Matxín se sincera tras la tensión del UAE en el Tour: "Gestionar los egos de estos corredores no es fácil"

Vigo.- En el hotel Attica 21, palco de excepción a la playa de Samil, se respira un clima distendido. Pese a la desafortunada primera semana del UAE Team Emirates bajo el bochorno sureño, la exhibición de Adam Yates en Granada parece haber calmado los ánimos del mejor equipo del mundo en tierras gallegas, hogar del pelotón en el primer parón de La Vuelta a España. Allí, antes de atender a Relevo en un amplísimo recibidor de techos altos, Joxean Fernández 'Matxín', Sports Manager del conjunto emiratí, guiña un ojo a cada uno de sus ciclistas mientras despacha algunas visitas sorpresa. Otras, como la de Alex Carera, agente de Tadej Pogacar, estaban más que previstas. No es para menos. El día de descanso de cualquier gran vuelta es sinónimo de agitación en el mercado, más aún en la ronda española, fijada, como siempre, en la recta final de la temporada.

Uf, sí [ríe]. Mira, tengo una reunión ahora con dos agentes; antes, esta mañana, he estado con otros dos. Es intenso, la verdad, pero trabajo menos que en carrera... Bueno, no menos, pero digamos que el trabajo es mucho más matemático en la competición.

No, para nada. Ha sido una primera semana muy complicada. Veníamos con dos líderes y con corredores importantes como alternativas, empezamos muy bien, ganando la crono con Brandon [McNulty], pero luego ha sido un sube y baja difícil de prever y de controlar. En la primera etapa de montaña, llegamos a Villuercas, donde corremos con 43 grados, que sí, el calor es para todos, pero a unos les afecta más que a otros y a nosotros nos pasó factura con Yates, que venía en un estado de forma buenísimo y perdió mucho tiempo. McNulty aguantó, pero esperábamos un poquito más, y Joao [Almeida] estuvo en su sitio. A partir de ahí, tuvimos un mal día con McNulty, que perdió más tiempo de lo que esperábamos y estuvo cerca incluso de abandonar, con lo cual, perdimos una bala que para mí era muy importante, porque nadie contaba con él para la general y queríamos utilizarlo tácticamente, tanto a él como a Del Toro, pero desde ese momento nos resultó imposible.

Eso es. ¡Por si habíamos tenido poco! A Joao le hacemos pruebas con una máquina PCR que tenemos y vemos que hay un índice de carga viral importante, en el límite de ser peligroso para su salud, así que, entre ese nivel de infección y los síntomas de fatiga que mostraba, decidimos mandarle a casa. Y claro, la carrera cambia para nosotros.

Bueno, va a ser difícil. Adam se ha colocado ahí en la clasificación general, así que ya no es tan sorpresa para los rivales, pero queda mucha carrera. Queremos ser protagonistas. Buscaremos victorias de etapa, pero también mejorar con Adam su situación y ser agresivos, como hemos sido siempre. No vamos a conformarnos con ese séptimo puesto.

No, nunca podemos olvidarnos de ella, pero es evidente que estamos lejos; o sea, al tiempo al que vamos [del líder].... Estamos lejos, es una realidad. Ahora bien, queda mucha carrera. Y mucha es mucha. Y muy dura.

Claro que es difícil, pero no te sirve de nada decirlo, lo que hace falta es adaptarte a las circunstancias. Adaptarse a lo bueno es muy fácil, a lo malo cuesta un poco más. Tenemos que aprender a adecuarnos a situaciones no tan favorables. No hay más. Una vez ahí, es cuestión de mover fichas y ser inconformistas.

No, no lo creo. Lo que pasa es que si uno se queda con todo lo que escucha por ahí, pues claro... Son comentarios, y tienen que verse como eso, comentarios. Es como si yo te digo que me gusta más el agua con gas que el agua sin gas. Es eso, una opinión, nada más.

Bueno, son circunstancias de cada momento. Cuando acabas la etapa y tienes un rol en el cual consideras eso, pues claro que hay veces que a 200 pulsaciones puedes decir algo así, como Almeida hizo aquel gesto ese día... Mira, yo siempre pongo un ejemplo claro. Cuando tienes un corredor como Tadej y quieres ganar el Tour de Francia con un líder tan claro, necesitas tener el mejor equipo posible a su alrededor, y para tener el mejor equipo posible necesitas a los mejores ciclistas del mundo, que en muchos casos, son corredores que pueden trabajar para el líder y optar al podio al mismo tiempo. Y gestionar los egos de esos corredores no es fácil.

Y como en la vida en general. Cuando tú tienes 21 años, como es el caso de Juan Ayuso, te gustaría tener un rol mejor, un rol posiblemente de líder, pero obviamente aceptas que Tadej Pogacar es el mejor del mundo y te adaptas a ello.

Sí, estuve comiendo con él hace bien poco. Yo es que con Juan tengo una amistad personal y profesional. Él sabe que le aprecio, le quiero, le respeto y le valoro mucho, igual que sabe que, aunque se retirara del Tour por una circunstancia excepcional, tiene 21 años y traerle a La Vuelta, a doblar dos grandes, no era la mejor de las ideas. De ahí que fuera el primera reserva. Por eso y por respeto también a los compañeros que ya estaban trabajando y preparándose para estar aquí. Al final, él me llamó después de los Juegos y me dijo, Matxo, no estoy ni para primer reserva, o sea, no estoy, no me siento. De hecho, no pudo acabar el test después de los Juegos.

