Un enfado de Ancelotti y dos estilos para explicar cómo el Real Madrid alcanzó su última proeza

1, 2, 3, 4 y así hasta 38. El Real Madrid de Carlo Ancelotti arrolló al Espanyol (4-1) y con eso amarró un registro histórico: una 'Liga' sin perder. Desde la derrota en el Metropolitano en la sexta jornada de la temporada pasada, los blancos han enlazado 38 partidos sin derrotas en LaLiga y ya miran a un punto al Barça de Hansi Flick, que no tendrá una empresa fácil esta tarde en Vila-real (18:30). Son 28 victorias y 10 empates. Sólo Alberto Ormaetxea, entrenador de la Real, había conseguido algo igual entre 1979 y 1980. Ni el equipo mágico de Guardiola ni el Madrid de Mourinho o Zidane aguantaron tanto sin caer.

El hecho lo resaltó el vestuario ("es más difícil de lo que parece", dijo Rodrygo) y pone de relieve la maestría de Carletto en un momento delicado. Antes de recibir a los pericos anunció que quiere rock and roll ("a la afición le gusta vencer, no dar mil toques"), pero para derribar la muralla de Joan salió con cuatro centrocampistas, con Güler en banda y sin Vinicius, y su equipo gustó en la primera mitad. Con el turco se ganó armonía y construcción. Entre tanto guitarrista, un violín como el de Arda tampoco desentona. "Hemos jugado más rápido, tocando con más velocidad, haciendo algunos movimientos mejor y cubriendo bien el área", aseguró el entrenador.

Para completar un rosco de 38 letras no basta sólo un estilo. Ancelotti no moverá a su tridente de ataque en los días grandes, pero tampoco renuncia a añadir un cuarto medio contra rivales que se encierren y ante los que toque elaborar. Güler, Bellingham y hasta Ceballos pueden amoldarse a la banda y el 4-4-2, para masticar bien a los rivales, es una alternativa que se valora en determinados contextos. En cualquier caso, el italiano mantuvo su habitual 4-3-3 contra el Espanyol, pero sumó pausa con Arda. Luego, cuando quiso acelerar con Vinicius, lo consiguió.

A pesar de las críticas recibidas en este inicio de temporada, el cuerpo técnico pone de relieve que el equipo ya se ha llevado un título al bolsillo (la Supercopa de Europa), que continúa sin irse de vacío de ningún estadio y que las sensaciones van a mejor. Vinicius y Mbappé se entienden, Rodrygo parece otro desde Anoeta, Bellingham hace fluir el juego, Valverde no baja el pistón... El staff puso como ejemplo a la plantilla tramos concretos de partidos (encantaron los tres primeros minutos del segundo tiempo contra el Valladolid) y cree que las actuaciones son cada vez más redondas y prolongadas pese al borrón defensivo del Stuttgart.

Y para eso, que el grupo crezca y pelee por todo, será importante manejar los dos estilos: se correrá más que la campaña pasada por la llegada de Mbappé, pero hay piezas capacitadas para agarrar la pelota y equilibrar. Modric, sin ir más lejos, cuajó un encuentro notable frente al Espanyol y encontró el respaldo del técnico: "Quien tiene minutos se acerca más rápido a su condición óptima. Luka siempre es una garantía, juegue desde el 1' o desde el 70'. Está a su máximo nivel". Nadie dio más pases (85) ni entregó más balones en el último tercio (31) ni centró más (nueve) que el capitán.

A Camavinga también se le espera como agua de mayo. El club le ha designado como el sustituto ideal de Kroos y se le ve como el único futbolista con una capacidad ecuánime para robar y generar fútbol. Con su recuperación en la recta final (la próxima semana empezará a trabajar con el grupo y se le espera para el derbi del domingo en el Metropolitano), volver a contar con él supondrá otra alegría para Ancelotti. Ceballos sigue los pasos marcados y se encuentra incluso en disposición de recortar plazos.

Eso sí, el entrenador acabó cabreado por un factor que le preocupa: su equipo no arranca (ni marca) en las primeras partes. En los últimos diez duelos oficiales sólo ha anotado un gol antes del descanso. Fue en Mallorca, en la jornada 1. "Al míster nos lo encontramos un poco enfadado. En la charla previa nos dijo que estuvimos muy mal en las primeras partes de los partidos anteriores. Teníamos que hacerlo mejor hoy... y lo hemos hecho, pero nos hemos ido 0-0", reconoció Rodrygo en Real Madrid TV.

Ancelotti también habló de ello: "Es un dato que me llama la atención. Lo he comentado con los jugadores antes del partido, a ver si podíamos cambiar esta dinámica. No lo hemos conseguido, pero sí hemos jugado con más intensidad". Antes de que llegue el peligro, y sobre todo el choque frente a los de Simeone, conviene corregir un hándicap que puede costar caro. Mientras tanto, el Madrid ya encara el duelo de este martes frente al Alavés de Carlos Vicente (21:00, Bernabéu) con la ambición de estirar la racha a los 39 y estampar otra vez más el nombre de su técnico en los libros de oro. Por si le faltaba algún récord...