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Islam Makhachev mira a Ilia Topuria mientras la UFC le utiliza para 'estrenar' la casa de los Clippers

La UFC visita este sábado, para el UFC 311, por primera vez el Intuit Dome y ha puesto a su número uno libra por libra a cerrar el evento. Makhachev expone el cinturón del ligero ante Arman Tsarukyan.

Islam Makhachev./UFC
Islam Makhachev. UFC
Álvaro Carrera

Álvaro Carrera

"Tendremos conversaciones en el futuro seguro. No para de hablar de mi", apuntó Islam Makhachev en una entrevista antes de cerrar 2024. El ruso, de 33 años, se refería a Ilia Topuria. El hispanogeorgiano, campeón del peso pluma, sueña con subir al peso ligero y ganarle para convertirse en doble campeón. El Matador ha cambiado su mentalidad y "aceptará" los designios de la empresa, pero su deseo está ahí. Es una pelea que puede interesar a la empresa, pero antes deben cumplir. Islam tiene trabajo este sábado e Ilia sigue esperando la resolución del UFC España.

La UFC paró un mes por vacaciones. Volvió la semana pasada con un Fight Night en el Apex, pero el verdadero retorno se produce este sábado. Estados Unidos tiene, habitualmente, un único foco en el mes de enero: la NFL. Por ello, la compañía sabe centrar muy bien sus tiros. Sólo habrá dos shows en el primer mes del año y el PPV de 2025 será muy llamativo.

Para cumplir esa premisa, la mayor empresa de MMA del mundo ha querido tener un doble foco. El Intuit Dome, casa de Los Ángeles Clippers, ha supuesto una revolución en cuanto a lo que ofrece como pabellón. Todos los shows rutilantes quieren estar allí y UFC, como habitualmente, ha logrado ser de los primeros. Por ello, el estreno en ese recinto es importante. Los Ángeles es una ciudad clave para Estados Unidos y poder encontrar un lugar referente es vital para ellos.

Un gran escenario y un estreno de año necesitaba un gran rostro. Nadie mejor que el número uno libra por libra para la empresa, Islam Makhachev. La ecuación es perfecta y les ayuda, además, a cerrar capítulos. La pelea entre el ruso y el número uno del ranking del peso ligero, Arman Tsarukyan, debía haberse dado en el mes de octubre en Abu Dhabi. La lesión del campeón provocó el aplazamiento. Además, el armenio agredió a un fan al salir a su último combate y le costó una sanción de nueve meses que no hubiese sido impedimento porque con un vídeo anti bullying se la habrían reducido a seis. Por tanto, fue el físico de Islam el que cambió los planes.

Makhachev está recuperado y debe demostrar su condición de número uno. En 2024 se exhibió ante Dustin Poirier en lo que supuso su vuelta a Estados Unidos. Todos lo vimos, pero pelear una vez al año es un dato demasiado pobre para el hombre póster, así lo dice el ranking, de la empresa. Alex Pereira e Ilia Topuria vienen empujando fuerte para hacerse con ese hueco. La lucha es feroz e Islam debe marcar territorio.

La pelea de este sábado ya es conocida para Islam. Ya ganó a Tsarukyan en abril de 2019. El precedente está, pero hay que tener en cuenta que Makhachev disputó ese día su séptimo pleito en la empresa y el armenio debutaba. Tsarukyan ha evolucionado mucho. Ha ganado nueve de sus siguientes diez pleitos y viene de derrotar a Dariush y, sobre todo, a Charles Oliveira. Son palabras mayores y merecía la oportunidad. Pese a ello, el papel de favorito debe ser para Makhachev. El ruso se ha mostrado siempre solvente y es el campeón. Habrá que ver cómo se desarrolla la pelea. Arman es un tipo fuerte que tiene una gran potencia física e Islam es experto en saber dominar. Ambos vienen de la escuela rusa (Tsarukyan vivió en ese país desde los 3 años), por lo que no será nada extraño para ninguno lo que su rival le traiga.

Makhachev necesita pelear y demostrar. Esa presión la debe cargar en su espalda el "sustituto de Khabib", como el propio Eagle le definió. Para hacer frente a ese legado necesita además grandes nombres en su currículum. Si se piensa en grandes peleas se debe tener en la cabeza a Topuria, pero eso es futuro y él debe ratificarse en el presente, primero, este sábado.