Imanol Alguacil saca pecho por la personalidad de su equipo: "Estos jugadores van a muerte con mis ideas"

Imanol Alguacil ofreció un nuevo giro de guion en una temporada que, todo hay que decirlo, ha empezado como el rosario de la aurora. El oriotarra sigue sin acertar con la tecla que haga que su equipo ofrezca una versión cercana al de los últimos años, "la envidia de media Europa", como recordó el propio entrenador de la Real en la rueda de prensa previa al choque frente al Niza. Al término de la misma, seguro, que nadie de los allí presentes pensaba que Alguacil iba a apostar de salida por un equipo plagado de canteranos, hasta nueve jugadores formados en Zubieta, acompañados de Álex Remiro y Brais Méndez, dos futbolistas fundamentales en la mejor Real de los últimos años, y sin ninguna de las incorporaciones llegadas en el pasado mercado. 

Su elección ha sorprendido a propios y extraños, pero Imanol saca pecho por el carácter demostrado por los suyos en el estreno en una nueva edición de la Europa League. "Este equipo si algo tiene es muchísima personalidad", ha dejado claro en su comparecencia ante los medios. En su opinión hay motivos de sobra para valorar de manera positiva el rendimiento de la Real frente al Niza. "Cambio de dibujo, mucho canteranos. Para muchos, era el primer partido de titular. Siempre digo lo mismo, estos jugadores van a muerte con mis ideas, con lo que les digo", ha asegura el oriotarra. "Una vez más felicitarles aunque no hayamos ganado el partido. Tiene muchísimo mérito lo que han hecho", puntualiza.

Cree que los aficionados tienen motivos más que suficientes para estar orgullosos de sus jugadores. "Yo lo estoy", confirma. "Soy el entrenador de la Real Sociedad y la Real Sociedad es esto, cantera, y no era fácil", valora. "Hemos venido a un estadio en el que este equipo está en un estado muy dulce. Está siendo muy atrevido, gente muy buena, vertical, con mucha calidad. Creo que hemos hecho un gran primer tiempo. Contento a medias porque en el segundo tiempo hemos bajado a nivel físico y no hemos podido mantener el nivel del primer tiempo", lamenta el entrenador de la Real.

A la hora de hacer un análisis más global, habla de un "primer tiempo abierto, con ocasiones en las dos áreas". Lamentó no haber acertado en las dos ocasiones de Mikel Oyarzabal, pero, sobre todo, se queja del tanto del empate, que llegó en el último minuto de esa primera mitad. "Ha sido una pena", se resigna. "Creo que hemos hecho un buen primer tiempo, de una manera diferente, pero muy buen primer tiempo", sostiene. "En el segundo no hemos tenido el balón tanto como me hubiera gustado, pero había mucho cansancio. Lo que sí hemos hecho es defender muy bien y estoy contento a medias, sobre todo después de haber visto el primer tiempo".

Califica de "penaltito" la pena máxima pitada tras el agarrón de Pacheco a Dante. "Es una pena. Siempre decimos que en Europa no se pitan muchas de las faltas que se pitan en la liga española, pero una vez más, como no podía ser de otra manera, otro penaltito".