Tapia y Coello ratifican su dominio reventando récords de imbatibilidad ante un Galán que dio el susto

Son de otro planeta. Agustín Tapia y Arturo Coello siguen demostrando por qué son los números uno. La pareja hispanoargentina ha conseguido en Dubái el undécimo título de la temporada, obteniendo 30 victorias consecutivas en 126 días. Con el aliciente de haber ganado 60 juegos y solo haber perdido uno. Números estratosféricos a la altura de dos genios del deporte de la pala.

Al otro lado de la red, como viene siendo habitual esta temporada, esperaban Alejandro Galán y Fede Chingotto, la única pareja que ha conseguido hacer sombra a los Golden Boys en 2024. La final prometía un gran espectáculo, y así fue hasta que unos problemas en la rodilla de Galán hicieron que el jugador madrileño tuviera que jugar mermado.

El partido arrancó de una manera fulgurante con ambas parejas dominando sus servicios. Las estrategias que Martín Canali y Jorge Martínez habían diseñado, de momento funcionaban. Hasta que llegó el quinto juego donde Tapia y Coello rompieron el saque a Galán. Aprovecharon la primera de las dos bolas de break que tuvieron para adelantarse en el marcador. Una ventaja que a la postre acabaría siendo definitivo para cerrar el primer acto por 6-4.

En el paso por banquillos, el profesor Martínez intentaba espolear a sus pupilos aconsejándoles que no dudaran en los puntos decisivos. Que tuvieran fe en su juego y en su calidad. Tras escuchar a su entrenador, Galán y Chingotto salieron a la pista con la intención de dar la vuelta al partido, algo que iba a ser muy complicado. Tras arrancar las segunda manga, fue también en el quinto juego cuando Agustín y Arturo rompieron la igualdad quebrando el servicio de Galán. Después de ese momento clave iban a llegar los problemas físicos al cuerpo del madrileño.

Unas molestias en la rodilla izquierda de Galán hicieron que se parara el partido para que el responsable médico pudiera atender al jugador de Leganés. Tras la atención, Ale decidió volver a la pista, aunque las sensaciones no fueron del todo positivas. Continuamente mostraba gestos de no estar cómodo dentro de la pista. Aun así, tiró de honor, acabó el juego y volvió a pedir la atención médica.

"Prefiero jugar con dolor, pero que la rodilla no se me vaya", después de estas palabras de Galán, el médico decidió aplicarle un vendaje compresivo para asegurar la articulación. Poco duró el remedio porque Galán decidió quitárselo después de varios puntos. Finalmente, Tapia y Coello consiguieron cerrar el segundo set y el partido con un contundente 6-3.

Pese a que durante la semana las cifras de asistencia no han sido del todo buenas, el día de la final el público dubaití ha respondido. 5.100 han abarrotado la pista central del Premier Padel P1 de Dubái.