Totalmente. Y te digo más. En 2022, mira [saca el móvil y enseña estas dos imágenes]. Es el mismo puerto, en el mismo punto, a cuatro kilómetros de coronar, pero con dos años de diferencia. En una, la de 2022, está Tadej solo con uno, dos, tres... Cuatro corredores del Jumbo. En la otra, la de este año, somos nosotros quienes tenemos a cuatro ciclistas y es Vingegaard quien está aislado. Fue una debilidad que tuvimos y la supimos corregir.

También es cierto, y somos conscientes de ello, que posiblemente ese momento [el de la imagen de 2022] significó el principio del cambio de equipo de Roglic aún con contrato en vigor. Pero eso son riesgos que hay que asumir.

No, no, ninguno. Tiene contrato hasta el 2028 y hay muy buen feeling, muy muy muy buen feeling. Te lo digo en serio.

Bueno, tenemos conversaciones muy avanzadas y casi seguro me quedaré. Yo quiero seguir aquí, simplemente hay flecos que, digamos, me gustaría tenerlos cerrados.

A ver, aquí me valoran y me respetan. Siempre que he firmado los contratos han sido de cuatro años. Veremos.

Es algo que me halaga, claro que me halaga.

Bueno, siempre valoras todo, pero al final, fíjate, yo llegué aquí después de que Patrick Lefevere alabara mi trabajo en el Quick-Step, tanto en público como en privado, y lo que me llamó la atención de UAE fue generar un proyecto que no consistiera en contratar a los mejores ciclistas del mundo, sino en generar nuevos talentos y crear una base. Y creo que es lo que hemos conseguido.

En principio la idea inicial, la que hablamos con él, era que siguiese en el Continental [UAE Team Emirates Gen Z] para que se formase. Obviamente él en el Tour del Porvenir ha dado dos pasos de gigante en su carrera deportiva y lo lógico es que lo analicemos todo en cuanto acabe La Vuelta a España.

Gal es muy buena persona. Llegó al equipo sub-20 pese a tener 21 años porque no tenía en ese momento un proyecto y decidimos plantearle la opción de venir. Rompimos un poco esa norma interna y él ha cumplido de sobra, ha sido súper generoso. Ahora mismo, con 22 años, nuestro planteamiento con él es que necesita un paso intermedio, porque si corre con nosotros, aunque haga un calendario alternativo, no le puedo prometer su espacio teniendo a Christen, Morgado, Del Toro y compañía. Creo que sería bueno llegar a un acuerdo con un equipo tipo Caja Rural, no lo sé, tampoco quiero hablar de más, y después de uno o dos años en un equipo profesional, volver a estar con nosotros.

Sí, justo. Lo mismo. Lo que pasa es que Isaac ganó el Tour del Porvenir y creímos que ya era el momento de que diera el salto.

Venga.

Pues un corredor... [sonríe]. Uno de los pocos que me ha dado calabazas. No estoy acostumbrado, la verdad. Ahora mismo te puedo decir, y me agrada decirlo, no lo hago por chulería, que igual que antes llamaba al 60% y me contestaba el 40%, ahora posiblemente es el 60% de corredores los que me contactan a mí. Lo de Albert me jodió, eh, pero lo acepté. Él quería alternar varias disciplinas, ciclocross, mountain bike y demás, y posiblemente nosotros no somos el equipo perfecto para hacerlo.

Es un corredor que me ha sorprendido por su polivalencia. Es ese tipo de ciclistas que sin ser el mejor en nada, es muy bueno en todo. Es muy regular todo el año y mira, ahora ha sabido sobreponerse en un Tour del Porvenir en el que no ha tenido todo a favor. Ha tenido su oportunidad y la ha sabido aprovechar.

Uf, explosividad. Explosividad y convicción en lo que hace y en cómo lo hace, aunque se equivoque. Me gusta el arrojo que tiene para decir, esta es mi decisión, esta es mi apuesta y si me sale mal, asumo la responsabilidad. Esos son los corredores que triunfan. Además, es un corredor que sobre la bicicleta me recuerda mucho físicamente a Adrià Pericas. Parecen fotocopiados.

Talento puro. Tiene unos números espectaculares, tiene arrojo y sabe que es bueno. Sabe que tiene ese recorrido y lo aprovecha al cien por cien. Le da lo mismo que vaya Albert Philipsen a rueda o quien sea, sabe que es bueno y tiene esa mentalidad de el que venga detrás, que me siga. Tiene las cosas muy claras.

Tiene toda la pinta, sí [sonríe]. Pues mira, me voy a mojar mucho, aunque igual me matan por esto: ¡demasiado francés todo! Tendría que haber salido de Francia. La presión que meten allí a los corredores franceses... No creo que un corredor joven tenga que vivirla tan pronto. No se la han metido aún y no soy futurólogo, pero sé lo que va a pasar. Y es una pena.