COPA DEL REY

'La Copa mola': un eslogan muy cachondo con el Rey Juan Carlos y que indignó a Artur Mas, con Risto de por medio

El Córdoba creó el eslogan de la Copa del Rey en 2012 para promocionar su eliminatoria. Los creadores de la campaña y Carlos González, presidente, recuerdan la historia.

Carlos González, origen de la Copa mola./Getty
Carlos González, origen de la Copa mola. Getty
Jonás Pérez

Jonás Pérez

El lema actual de la Copa del Rey nació de un mensaje en tono jocoso a la Casa Real en una campaña del presidente del Córdoba. Sí, sí, como lo oyen. "La Copa Mola". Lo han escuchado, ¿verdad? Natural, es el eslogan actual del torneo del KO. Así lo utiliza la Federación desde el pasado 29 de octubre de 2020, desde la previa del sorteo de la fase preliminar de la segunda edición del nuevo formato. Pero, ¿de dónde salió? Pues de otra campaña... ¡en 2012! No la efectuó la RFEF, ni mucho menos. Fue Carlos González, el máximo mandatario del equipo andaluz, de la mano de la empresa Aftershare de Risto Mejide. Ahora lamenta que la Federación no le haya consultado: "Me hubiera gustado que el presidente me hubiera llamado, pero es muy bonito".

En aquella época, la Casa Real estaba en el centro de la diana por episodios como el viaje de Juan Carlos I a cazar elefantes. Era otra época, las redes sociales no gozaban de la popularidad de hoy en día y los mensajes de esa índole acarreaban un evidente riesgo de rechazo. Pero Carlos González se atrevió a sentarse en una silla trono y escenificar el tradicional discurso navideño del monarca con el fin de llenar su estadio para los dieciseisavos de final de la Copa del Rey ante la Real Sociedad.

Así fue el discurso íntegro, dividido en las intervenciones de una voz en off y Carlos González, que dio la vuelta al país en cuestión de minutos:

"Voz en off: 'Este es un mensaje de su excelencia, el presidente del Córdoba Club de Fútbol, para su Majestad el Rey'.

Carlos González: 'Su Majestad, soy Carlos González, humilde presidente del Córdoba Club de Fútbol. Me dirijo a su Majestad para decirle que sé que últimamente las cosas no han ido demasiado bien por su casa. Entre lo de sus yernos, sus hijas, sus caídas y, para colmo, los elefantes, no vea... Pero quiero decirle algo. No se preocupe, haya pasado lo que haya pasado, me llena de orgullo y satisfacción decirle que su Copa mola'.

Voz en off: 'Da igual si eres republicano o monárquico, la Copa del Rey mola. El Córdoba Club de Fútbol te necesita para conquistarla. Ven al próximo partido contra la Real Sociedad el 1 de noviembre a las 19:00 en el Nuevo Arcángel'.

Carlos González: 'Y Majestad, abónese al Córdoba, que vamos a subir otra vez a Primera. Hágase califa. Le envío esta camiseta para que se anime. Saludos cordiales'".

El chocante origen de la idea

El Córdoba militaba en Segunda División y necesitaba un gran incentivo para alentar a su público a acudir en masa al Nuevo Arcángel y así recaudar la taquilla suficiente para ese ingreso extra que tanto favor hace a los clubes en el torneo del KO. Entonces, a Carlos González se le pasó por la cabeza hacer una campaña publicitaria. Su primera idea era hacer cuñas de radio y, para ello, contactó con la empresa Aftershare, propiedad de Risto Mejide, y en la que ya tenía un contacto por amistad.

La escena fue algo chocante. José Antonio Ildefonso Huertas (actual jefe de contenido de Mindfly) y Sergio de Mesones (para entonces director de Aftershare en Madrid), idearios de la campaña, llegaron a Córdoba con la incertidumbre de cuál sería el trabajo que debían realizar. Y se encontraron con la petición de una cuña de radio. Acostumbrados a realizar grandes anuncios para marcas populares, aquello no les pareció un gran plan. Si la meta era colgar el 'no hay billetes' en el estadio, debían atacar de una forma más agresiva. 

"Carlos González se apuntaba a un bombardeo. A él le ponía la situación"

Sergio de Mesones Director de la campaña

"A mí me llamaron para ir a Córdoba. Necesitaban unas cuñas de radio. Me sonó raro viajar de Barcelona a Córdoba para eso. Llegamos allí, empezamos a hablar de eso y no le veía ningún sentido. Querían algo súper plano. Empecé a hablar con el presidente, que es un tío súper simpático y echado para adelante. Creo que él también percibió el sinsentido de la situación. Me lanzó un reto. Le respondí que haría algo que de verdad les pusiera en el mapa, que las cuñas están pasadas de moda", recuerda José Antonio Huertas en Relevo.

