Movistar Team, Enric Mas y una transición que es más bien un viaje a Ítaca
Un año después de la retirada de Alejandro Valverde, el conjunto telefónico continúa debatiéndose en busca de su hueco dentro de un pelotón en plena marejada.
Ha pasado todo un año desde que nació Relevo y se celebró la anterior edición de Il Lombardia, última clásica Monumento de la temporada ciclista que el año pasado marcó un punto de inflexión para Movistar Team por dos razones. La primera fue la retirada de Alejandro Valverde, la clave de bóveda de toda la estructura a lo largo de sus 15 temporadas en activo militando en las filas de Eusebio Unzué. La segunda fue la actuación de Enric Mas, quien por méritos propios partió desde Bérgamo como favorito legítimo a la victoria.
Aquel sábado 8 de octubre de 2022, el mallorquín disputó el triunfo tú a tú contra Tadej Pogačar, miembro del ilustre sexteto de superclases que domina el ciclismo mundial. Venía de batirle en el Giro dell'Emilia y en Lombardía fue capaz de seguirle, de relevarle y de atacarle para hincar la rodilla únicamente en la recta final, donde el esloveno sacó partido de su superior punta de velocidad. "Aquel día se salía", evoca con cariño Valverde. "Es la vez que más fuerte le he visto. Siempre muestra un muy buen nivel, pero es que a finales de 2022 estaba tranquilo, confiado…"
Han pasado 364 días y Mas no es favorito a luchar por el triunfo en la clásica de las hojas muertas. 30º en el Ránking UCI, el 5º puesto en la Vuelta al País Vasco se conjuga con el 6º de La Vuelta como mejores resultados de la temporada. Allende de los números, la sensación de que no ha estado nunca a la altura de Pogačar, Vingegaard y compañía. "La caída del Tour le ha marcado mucho", lamenta Valverde. "Se tuvo que retirar el primer día y no ha podido entrenar como le gustaría ni llegar como le hubiera gustado a La Vuelta. Y, una vez empiezas una 'grande' lejos de tu plenitud, es muy complicado revertir la situación. Ahora mismo cada carrera se disputa al límite y, si no estás perfectamente preparado, lo vas pagando día a día. Le ha faltado ese puntito para encontrarse".
Gracias por todo vuestro trabajo durante #LaVuelta23 equipo 💙#RodamosJuntos pic.twitter.com/01qbh5SPnI
— Enric Mas Nicolau (@EnricMasNicolau) September 17, 2023
Y, con todo, sigue siendo la mejor opción de Movistar Team para brillar en Il Lombardia. Su jefe de filas indiscutible, avalado por su trayectoria y su solidez. Talentoso y serio en su preparación, Enric Mas siempre está ahí. "Y ahora mismo también está muy bien", defiende Valverde. "En Emilia, frente a Primoz Roglic y compañía, estuvo disputando hasta el final y acabó cuarto. También en Lombardía lo puede hacer muy bien".
En un equipo históricamente acostumbrado a ser actor, los resultados de Mas esta campaña han sido obtenidos como espectador, distante de esos que se juegan los puestos de honor a quienes en septiembre y octubre del año pasado podía mirar a los ojos. Como líder de Movistar Team, en cuyo venerable palmarés figuran 15 grandes vueltas, a Mas se le compara con Perico, con Indurain, con Nairo Quintana, con el mismo Valverde. Pero ni aquellos superclases capaces de coleccionar rondas y clásicas de primer nivel eran Enric, autor de seis victorias en siete temporadas como profesional, ni corrieron en esta época en la que Movistar no es Banesto, ni Reynolds.
Hoy es un día triste para muchos del ciclismo.
— Pedro Delgado (@pedrodelgadoweb) September 28, 2023
En 1983 mi vida se cruzó con Francis Lafargue, desde entonces hemos compartido sueños que algunos se han hecho realidad, otros a ser más fuertes.
El bueno de Francis nos ha dejado esta mañana.
DEP pic.twitter.com/VobdJOAGBd
En la última década y media, el pelotón internacional ha cambiado hasta quedar irreconocible. De una primera división con tres equipos españoles y un techo de 15 millones de euros de presupuesto para Discovery Channel y T-Mobile hemos evolucionado hasta un paradigma donde los 20 millones de Movistar Team marcan el umbral mínimo para ser competitivo y los 40 el listón a franquear para aspirar a figurar constantemente en las mejores carreras del mundo.
Se discuten fusiones improbables porque el dinero acaba por imponerse. Los súper equipos monopolizan los éxitos y los talentos a la par que descubren y atesoran cada pequeña clave para mejorar el rendimiento de sus ciclistas y distanciarse de aquellos que, como Movistar Team, cuentan con menos recursos y/o menos audacia y deben resignarse a seguir su pista. La irrupción de Team Sky (nacido en 2010; hegemónico entre 2012 y 2018) supuso, más allá de la narrativa de las 'ganancias marginales' y el cuidado de los detalles, un giro tan paulatino como copernicano hacia un deporte más tecnificado y científico en que la historia y tradición de la estructura navarra era un activo nulo.
