El encaje de Carlos Rodríguez en Movistar, pendiente de un contrato en peligro... y de Enric Mas

Cada día que pasa, el nombre de Carlos Rodríguez es más grande. No solo por su desempeño en el Tour de Francia, donde el joven de Almuñécar ha cautivado al gran público por méritos propios —con una victoria de etapa y una momentánea cuarta posición en la clasificación general—, sino por todo lo que arrastra al bajarse de la bicicleta. Perfiles, entrevistas e incesantes rumores sobre un futuro que, si bien parecía escrito, podría volver a enredarse.

El joven granadino cumple este año el último de sus cuatro años de contrato en el Ineos Grenadiers, el equipo británico —anterior Sky— al que llegó con tan solo 19 años. Con ellos ha ganado etapas en la Vuelta al País Vasco, el Tour del Porvenir y, más recientemente, en el Tour de Francia. También venció en el campeonato de España de ciclismo en ruta y fue séptimo en la última Vuelta a España, su primera grande como profesional. No obstante, hace poco más de un año, Relevo adelantó la noticia que hoy revolotea sobre el granadino: Movistar quería ficharlo.

La situación es espinosa. Rodríguez firmó un compromiso con el cuadro telefónico hace solo unos días, según L'Equipe. Ese documento, sin embargo, no es el contrato oficial, pues por legislación no podría rubricarse tal acuerdo hasta el próximo 1 de agosto, justo una semana después de que concluya el Tour de Francia. Es decir, lo que hay firmado es un simple preacuerdo.

Y no es el único aspecto a tener en cuenta. En ese papel, las cantidades han quedado desfasadas. Desde que se firmó, Rodríguez se ha revalorizado mucho, mostrándose como un vueltómano de élite ante los mejores ciclistas del mundo y ganando la durísima etapa de Morzine por delante de Vingegaard, Pogacar y el resto de favoritos. E Ineos, claro, no ha dejado pasar por alto el progreso de su joven promesa.

Desde que se confirmó el interés de Movistar, hace ya más de un año, el conjunto británico ha seguido una táctica de persuasión para conseguir que el español continúe en sus filas. Un ejemplo. En los Campeonatos de España de 2022, un evento al que los equipos extranjeros no suelen destinar técnicos para acompañar a sus ciclistas, Ineos envió a cuatro personas para mimar al de Almuñécar y a su compañero Omar Fraile: un mecánico, un masajista, un preparador y un director. Rodríguez no solo no defraudó, sino que aquella tarde estival se proclamó campeón de España.

Es el ejemplo más tangible, si, pero no el único. Por algo la estructura británica y Giuseppe Acquadro, el mánager del joven corredor, han reconocido públicamente que no renuncian a su continuidad en las filas de Ineos. "Hay un precontrato firmado con Movistar, pero no un contrato. Ineos sigue siendo una posibilidad", declaró este lunes el agente italiano a El País. Dave Brailsford, mánager general del equipo inglés, visitó a los suyos este lunes durante el segundo día de descanso, jornada idónea para cerrar contratos, fichajes y demás movimientos del mercado. Algo se está moviendo.

Sea como fuere, de confirmarse el traspaso y en caso de que el precontrato evolucione a contrato, Rodríguez llegaría a Movistar como piedra angular del proyecto. Tal es así que la idea del conjunto telefónico es que el granadino asumiera el liderato del equipo en el Tour de Francia desde el primer momento. Enric Mas, por su parte, sin suerte en el Tour, como han reconocido sus propios directores, pasaría a correr el Giro de Italia.

La duda, eso sí, estaría en La Vuelta, la tercera grande del calendario ciclista. En el seno de Movistar todavía no tienen claro qué estrategia seguirían en la ronda española, donde Mas ya ha sido subcampeón en tres ocasiones. Las opciones, así, son múltiples.

No obstante, lo que es seguro es que ambos ciclistas, Rodríguez y Mas, recibirían un trato equitativo como hombres franquicia de Movistar. No parece que fueran a tener problemas, eso sí, ya que el propio mallorquín reconoció a Relevo el pasado diciembre que le encantaría compartir equipo con Rodríguez.

"Yo encantado de que gente joven de España venga al equipo", aseguró el balear en Alicante, donde se concentraba con el resto del Movistar. "Carlos me transmite buena onda sin conocerlo, y que pueda venir al equipo para mí es una pasada. Es verdad que se ha hablado, pero no sé si va a venir o no. Ojalá en un futuro podamos compartir equipo y disfrutar juntos".

Ahora bien, ¿tiene dinero Movistar para asumir la revalorización de Rodríguez? Todo parece indicar que no. No al menos si uno atiende a las declaraciones que ha ofrecido en las últimas semanas el propio Eusebio Unzúe, director del equipo, que se aferra a otros aspectos más "sentimentales" que sí puede ofrecer la estructura telefónica ante un mercado crucial.

Lo cierto es que el equipo español rastreó el mercado el pasado otoño para encontrar un patrocinador que les colocara en la primera línea del UCI WorldTour, a la par con los grandes bloques del pelotón. Pero los primeros intentos fracasaron, así como el propósito de establecer vínculos de interés con Arabia Saudí. "Las cosas van un poco más lentas de lo que a veces nos gusta", lamentó Unzúe en conversación con este medio.

El interés desmedido por Carlos Rodríguez, eso sí, evidencia una estrategia reconocida por el propio cuadro navarro en numerosas ocasiones: quieren una estrella española en sus filas para la próxima década. El de Almuñécar, de tan solo 22 años, seis menos que Enric Mas, parece el indicado. El otro gran baluarte del ciclismo patrio, Juan Ayuso, de 20, firmó el año pasado una extensión de su contrato con el UAE Emirates Team hasta verano de 2028, por lo que, ahora más que nunca, en Movistar todas las miradas apuntan al mismo hombre.