Claro, había limitaciones: presupuesto limitado, poco tiempo, dificultad de difusión... Debía ser rápido, preciso y certero. Y voilà. Se les ocurrió, casi de forma improvisada (y sin el casi), meter a la Casa Real por medio. Era arriesgado, por supuesto, pero era más probable el éxito. Por ello, prepararon la escena, con una inversión casi inexistente en cuestión de tres días. Así lo vivió el director creativo: "Fue un estilo de película, como si fuera un episodio de Mad Men. Le dije de hacer un mensaje como el del Rey, siempre hablando con respeto. Nació en un despacho, en un segundo. El resto les dijo que ni de coña hacíamos algo así. Y él dijo 'pues venga, vamos a hacerlo'. Fue todo muy casero, lo resolvimos en el mismo viaje, sin presupuesto".

"Fue como un capítulo de Mad Men. Lo resolvimos todo en un viaje, sin casi presupuesto"

José Antonio Ildefonso Huertas Director creativo de la campaña

Así es: el lema actual de la Copa del Rey se improvisó, preparó y grabó en un simple fin de semana. ¡Y el recorrido que ha tenido! Una columna para sujetar un marco con una foto de Juan Carlos I, una lámpara, tres elefantes de porcelana, una silla trono, una bandera del Córdoba, una camiseta serigrafiada y otro marco de fotos, con el escudo de la entidad, fueron los únicos elementos decorativos necesarios para afrontar la viralidad.

No fue necesario ni siquiera el alquiler de un local, ya que el propio Carlos González fue el que abrió las puertas de su casa de par en par para proceder a la grabación. Entonces, fue una improvisación: "Se nos ocurrió escribiendo el texto en la habitación del presidente. Es que ocurrió en minutos. No tuvo un proceso publicitario. Fue en un despacho, así 'pim, pam'. 'La Copa Mola' era un grito de guerra muy natural y claro". Pero Aftershare, habitual en grandes campañas, era consciente de que podría alcanzar una amplia difusión por su contenido y el buen hacer del presidente del Córdoba.

Eso sí, de primeras, no le hizo especial ilusión a Carlos González, como recuerda en Relevo: "En principio, no se determinó que la hiciera yo porque dije que no la hacía. Al cabo de un tiempo me convencieron. Tuvo un impacto tremendo. La SER me invitó a ver el partido en sus estudios. Cuatro también lo quería vivir conmigo...".

Lo que no esperaban era conseguir el que para entonces se consideró como el viral más rápido de la historia de España. En cuestión de minutos, la figura de Carlos González estaba en todos los Informativos del país. En redes sociales, corrió como la pólvora. El presidente tuvo que atender a todos los medios de comunicación para contar de dónde había surgido la tan popular campaña. "Creíamos que iba a tener potencia en Córdoba y acabamos en los telediarios. Hicimos a posteriori un estudio de valoración de cuánto hubiera costado esa campaña con medios pagados (digital, radio y televisión). Salía a más de medio millón de euros. Todas las radios querían hablar con Carlos. No era excesivamente conocido y a partir de ahí tuvo 35 entrevistas. Hasta a mí me llamaron", desvela Sergio de Mesones.

La figura de Carlos González

Cuando una empresa contrata a una externa para una campaña publicitaria se produce un vínculo económico, pero no siempre personal. Con La Copa Mola sucedió algo distinto. Los representantes para entonces de Aftershare se rinden en elogios sobre la figura de Carlos González, presidente del Córdoba y capitán del barco para aquella agresiva y eficaz campaña.

"Carlos González es un crack, es innato. Hubo que repetir la escena obviamente, pero no más que cuatro o cinco veces. No le estábamos pidiendo peras al olmo, tiene una parte de showman", le describe José Antonio Ildefonso Huertas. Sergio de Mesones, en cuanto levantó el teléfono y escuchó el planteamiento de la idea, respondió de inmediato: "Menudo fenómeno, Carlos". Y añadió a posteriori: "Al principio le decíamos de coña que saliese él. Se apuntaba a un bombardeo. Normalmente el protagonismo incomoda, pero él era al revés, le ponía esa situación".

