El palmarés en la Copa del Rey: ¿qué equipo tiene más títulos?

Hay pocos torneos más especiales que la Copa del Rey. La competición del KO tiene una personalidad propia, derivada de su configuración de eliminatorias directas que permite a aficionados de todo equipo soñar con una gesta durante, al menos, 90 minutos. En un mundo del fútbol cada vez más compartimentado, en el que la élite parece más inaccesible que nunca, el torneo copero disipa las fronteras y permite que sea el terreno de juego el que marque las diferencias.

No se puede negar que, tras su cambio de formato en 2019, la Copa ha ganado la relevancia que su tradición merece. Eliminatorias únicas hasta semifinales, fin del valor doble de los goles fuera de casa en caso de empate, una mayor presencia de equipos procedentes del fútbol no profesional… Seguramente no sea perfecto, pero desde luego ha revitalizado la competición. La Copa mola, y no es solo un eslogan comercial.

Una de las características principales de la Copa del Rey son las sorpresas. Equipos modestos, muchas veces procedentes de categorías inferiores, que desafían los pronósticos y dan la campanada ante rivales sobre el papel más mucho más poderosos. A lo largo de su historia, varios son los ejemplos de ello. Todavía se recuerda la gesta copera del Numancia en 1996, cuando se colaron en cuartos de final para caer finalmente contra el Barcelona. Por el camino, los sorianos eliminaron a tres Primeras: Real Sociedad, Racing de Santander y Sporting de Gijón, enganchando a toda España durante el trayecto.

Más lejos llegó incluso el Mirandés en 2012, cuando siendo también conjunto de Segunda B alcanzó las semifinales jugando eliminatorias a doble partido desde dieciseisavos de final. Los burgaleses eliminaron a Villarreal, Racing y Espanyol antes de caer contra el Athletic de Bilbao. Aquel equipo dejó para la historia uno de esos héroes que solo se pueden forjar en la Copa: Pablo Infante. Los rojinegros repitieron presencia en semifinales en 2020, ya con el formato de eliminatorias a un partido, al convertir Anduva, como dice el tópico futbolero, en un fortín inexpugnable en el que sucumbieron Celta, Sevilla o Villarreal.

Además de las sorpresas de conjuntos modestos, la Copa también ha servido para que muchos equipos históricos de Primera den motivos a su afición para festejar. Durante muchos años, el Athletic presumió de ser el rey de copas. Por su parte, el Valencia se precia de verse a sí mismo como un conjunto "bronco y copero", mientras que en La Romareda todavía se canta que el Real Zaragoza tiene 6 Copas del Rey.

El gran dominador histórico de la Copa es el Fútbol Club Barcelona. Los azulgranas han levantado el trofeo en 31 ocasiones, siete más que el Athletic (que tiene 24 títulos coperos en su palmarés). El conjunto catalán ha cimentado esta superioridad en la década de los 2010, en la que consiguió vencer en cinco ocasiones, cuatro de ellas consecutivas (2012, 2015, 2016, 2017 y 2018).

Su primer título copero, no obstante, data de la temporada 1909/10. Se trató de un campeonato con polémica, ya que en realidad se celebraron dos trofeos paralelos. Uno organizado por el Club Ciclista de San Sebastián, que ganó el Athletic. El otro, organizado por la Federación Española de Clubes de Fútbol, se disputó en Madrid y fue ganado por los culés. Curiosamente, el Madrid FC, que posteriormente sería el Real Madrid, prefirió jugar en el campeonato donostiarra. Los catalanes se impusieron en un triangular al RCD Sala Calvet (actualmente Deportivo de la Coruña) y al Español de Madrid.