La 'resaca' de Champions y la tristeza por las gradas supletorias no empañan el sueño del Girona: "Cuando suene el himno será increíble"

El Girona se estrenará como local en la Champions League este próximo miércoles frente el Feyenoord y Míchel compareció un día antes ante los medios en su primera rueda de prensa en Montilivi previa a un encuentro de competición europea. Lo hizo con la ilusión de un niño y en una nueva sala de prensa, pues el Girona ha tenido que reformar y reorganizar partes de los servicios de su estadio para adecuarse a las exigencias de la UEFA.

Si algo quiso dejar claro Míchel, "un enamorado del fútbol", es que "jugar la Champions es un sueño y hacerlo en Montilivi todavía más", no en vano el técnico vallecano veía "la Copa de Europa por la televisión desde que tenía cinco o seis años" y uno de sus objetivos era disfrutar como entrenador de la competición. Y lo ha logrado. "Cuando suene el himno en Montilivi será increíble", dijo.

Lamentó el madrileño que su equipo no pueda jugar con el aforo completo del estadio porque la UEFA prohíbe las gradas supletorias: "Estoy un poco triste que no se pueda llenar el campo. Necesitamos a todo el mundo y la gente que está siempre con nosotros me gustaría que pudiera vivirlo. Queremos ganar por nuestra afición, por los que estarán, pero sobre todo, por los que se quedarán fuera".

El preparador gironí entiende la ilusión por disputar competición europea, pero aseguró que la realidad del club, que ahora juega cada tres días, es LaLiga. Y le preocupa especialmente la 'resaca' que pueda dejar en sus futbolistas la Champions League.

"Me preocupa mucho el tema anímico. Evidentemente, cuando juegas la Champions, el jugador cambia el chip rápido. Eso ya lo tenemos ganado, no hay que motivarlo. Me preocupa más el paso de la Champions a LaLiga", así lo explicó Míchel, que puso como ejemplo la mala actuación de su equipo en Mestalla, tras el debut europeo contra el PSG. "Es mucho más fácil gestionar una plantilla de Liga a Champions que de Champions a Liga. Es un reto que tenemos por delante. Con el boom de jugar Champions estás durante un par de días en ese momento Champions y necesitas volver a la realidad de la competición doméstica", desgranó el vallecano.

Míchel verbalizó que, pese a la mala dinámica del Girona, está satisfecho con el rendimiento del equipo, especialmente en los dos últimos partidos, y ejemplificó el buen curso del conjunto catalán con una estadística: "En ocho jornadas, en todos los partidos hemos tenido mejores números de expected goals que los rivales a excepción del día del Barça".

Al de Vallecas también le dio tiempo para analizar al Feyenoord. "Tiene de media un 70% de posesión en su liga, es muy dominador en el juego. El entrenador actual estaba con Krejci en el Sparta de Praga y ha jugado con 1-5-2-3, aunque ahora lo suele hacer con un 4-3-3. Su delantero Santiago Giménez está lesionado, pero jugará Ueda, que también tiene mucho talento", destacó Míchel sobre el rival que este miércoles inaugurará Montilivi como estadio de Champions League.