"Lo de 'La Copa Mola' se nos ocurrió en minutos. Fue 'pim, pam'. Era un grito de guerra natural y claro"

José Antonio Ildefonso Huertas Director creativo de la campaña

Tal fue el éxito de la campaña, que incluso les permitió forjar una relación de amistad. "Carlos González tuvo un poder de atracción innegable. Nos hizo sentir muy cómodos, hubo una química especial que se mantuvo durante toda la campaña. Nunca he trabajado con un cliente final como con él, hablando continuamente por teléfono. Fue muy bonito. No suele haber valentía para nada, trabajas muchas horas para nada, esto fue justo lo opuesto", asevera José Antonio. En la misma línea, Sergio: "Hacía que te enamoraras viendo el vídeo por su manera de contarlo. Acabó llegando el autobús como si fuera el del Papa. Fue el evento en Córdoba. Algo nunca visto en 500 años. Fue la hostia, la bomba".

Y todo, pues eso, en cuestión de horas. Carlos González gozaba de un aura especial para pronunciar uno de los discursos más recordados del fútbol español. Sergio de Mesones relata entre risas las grabación: "Rodamos en casa de Carlos. Llevamos tres o cuatro detalles nada más. Tenía un desparpajo delante de la cámara impresionante. Es bastante difícil hablar a cámara, la gente que lo hace bien es porque es profesional. Él con ese cachondeo que tiene, sabe hablar serio, pero en tono jocoso. No creas que costó mucho. Repetiríamos la escena unas cuantas veces, pero la buena fue una de las primeras. Él lo entendió rápidamente". El presidente, sin embargo, no lo ha vuelto a ver: "Me da un poco de vergüenza. Pero reconozco que Risto Mejide y su gente estuvieron listos".

Un golpe en la mesa que, por supuesto, se tradujo en un lleno hasta la bandera ante la Real Sociedad. Algo que tuvo también repercusión deportiva: el conjunto andaluz dio la sorpresa y se coló en octavos de final, tras derrocar 4-2 a su rival en la eliminatoria. Y entonces, el Barcelona.

Artur Mas

Tras el éxito de la campaña, el Córdoba quiso repetir para la siguiente eliminatoria. En este caso, se buscó una fórmula similar: lo que funciona, para qué tocarlo. En este caso, el destinatario fue Artur Mas, entonces presidente de la Generalitat. No llegó al alcance de la anterior, pero su impacto también fue abrumador. Tanto es así, que el propio político se plantó en el palco del Camp Nou para que Carlos González le viera.

"Vino a verme. Sandro Rosell me avisó que era posible que viniera a comer con nosotros y que no montáramos un escándalo. Al final no vino, pero sí al palco. No se quedó a ver el partido. Tuvimos una reunión de 15 o 20 minutos y lo primero que me dijo fue: 'Vengo a que me conozca usted para que pueda a hablar de mí'. Le contesté: 'Si usted viene por eso, señor presidente, no se tendría que haber molestado porque hace ya bastante para que le conozcamos en España", recuerda el presidente Carlos González.

Entonces, Risto Mejide, dueño de la empresa Aftershare (la que se encargó de la campaña publicitaria), publicó un contundente artículo de opinión contra el presidente de la Generalitat: "Le invito a que repase las acusaciones que últimamente ustedes se dedican durante las sesiones del Parlament, o las perlas que se están propinando esta misma semana tras los recientes casos de corrupción, para que recuerde usted la diferencia entre la campaña del Córdoba CF y 'hablar mal' de alguien".

Así rezó el discurso entonces:

"Voz en off: 'Este es un mensaje de su excelencia, el presidente del Córdoba C.F. para el muy honorable Artur Mas'.

Carlos González: 'Artur, soy Carlos González, humilde presidente del presidente del Córdoba Club de Fútbol. Me dirijo a usted para decirle que sé que las cosas no han ido muy bien por su casa últimamente. Vaya mala pata de elecciones, cómo se le ocurre a la gente no votarle, con lo transparente que es usted. De presidente a president, ¿usted se ha pensado bien lo de la independencia? Que ya sé que Cataluña es una potencia económica mundial y que a España le suena un poco a rancio todo eso. Pero creo que hay una cosa muy importante que se le olvida. Que la Copa mola. Y que Cataluña también'.

