Nuria Párrizas, la tenista española que escaló en las sombras: "Si vas por tu cuenta, es difícil recibir ayudas"

Varias cosas llegaron tarde en la carrera de Nuria Párrizas (1991, Granada). Entre tantas, algo que no muchas mujeres pueden contar y que ella atesorará por siempre, como competir en el mismo equipo con Rafael Nadal: "Yo le hacía caso solo a él".

Fue en la United Cup 2023 representando a España. "Nunca me lo hubiese imaginado estar ahí con él, que esté en el banquillo, que me dijera lo que tenía que hacer. Me estaban diciendo todos, pero yo lo escuchaba a él y era 'Primero, a ver qué dice Rafa'. Nos trató a todos súperbien. Ya me quedarán siempre las ganas de volver a competir junto a él", dice a CLAY una de las representantes españolas en las finales de la Billie Jean King Cup en las que el equipo de Anabel Medina debuta este martes ante Polonia (17:00 en Movistar+).

Con sinceridad, la número 98 del ranking WTA siente que podría haber llegado antes al top 100 si hubiera contado con apoyo. Las ayudas en el tenis español, asegura, están orientadas principalmente a la gente joven. Ella, por varios años viajó sola, sin entrenador, y fue ya bordeando los 30 cuando encontró su mejor tenis. La española siente que puede retomar ese nivel si aprovecha las rachas de victorias, y no se hunde cuando le toque perder.

(Esta entrevista ha sido publicada en CLAY y reproducida íntegramente en Relevo)

"¿Es en español la entrevista? Ah, qué bueno. No me gusta el inglés, me da un poco de vergüenza. Es necesario en el tenis, pero bueno, lo hablo lo justo y necesario", dice al inicio de una conversación que exploró también sus facetas más desconocidas.

Cuando he tenido la oportunidad y he podido tener un equipo con el que viajar, he dado todo y por eso fue cuando me metí top 100. La verdad que la edad no me importa porque es como yo me sienta, físicamente, mentalmente. Claro que siempre se pueden hacer las cosas mejor, pero yo creo que he luchado con la confianza en que podía conseguirlo. A estas alturas estoy enfocada en seguir.

Sí. Mi familia es una familia humilde y al final solo era mi madre la que me podía apoyar en ese sentido, pero no había dinero y entonces yo dependía siempre de mis resultados. Así era muy difícil meterse arriba.

No, ninguno. Todo de mis equipos, de torneos más pequeños que yo jugaba para permitirme luego viajar. Yo creo que si hubiese tenido esa ayuda mucho antes, a lo mejor llevaría ya más años metida.

Yo nunca he estado en una academia. Iba a todas partes sola, viajaba sola. No podía pagarme a un entrenador. Se ayuda más, pues, a las jóvenes promesas, a la gente más joven, a gente que está en academias, ¿sabes? Si vas un poco por tu cuenta, es como que es más difícil que tengas esa ayuda. Y en España, bueno, tema wild cards y todo eso, no es tan fácil.

Pues, sinceramente, no me dio tiempo a disfrutarlo. Ahora que estoy con peor ranking me doy cuenta de que tenía que haberlo disfrutado más. Por eso ahora me siento mejor conmigo misma y valoro mis logros mucho más. En ese momento fue todo muy rápido y era como que ni me di cuenta. Me cambió mi vida como muy rápido. Tengo que seguir y los resultados terminarán saliendo.

Sí, yo he aprendido que en el tenis hay rachas, y están las buenas rachas que tienes que aprovechar e intentar alargar lo máximo posible. Luego hay que saber que ante las malas rachas, hay dos opciones, o te hundes, o sigues trabajando hasta que vuelvas a salir. Yo soy más del segundo pensamiento. Este año tuve una muy mala racha de siete u ocho primeras rondas, pero yo sabía que estaba haciendo las cosas bien y que en algún momento iba a volver a salir esa Nuria de antes.

En medio de la temporada perdí partidos durísimos, en los que tuve bolas de set, estando arriba en el tercer set. Con ventajas que se escapan. Pero en esos momentos pienso que ya llegarán las veces que me toque ganar 6-4 en el tercero, también iba a caer de mi lado. Pero para eso hay que estar ahí, trabajar. Yo estaba tranquila en el sentido de que estoy haciendo las cosas muy bien y digo, a ver, es que mejor de lo que lo estoy haciendo no puedo. O sea, en algún momento va a llegar, pero sí que a veces te desesperas cuando estás en esa racha de no ganar y no ganar.

Se hace duro, la verdad. Se hace duro porque yo soy muy competitiva, no me gusta nada perder. Antes sí que es verdad que llevaba muy mal las derrotas. Necesitaba dos, tres días para decir, vale, ya me vuelvo a sentir bien. Ahora lo llevo mejor en ese sentido, he aprendido mucho, pero sí que es verdad que creo que para todos no ganar partidos cuesta un poco de asimilar en ese sentido, pero bueno, también hay que ver de qué forma se pierden.

La verdad que para mí fue un sueño. Nunca me lo hubiese imaginado estar ahí con él, que esté en el banquillo, que me dijera lo que tenía que hacer. Yo le hacía caso a él, solo a él. Me estaban diciendo a todos, pero yo lo escuchaba a él y era a ver qué dice Rafa, primero a ver qué dice Rafa. Él me sorprendió para muy bien, nos trató a todos súperbien. Ya me quedarán siempre las ganas de volver a competir junto a él.

Al final lo conocí más personalmente. Yo lo conocía de verlo en los partidos, con su equipo, pero ahí como que he podido conocerlo un poco más y ver de cerca la gran persona que es. Yo me quedaría escuchando por mucho tiempo lo que dice y aprendería mucho. Le gusta mucho hablar.

Habla de todo un poco. Me pareció interesante todo lo que contaba.

Con la que más he coincidido es con Paula, que me llevo muy bien. Siempre me he sentido bien con el equipo, hay muy buen rollo y la verdad que con todas me llevo bastante bien. Con algunas entrenamos siempre que estamos en los torneos.

Si te digo la verdad, no ocupa ningún lugar. O sea, creo que puedo tener una idea, pero prefiero reservármelo porque ahora mismo tengo clarísimo que quiero alargar todo lo posible mi carrera y ya tendré el tiempo para pensar qué quiero hacer cuando deje de jugar. Pero ahora mismo, jugar hasta morir.

Bueno, hobby es estar con mi familia, tengo ahora dos perritos, cuidar de ellos y pasar tiempo con mis amigos. O sea, la verdad que disfrutar más de la vida en sí que lo que hacía antes, que al final estaba siempre de torneo y no aprovechaba nada. Me la pasaba en el hotel, o en la pista entrenando y no hacía nada con mi vida. Y ahora pues sí que es verdad que estoy haciendo muchas más cosas y así no te comes tanto la cabeza y estás pensando en otras cosas. Si no es estar encerrado pensando en tenis, tenis, tenis.

Bueno, este me lo hice hace poco, que este es de Xena. Ahora tengo dos perritos, Xena y Goku. Me tendré que hacer el de Goku. Pero no, la verdad es que me quiero quitar algunos, estoy en ello. Este me lo estoy quitando con láser. Era un diamante. Llevo ya ocho sesiones, son como diez. La verdad que es un coñazo, pero sí que me quitaría algunos, aunque duele mucho.