Nueve remontadas y media definen a la nueva Paula Badosa: "Es un mensaje para sus rivales"
Recuperada de la espalda, la española ha dado un paso al frente y es una tenista más correosa que nunca. "En los momentos duros no se deja ir de cabeza", dice Carla Suárez.
Un par de días después de tocar fondo en el Mutua Madrid Open 2024, la derrota que ella misma reconoció como el punto de inflexión en su proceso de recuperación, Paula Badosa se sentó con Relevo en una de las pistas de entrenamiento de la Caja Mágica y dijo una frase con la que se entiende bien todo lo que ha ocurrido en estos últimos meses.
"Tengo un reto muy grande: volver a estar donde estaba antes. Es un objetivo que tengo mucho en la cabeza. Voy a luchar, voy a dar todo lo que tengo en mi mano para estar ahí. Es el motor que me levanta todos los días, es la motivación", respondió Badosa en aquella mañana soleada de mayo en la que el ranking WTA mostraba su nombre en un dolorosísimo puesto 101. Acababa de perder en la primera ronda de Madrid con Jéssica Bouzas, su novena derrota de la temporada, pero también empezaba a ver la luz a sus problemas de espalda. Por primera vez en mucho tiempo, no tenía dolor.
La rotura de la vértebra L-4 un año antes en el torneo de Roma había sido un golpe durísmo. Se perdió la segunda mitad del 2023 y en el inicio de 2024 le costó un mundo encontrarse a sí misma. Los médicos -estuvo en consultas en Estados Unidos, Suiza, España y Dubái- le dijeron que era una lesión crónica y que sólo podría jugar con inyecciones de cortisona. Llegó a estar hasta cuatro horas diarias en el fisio.
Todo aquel trabajo invisible a ojos de la mayoría empezó a dar sus frutos después de Madrid. La espalda le dio un respiro, encajó nuevas piezas en su equipo de trabajo y su tenis volvió poco a poco. En Roma y Roland Garros elevó el vuelo y en Wimbledon, donde alcanzó los octavos, quedó patente su mejoría. Después tomó la decisión de renunciar a los Juegos Olímpicos de París 2024 porque pensaba que no le venía bien hacer de nuevo la transición a la tierra batida y recibió una invitación para el torneo de Washington. Y ahí explotó: conquistó su primer título desde 2022, a la semana siguiente perdió en Canadá en un ajustado duelo ante Jelena Ostapenko (11ª de la WTA) y en el torneo previo al US Open, el de Cincinnati, sólo fue frenada por Jessica Pegula (6ª) en semifinales.
«El tenis no tiene sentido si no estoy en la cima»
Faltaba refrendar todo en un Grand Slam, el principal termómetro en el tenis, y la propia Badosa se ha encargado de hacerlo en Nueva York, donde este martes buscará ante Emma Navarro el pase a sus primeras semis de un grande (18:00). La remontada, sin embargo, todavía no está completa. A Badosa no le basta con esto. "Para mí, con todos mis respetos, el tenis no tiene sentido si no estoy en la cima. Quiero jugar en grandes escenarios. Quiero jugar las últimas rondas de cada torneo. Quiero ser una de las mejores jugadoras del mundo. Es cuando me siento motivada y emocionada todos los días", dijo la exnúmero dos el domingo por la tarde tras avanzar a los cuartos del US Open.
"Para mí, estar en el ranking en el que estaba hace dos meses no tenía ningún sentido y me cuesta mucho mentalmente estar en esa posición. Así que, para mí, lo que tiene sentido y lo que me hace feliz cada día es estar donde estoy ahora mismo en las últimas etapas de cada torneo", añadió, toda una declaración de intenciones.
Nueve remontadas en pista
A la espera de completar esa remontada personal, de lo que no hay duda es del paso al frente que ha dado la catalana cuando los partidos se le ponen cuesta arriba. Y es que desde que se fracturó la vértebra en mayo de 2024, ha mejorado enormemente sus registros cuando pierde el primer set. Las otras remontadas.
Los datos no mienten: hasta la lesión, la española había remontado 40 de las 160 veces en las que había empezado un set abajo, lo que supone un 25% de efectividad. Esta temporada lleva ya nueve remontadas en los 16 encuentros en los que perdió el primer set, más de un 56%. Es la segunda tenista de todo el circuito WTA con más remontadas, sólo por detrás de Emma Navarro, su rival en cuartos.
"Yo ya lo dije antes de que empezar el torneo: es el Grand Slam al que mejor ha llegado mentalmente, tenísticamente y, visto lo visto, físicamente. Cuidado con Paula"
Esas nueve remontadas y media definen bien a la nueva Paula Badosa. Lo ve también Carla Suárez, la última española en alcanzar los cuartos de final en Nueva York (2018). "En los momentos duros no se deja ir de cabeza y eso es un mensaje para sus rivales", señaló la extenista durante la retransmisión del partido de octavos de final en Movistar Plus+. "La estoy viendo competir muy bien. Cuando tiene buenas sensaciones, el tenis lo tiene y le sale todo".
"Yo ya lo dije antes de que empezara el torneo: es el Grand Slam al que mejor ha llegado mentalmente, tenísticamente y, visto lo visto, físicamente. Eso le va a dar mucha confianza, sobre todo después de este último año de lesiones. Cuidado con Paula", avisó Carla Suárez. Pues eso, tomen nota: cuidado con Paula.