Voz en off: 'Da igual que seas independentista o no. La Copa del Rey mola. El Córdoba Club de Fútbol te necesita para intentar conquistarla. 40 años después, nos volvemos a enfrentar al Barça. Ven a darlo todo al Nuevo Arcángel el miércoles a las 8 de la tarde. Recuerda que ya puedes comprar en la tienda oficial del club o en la tienda online la camiseta edición especial de la Copa Mola.

Carlos González: 'Piénselo bien, Artur. Que la Copa Mas, no mola nada. Anímese, venga a ver el Córdoba-Barça, que si se independizan, solo lo podremos ver en la Champions. Y Artur, abónese al Córdoba, hágase califa. Que también somos rebeldes. Le mando esta camiseta edición especial de la Copa Mola. Que vagi bé, adéu (que vaya bien, adiós)".

"Carlos hacía que te enamoraras viendo el vídeo por su manera de contarlo"

Sergio de Mesones Director de la campaña

De nuevo, hizo falta poco más que una camiseta serigrafiada con el nombre del presidente de la Generalitat, la misma columna para sostener un marco de fotos con la foto de Artur Mas, la misma bandera del Córdoba, una butaca, una mesa, una lámpara y un par de elementos decorativos. "Tuvimos más tiempo, pero los mismos recursos. Podríamos haberlo producido mejor, pero un elemento fundamental fue que fuera casero y amateur", rememora José Antonio.

Añade Sergio de Mesones: "Se montó la de Dios. Había que encontrar un punto noticiable en el momento y cruzarlo con el tema deportivo. Siempre vinculado al humor. Despertaba opiniones, no te podías quedar plano: o estabas a favor o en contra". Y así fue, sin apenas un duro para hacer la campaña, no quedaba otra que cruzar barreras tradicionales: "Teníamos que hacer una pieza tremendamente agresiva, que fuera polarizante y que tratara un tema del momento".

El riesgo de la Casa Real y la política

2012 no era 2023. Entonces, abordar temas como el de la Casa Real implicaba un riesgo. De hecho, José Antonio Ildefonso Huertas ya lo había intentado en un anterior empleo sin éxito: "Había intentado hacer antes campañas sobre la Casa Real y me habían dicho rotundamente que no. Quisimos aprovechar con Cruzcampo (donde trabajaba antes), haciendo una campaña antes del Mundial de pasar el balón desde España hasta África. Buscamos una firma espontánea del Rey a una pelota, hablamos con la Casa Real y nos dijo que en la vida. En ese momento no teníamos mucho que perder y nos tiramos a la piscina. Fue arriesgado".

"Estudiamos a posteriori cuánto hubiera costado la campaña con medios pagados y salía a más de medio millón de euros"

Sergio de Mesones Director de la campaña

Aquello, por tanto, resultó innovador. Aunque siempre existía ese leve temor a que la corona manifestase su inconformidad. Algo que no sucedió: "Lo dejaron pasar. Sabían que si movían ficha, favorecían la viralidad. No se traspasaba ninguna línea, era en clave de humor. Creo que lo entendieron bien. Fue uno de los virales de la época. El presidente quedó encantado. El contexto era político, pero lo hicimos simpático y positivo".

No obstante, estaba estudiado con precisión, tal y como desvela Sergio de Mesones en Relevo: "Si solo hubiera sido lo de los elefantes, qué atrevimiento… Pero hablar de la Casa Real estaba a la orden del día. Y Carlos González lo asumió, le pusimos en una situación compleja. El éxito de la campaña fue decir cosas incómodas, pero con mucha gracia. Estuvieras a favor o en contra de la Casa Real, te reías".

Incluso se les llegó a ocurrir una tercera campaña. Carlos González la recuerda entre risas. Eso sí, se negó en rotundo: "Me propusieron una con el Papa. Dije que bueno, que podía pelearme con los monárquicos, con los independentistas... Pero con los católicos ya era mucho". No obstante, saca pecho de aquel atrevimiento y de todo lo que significó para su club: "Yo fui pionero. Llegamos a un club que estaba arruinado y al año siguiente logramos el ascenso. Hicimos otra campaña simulando el ascenso con una máquina del futuro. Ascendimos. Hicimos mucha afición y sentimos mucho cariño. Tenemos un magnífico recuerdo".

Aftershare y Carlos González lograron desde la base una campaña publicitaria de enorme trascendencia social que ha acabado, años después, en el lema oficial de la competición. "Estamos muy contentos de haber pasado a la posteridad", relatan orgullosos. Así se lleva ahora el eslogan de la Copa, a punto de afrontar sus semifinales. Claro que su origen ya no es tan conocido: la Casa Real y Artur Mas.