FÚTBOL SALA

Palma exhibe su versión más cosmopolita para revalidar la Intercontinental ante Magnus

El conjunto balear acumula dos títulos mundiales y otros dos europeos consecutivos en 2023 y 2024, pero sigue sin estrenar su palmarés nacional.

Luan, Rivillos y Fabinho celebran el triunfo ante Magnus Futsal./ PALMA FUTSAL
Luan, Rivillos y Fabinho celebran el triunfo ante Magnus Futsal. PALMA FUTSAL
Gustavo Muñana

Gustavo Muñana

Si a nivel de Selecciones, España atraviesa la peor crisis de su historia, a nivel de clubes, el Illes Balears Palma Futsal reina en el mundo y en Europa. Es difícil explicar la metamorfosis que sufre la escuadra balear cuando juega con el pasaporte entre los dientes. Sigue sin ganar un título nacional después de haber perdido las tres finales patrias que ha disputado (Copa del Rey en 2016, Supercopa de España y Liga en 2022), pero es el bicampeón de la UEFA Futsal Champions League en 2023 (como debutante) y 2024 y revalidó la hegemonía planetaria lograda el pasado año imponiéndose en la final de la Copa Intercontinental al Magnus Futsal (4-1) con un hat-trick de Fabinho.

El Palau de Son Moix es una fiesta de 'Erasmus' permanente. Ha visto en dos años cinco fases de la máxima competición europea , en la que sigue invicto desde su debut, incluyendo una Final Four y una final de una Intercontinental. En breve disfrutará de una nueva ronda de la máxima competición europea, pero hoy se volvió a llenar y se engalanó para coronarse como virrey del Mundo por segundo año consecutivo frente al campeón de la Copa Libertadores. Y lo hizo con el embajador del torneo, 'O Rei do Futsal' Falcao, en el palco admirando la grandeza del sueño del añorado Miquel Jaume, el fundador del club mallorquín, cuyo legado ha sido eternizado por José Tirado en los despachos y Antonio Vadillo en la pista, que no se fue al Benfica para seguir reeditando títulos allende nuestras fronteras.

Magnus Futsal llegaba a España herido tras ser eliminado de los playoff de Brasil por la alineación indebida de Dieguinho en un partido de octavos de final. La escuadra de Sorocaba quería redimirse de su gravísimo error administrativo recuperando la Intercontinental, que ostentó en 2016, 2019 y 2020, pero se topó con la versión más cosmopolita del Illes Balears Palma Futsal. Un avión solo con asientos de business y una tripulación repleta de estrellas españolas y brasileñas que recorre el mundo cosechando éxitos. Un ejemplo de éxito deportivo y sostenibilidad económica, que se ha convertido en un fenómeno en la Isla.

La primera parte fue un intercambio de golpes. Dos colosos midiéndose pulgada a pulgada. Las ocasiones más claras fueron para los españoles, pero André Deko estuvo muy acertado bajo palos. Palma imprimía un ritmo brutal al partido, sabedor Vadillo que los brasileños se desorientan en choques con revoluciones altas y además Ricardinho perdió a uno de sus cracks, Leandro Lino, por lesión a los 53 segundos. Dieguinho parece maldito y un pésimo saque de esquina del ala zurdo de Magnus acabó con un contragolpe balear que culminó a la perfección Ernesto ante su ex equipo. Un 1-0 a un minuto del descanso que hacía justicia al dominio local.

Tan solo a Pedro Galán (presidente de la Comisión de Árbitros de Fútbol Sala de la Real Federación Española de Fútbol) se le podía ocurrir la idea de traer a dos árbitros egipcios a una final entre españoles y brasileños. A pesar de la escarapela FIFA y de su condición de mundialistas en Uzbekistán, los colegiados Mohamed Youssef y Tarek Elkhatby fueron lo peor del partido con diferencia. La envergadura del choque les supero constantemente y en el desconcierto arbitral, llegó el gol del empate de Magnus. Charuto igualó la contienda ante el que se será su equipo a partir de enero a los dos minutos de la reanudación. Palma se rehízo segundos después con el 2-1 al sorprender Fabinho a Deko con un derechazo en un libre directo.

El partido se trabó. No fluía la calidad. Los pívots dominaban y los jugones no encaraban. A cinco minutos para el final apareció Luan para recordar con una antológica doble parada porque fue el MVP de la primera Champions. El portero armenio-brasileño evitó con una providencial mano el gol del empate de Carlinhos. Ricardinho recurrió al portero jugador con Joaozinho y ahí Neguinho se agigantó al lado de Marcelo y de 'Super' Mario Rivillos, que a sus 34 años regresará el domingo a la Selección con Jesús Velasco. El ala zurdo madrileño vuelve como bicampeón de Europa y del Mundo ocho años después del ostracismo al que le sometieron de manera incomprensible Venancio López -viéndole en directo en la grada de Son Moix, fuera del palco eso sí para no incomodar protocolariamente a Antonio García Plata- y Fede Vidal.

El encuentro enloqueció y Fabinho completó su gran noche con un hat-trick en la defensa del juego de cinco del equipo brasileño. El ala-pívot brasileño fue el MVP de la final tras marcar dos tantos desde su propio campo a portería vacía para certificar el aplastante dominio español e infringir la primera derrota de su historia en una final intercontinental al Magnus Futsal antes los gritos de campeones de su afición, que ya ni siquiera se frota los ojos con un nuevo título internacional, el primero de la temporada y el cuarto de su historia. Otra gesta planetaria para el Illes Balears Palma Futsal, la capital futsalera del Mundo, que está obligada a implantar su modelo de éxito internacional en España.

Con Lauren Morel (Futsal Competitions Manager de la UEFA) en el palco al lado del presidente de la Liga Nacional de Fútbol Sala, Javier Lozano, la empresa Mundo do Futsal y Palma realizaron un espectacular despliegue organizativo demostrando la necesidad de oficializar este torneo a pesar de las reiteradas negativas de FIFA. Tras disputarse las últimas ediciones en Qatar, Tailandia y Brasil, era la quinta vez que se jugaba en territorio español. Palma se unía así a Barcelona, Puertollano, Granada y Alcalá de Henares en el selecto club de ciudades españolas que han sido sede de este torneo y el equipo de la Isla se quedó con el tesoro de la Intercontinental por segundo año consecutivo.