichado a James Rodríguez, que pasó primero por el retiro dorado de Grecia y Catar y ahora pide jarabe de Vallecas para curarse de morriña; y el Barça menos Barça se arriesga a desinscribir en enero a Dani Olmo, por el que pagó casi 50 'kilos' y regaló a Gündogan para terminar por enfadar a su nueva estrella y permitir que el mundo asistiese a un ridículo mundial. La situación parece difícil de creer: registra al mediapunta hasta Año Nuevo gracias a que Christensen se lesionó el Aquiles y a pesar de que Laporta dijo el 8 de julio que regresarían "en breve a la normalidad del 'fair play'" y que ya por aquellas fechas podían permitirse a Nico.

Los movimientos del lunes 26 de agosto empezaron por la renovación de un lastre como Lenglet hasta 2027, siguieron con el adiós de un Tigrinho como loco por salir de la jaula y terminó con la venta de Alarcón (Oporto). Ya que Matteo Moretto te cuenta toda la información antes que nadie (el Celta ha cerrado la incorporación de Marcos Alonso, el Como de Cesc viene a por Mika Mármol y Bajcetic acumula novias en LaLiga), aquí te dejamos otra visión a 96 horas de que la ventana de traspasos baje la persiana.

Otro más. El último episodio del sainete semanal es Olmo: se le inscribe, después de 10 días en la grada, al aprovechar que Christensen ha caído para ¿cuatro meses? y que podrá utilizar el 80% de su salario. Un club de tantísimo prestigio y tradición jamás perderá atracción, pero su gestión invita a que las estrellas empiecen a pensarse dos veces eso de vincular sus carreras a los vaivenes de una directiva que lleva más de una década sin estar a la altura de lo que ocurre en el césped. Hoy también se han firmado la ampliación de contrato de Lenglet, otra maniobra para sortear barreras, y el envío a Sevilla de Vitor Roque, un delantero que costó 30+31 'kilos' hace siete meses, que llegó para jubilar a Lewandowski y que se va con 353 minutos a espaldas y entre acusaciones cruzadas: Deco dice que vino porque lo pidió Xavi, Xavi porque lo trajo Deco. Y todo así. Si Flick no hubiese ganado los dos primeros partidos…

Al Cholo sólo le faltaba un central zurdo para cerrar una plantilla para competir por todo (todo es todo) y la elección genera dudas, con la creencia en algunos foros de que para traer al francés hubiera sido mejor quedarse con Hermoso, que sigue sin equipo. Clément viene de jugar poco con el Aston Villa y acompañado por la fama de blando que le persigue desde que el Barça le comió y aflojó el pistón. Y si algo necesita Simeone, después de haber encajado la friolera de 43 goles en la última Liga, es precisamente contundencia. Tendrá que trabajar para grabarle en la mente el ADN Atleti y que Giménez le contagie de todo menos la dichosa tendencia a vivir en la enfermería.

Cuando uno se acerca mínimamente al mundo del fútbol se da cuenta de que los Dioses escasean, que no todo el mundo sabe lo que aparenta y que la sintonía entre presidentes, directores deportivos y entrenadores casi nunca es como la venden. En las últimas horas se han cerrado operaciones para echarse las manos a la cabeza, empezando por el absurdo del Atleti con Vermeeren: pagaron 20 millones de euros por él en enero… ¡y se va cedido con opción de compra al Leipzig porque no es compatible con la filosofía de juego de Simeone! ¿Nadie pudo adivinarlo antes?

Marco Garcés, director deportivo del Celta, optó por desembolsar casi cinco kilos (una pasta) en Navidad por Tadeo Allende… y 10 partidos después enfila su marcha a préstamo a la Segunda italiana. Vitor Roque come aparte. En Getafe, club particular, Ángel Torres se atrevió a comentar en la previa de un derbi que Bordalás dijo 'no' a James Rodríguez y al míster, que le desmintió, le quema el cabreo porque siente que no le respetan y que sus declaraciones faltaron a la verdad. Un cuadro.

No todo va a ser malo: al movimiento del Rayo con James sólo se le puede poner un '10'. A nivel mediático, por elevar la franja a los focos del mundo entero; social, por dar un empujón de ilusión al año del centenario; y deportivo, por sumar a filas al último MVP de la Copa América y a un futbolista con hambre por demostrar que sigue vigente. Con Colombia se salió en aquel torneo (un gol y seis asistencias) y en marzo bailó a España en un amistoso en Londres. A Iñigo Pérez, después de tantas críticas hacia la confección de plantilla de Martín Presa y Cobeño, se le queda un equipo de garantías: Camello revalorizado, De Frutos enchufado, las certezas de Isi, Álvaro García u Óscar Valentín, seguridad en la meta con Batalla… Candidato a revelación.

Otro tema es que, según AS, Presa convertirá a James en el jugador mejor pagado de la historia con diferencia mientras el equipo se desplaza en el número 551 de la empresa CEVESA (ruta Madrid-El Tiemblo) a los partidos, la Ciudad Deportiva no se sostiene y el estadio, propiedad de la Comunidad y cedido anualmente al Rayo por un precio simbólico a cambio de que se ocupe de la mejora de las instalaciones, se cae a trozos. Paradójico.

Pocas incorporaciones han ilusionado más en A Coruña desde que volvió 'O Neno' Lucas que la del 'Kid' Charlie Patiño. El Dépor paga un millón de euros por reforzarse con un mediocentro del Arsenal que veía los partidos del club desde el Centro Gallego de Londres y que combina nombre y apellido al más puro estilo Iñaki Williams. La noticia habla bien de la salud de la Segunda, al alza con los ascensos de coruñeses, Málaga, Córdoba y Castellón, y del proyecto de ABANCA en Riazor. El Racing de Santander también desembolsó hace unos días una cifra superior al medio kilo por Maguette Gueye, mediocentro del Partizani albanés al que hubo que dar un toque por haber entablado conversación a través de Instagram con la mitad de la población femenina de la ciudad. Cosas de LaLiga Hypertensión.

La imagen de los carteles de los jugadores salientes del Cartagena junto a un contenedor dibuja una metáfora tan cierta como cruda: importas mientras estás y casi todos te olvidan al día siguiente de partir. Intentarán que no sea así casos excepcionales como Luis Rioja, que se va del Alavés con el cariño de toda Vitoria, y Mamardashvili, que vestirá de 'red' a partir de 2025 tras haberse ganado a Valencia. Su respeto a sus escudos debería servir a otros de aprendizaje... porque ninguno mintió: Rioja creía su ciclo en Mendi acabado, y así lo comunicó, y Mamardash defendió a los che durante toda la negociación. Que aprendan otros.