Los mensajes ocultos que envía Fernando Alonso con su vuelta "en trance"

Da igual que se sintiera "en trance". O que su equipo siga sin saber "de dónde ha sacado el tiempo". "Ha arriesgado mucho en su vuelta, no esperábamos un resultado así", reconoció su jefe Mike Krack tras la clasificación. "Cuando Fernando se enfada, extrae lo mejor", añaden desde Aston Martin.

Las siempre frías cifras vuelven a impresionar con Alonso pero lo que más llama la atención son los mensajes que envía el asturiano a través de sus fulgurantes vueltas de Q2 y Q3 en Bakú. "Asumimos muchos riesgos, ha sido una locura pero estamos aquí para dar este tipo de vueltas", expresó el piloto por radio tras clasificarse quinto a la Q3.

Su giro para colocar arriba un coche nervioso e inestable que no está para tirar cohetes fue impresionante. "Ha sido fuera de la lógica", reconoció el propio piloto. Al bajarse del coche, primer mensaje, directo a su equipo. Y no es la primera vez que tira de las orejas a Aston Martin.

Si ya espió con detenimiento el Mclaren en Países Bajos, ahora le tocó al Williams, que ha mejorado mucho en las últimas carreras. En Bakú van como aviones y se ha cansado de repetirlo. Examinar los coches rivales es sinónimo de meter presión a su equipo. Hay que mejorar para salir de la media tabla. "Será difícil mantenerlos atrás en carrera", avisó.

Hay que fijarse en otros equipos para mejorar el Aston Martin. "Está siendo un finde regulín, ya sabemos la tendencia hasta que lleguen nuevas piezas, este coche no te da confianza", insistió el piloto. Otro mensaje fue directo para su compañero y para todos aquellos que dudan del nivel de Alonso por su edad cuando este queda por delante del bicampeón.

Meterle casi un segundo a Stroll tiene poca explicación. Es una distancia insalvable que no se explica a través de un error en una curva. El canadiense, por cierto, partirá desde la decimoquinta posición mientras el español peleará por los puntos desde la octava. La diferencia en el Mundial también es insultante: 50 puntos por 28 de Stroll.

El ovetense tiene más ganas que nunca y lo está demostrando. Da igual que tenga 43 años y que Adrian Newey tarde en llegar a Aston Martin. El último mensaje con su clasificación en Bakú es para el ingeniero, flamante fichaje de Aston Martin que debutará en marzo. Su actuación en la qualy fue un 'aquí estoy yo, tengo ganas de pilotar un coche diseñado por ti, Adrian'.

Solo queda ver si el español podrá mantener los reflejos y el nivel durante dos años hasta que, en 2026, pueda llevar el Aston Martin que cree Newey. Mientras tanto, este año y el que viene se pueden hacer muy largos.