El espejismo de Bakú no esconde las siete carreras de oasis que le quedan a Fernando Alonso y a Aston Martin
Se espera un final de temporada en tierra de nadie.
A Fernando Alonso le queda un tramo de temporada complicado. Las siete carreras restantes serán una especie de oasis y se harán muy largas hasta que se agite la bandera a cuadros en Abu Dabi. En Bakú todo son alargadas y espléndidas sonrisas tras el meritorio, y casi milagroso, sexto puesto del asturiano.
Totalmente irreal. Su coche estaba, en sus palabras, para ser duodécimo o decimotercero, así que llevarse tantos puntos es épico. "Oportunista", le gusta decir al español. Lo de Aston Martin en Azerbaiyán fue un espejismo que no tapa la travesía por el desierto que queda en 2024.
En Singapur, Texas, Brasil, México, Las Vegas, Catar y Abu Dabi no se esperan alegrías: apenas seguir luchando por sumar algún punto, aunque con Alonso nunca se sabe. Ya sacó la bola de cristal el propio piloto tras correr en Países Bajos: "Voy a hacer de adivino y te digo que seremos novenos o décimos en cada carrera".
El accidente entre Carlos Sainz y Checo Pérez, el atasco de Lewis Hamilton en el fondo de la parrilla y la lucha entre los Williams, junto al sorprendente ritmo de Alonso, generaron esa anómala sexta plaza. Lo normal hubiera sido perder un puñado de puestos y sacar los codos por llevarse una unidad contra un Williams. Euforia de Bakú a un lado, la realidad es bien diferente.
🗣️ Alonso: "Ni estábamos para estar en Q3 ni para estar delante de Williams o Haas, pero lo hemos hecho. NO NOS RENDIMOS"#AzerbaiyanDAZNF1 🇦🇿 pic.twitter.com/7jQ1aLnJ74
— DAZN España (@DAZN_ES) September 15, 2024
Las grandes mejoras no abundarán en las siete carreras que quedan. Esa es la realidad de Aston Martin, según ha podido saber este medio. Se espera solo un gran paquete de piezas nuevas en lo que resta de año, probablemente en Austin, dentro de dos carreras. Quitando esa actualización, llegarán pequeñas mejoras y, algunas de ellas serán, como en Monza con el ala trasera, adaptadas a ese circuito.
Tiempo y dinero perdido
Dos motivos justifican la ausencia de grandes paquetes de mejoras en lo que queda. Los equipos, no solo el de Alonso, 'sacrifican' un poco 2024 a estas alturas de campeonato para centrar sus esfuerzos y recursos en 2025. No abandonan el desarrollo de sus monoplazas, pero el foco está en la campaña que viene teniendo en cuenta que hay límite presupuestario y que no hay recursos ilimitados.
Si Aston Martin cierra el grifo y las nuevas piezas dejan de llover, es porque no se lo pueden permitir. Con las actualizaciones de Imola en mayo, se perdió mucho tiempo y dinero. Es decir, cuando se han traído mejoras que no han funcionado y se ha dado un paso atrás, se han perdido recursos valiosos que ya no se pueden recuperar.
Fernando's thoughts on Baku. 💭#AzerbaijanGP pic.twitter.com/mFIDe6Pq2O
— Aston Martin Aramco F1 Team (@AstonMartinF1) September 15, 2024
El tiempo y dinero perdido en el AMR-24; es decir, el camino recorrido en la dirección del desarrollo del coche, no admite errores y recuperar el rumbo ha exigido pagar un peaje demasiado alto. Aston Martin se ha ido recuperando poco a poco pero ya no puede trabajar en Silverstone al ritmo que lo hacía a principio de temporada. Que llegue ya el invierno.