Jumbo-Visma y UAE Team Emirates han sublimado (y versionado) el modelo británico mientras Movistar Team trataba de girar la moneda con cambios de calado en su efectivo. Sin los cénit de Quintana y Valverde para mantener en alto el pabellón, el mánager general Eusebio Unzué emprendió una transición cristalizada en la post-temporada de 2019 con 12 bajas y 14 fichajes de los cuales sólo 6 continuarán vistiendo de azul en 2024. También se apostó por un nuevo cuerpo técnico liderado por Patxi Vila, quien igualmente abandonará la disciplina telefónica este invierno para dejar paso a un nuevo grupo de trabajo capitaneado por Iván Velasco y Xabier Muriel.
Vamos a por más! Paso a paso… https://t.co/TWOq5k6hrh
— Ꭵᐯᗩᑎ ᐯᗴᒪᗩᔕᑕᗝ (@ivanvelasco) September 20, 2023
Aquella transición no arrojó los resultados deseados. A la conclusión del período 2020-2022, Movistar Team salvó su licencia UCI WorldTour (primera división mundial) gracias a "dos meses de estrés máximo" en los que sacó a relucir su mejor versión. 2023 ha situado al bloque telefónico 12º del ranking, con 10.600 puntos que suponen 4.000 de colchón sobre el Arkéa-Samsic, la línea del descenso, y 18.000 de distancia respecto a UAE y Jumbo, la línea de la excelencia a la que sólo se puede aspirar con esos 50 millones de euros anuales que sólo se pueden encontrar en pozos de petróleo (UAE, Bahrain), en los bolsillos sin fondo de un millonario enamorado del ciclismo (Ineos) o en las cuentas de una empresa multinacional con liquidez infinita (Jumbo, Lidl).
A Movistar Team le toca dar nuevos pasos en una transición que se alarga y cuyo único fin realista es asentarse en la primera mitad de la tabla del UCI WorldTour, a la altura de otros proyectos históricos pero no acaudalados como Groupama-FDJ o Lotto-dstny. A la hora de confeccionar su plantilla, pendiente de los últimos retoques, se han afrontado conversaciones duras como instar a la retirada a hombres con un potosí de ciclismo en la cabeza y unas últimas gotas de bici en las piernas como Imanol Erviti o José Joaquín Rojas, cuyo destino no está todavía sellado.
¡Cómo disfruto de la bici a tu lado @jjrojillas !💙#RodamosJuntos pic.twitter.com/VR0j7vztpR
— Enric Mas Nicolau (@EnricMasNicolau) October 3, 2023
En este 'mercato', como en buena parte de carreras de primerísima fila, Movistar Team ha quedado reducido a un papel de espectador. Pese a los rumores, Primoz Roglic no llegó a ser una posibilidad. El fichaje con mayúsculas, la auténtica aspiración, era un Carlos Rodríguez con quien se había trabajado en tiempo y forma para que asumiera la jefatura de filas del equipo y aliviara la presión de un Enric Mas que le esperaba con los brazos abiertos y a quien, según Alejandro Valverde, "le hubiera venido bien compartir galones" con el granadino. Sin embargo, Rodríguez optó a última hora por quedarse en Ineos Grenadiers, rehusando ser el pilar del nuevo proyecto deportivo telefónico para quedarse en el equipo que más decididamente apostó por él desde el principio.
Buenos días 👋🏼
— Movistar Team (@Movistar_Team) October 4, 2023
Sabemos que muchos esperáis novedades -y algunos estáis molestos por la espera- en torno a nuestro equipo masculino 2024.
En unos días os daremos más info. Hablaremos primero de nuestra plantilla actual y después, de incorporaciones.
Gracias por la paciencia 🙂 pic.twitter.com/6HZ9xUiQXf
El capítulo de altas, con sólidas incorporaciones extranjeras como Rémi Cavagna y promesas como Pelayo Sánchez, Carlos Canal, Javier Romo o Manlio Moro, no acaba de compensar en lo inmediato bajas de peso como Matteo Jorgenson (pichichi de la temporada a nivel de puntos), Carlos Verona, Óscar Rodríguez o los veteranos que valoran 'colgar' en busca del relevo generacional. Tal y como sucedió hace cuatro años, serán el futuro, el desarrollo de estos talentos y la capacidad para conservarlos los que dicten si ésta ha sido una ventana de fichajes mala, buena o regular. De esto, y de mucho más, depende la llegada a puerto de una transición que, en el siempre cambiante y exigente entorno de la élite, deviene inevitablemente un viaje a Ítaca.