TENIS

Dio positivo por la misma sustancia que Jannik Sinner y su coartada fue idéntica, pero fue suspendido 4 años: "Soy un apestado"

El tenista italiano Stefano Battaglino rompe su silencio después de que el Tribunal de Arbitraje Deportivo rechazara su recurso.

Jannik Sinner, durante una rueda de prensa a mediados de septiembre en Milán. /REUTERS/Massimo Pinca
Jannik Sinner, durante una rueda de prensa a mediados de septiembre en Milán. REUTERS/Massimo Pinca
Nacho Encabo

Nacho Encabo

El 10 de marzo de 2024, Jannik Sinner dio positivo por clostebol en un control antidopaje que le realizaron en el torneo de Indian Wells. Ocho días después, en un nuevo test fuera de competición, volvió a dar positivo por la misma sustancia. El italiano, actual número uno del mundo, dijo que ese anabolizante llegó a su cuerpo por una contaminación: que su fisioterapeuta se puso una crema -que llevaba clostebol– en el dedo para cicatrizar una herida y que le dio un masaje sin guantes.

Tras varios meses sin que nada del caso trascendiera, la Agencia Internacional de Integridad del Tenis anunció en un comunicado el 20 de agosto de 2024 que Sinner dio positivo en dos controles pero que no recibía sanción alguna por entender que fue una contaminación involuntaria y que el tenista no pudo hacer nada por evitarlo. El caso generó un gran revuelo en el mundo del tenis y numerosos pesos pesados del deporte denunciaron un doble rasero por parte de las autoridades.

Menos de un mes después de la exoneración de Sinner, la misma Agencia Internacional de Integridad del Tenis emitió un comunicado que, si no llega a ser por el caso del número uno, habría pasado seguramente desapercibido. En el texto, el organismo anunciaba que el Tribunal de Arbitraje Deportivo había rechazado el recurso presentado por el tenista Stefano Battaglino para que le quitaran la sanción por dopaje.

La cronología del caso Battaglino

Battaglino, que llegó a ser número 760 de la ATP en 2022, dio positivo por clostebol el 14 de septiembre de 2022 durante un torneo en la ciudad marroquí de Casablanca. Durante el segundo set de aquel partido, Battaglino pidió un tiempo médico y un fisioterapeuta del torneo le dio un masaje con una crema. Nada más acabar el partido, le realizaron un control de orina. El 17 de octubre, un mes después, el laboratorio que analizó la muestra comunicó que había encontrado metabolitos de clostebol.

El jugador pidió un contraanálisis, cuyo resultado, conocido el 5 de enero de 2023, confirmó la prueba A. Battaglino no tenía una exención de uso terapéutico, un documento firmado por un doctor que permite a los deportistas tomar cierta cantidad de una sustancia prohibida con fines médicos.

"Yo nunca he tomado nada, ni siquiera suplemento, pero me temo que los jueces viven en un mundo imaginario, el del US Open y Wimbledon, y que no tienen la menor idea de los demás niveles del tenis"

Stefano Battaglino

Battaglino usó la misma estrategia de defensa que Sinner. Dijo que la sustancia llegó a su organismo a través de las manos del fisioterapeuta, que le dio un masaje sin guantes. La diferencia es que ni Battaglino ni su abogado pudieron contactar con el fisioterapeuta del evento para que confirmara esa versión, tal y como se lee en la sentencia condenatoria de la ITIA.

El organismo habla de que "la explicación de jugador no es más que una mera especulación" y que "no ha presentado ninguna prueba que respalde su versión". Dice, en su condena, que no es creíble que el fisioterapeuta usara un producto que contiene una sustancia prohibida y que éste no se lavara las manos antes de dar el masaje a Battaglino. Además, asegura que no es posible que el clostebol se detectara en la orina apenas una hora y media después del masaje.

Así que la ITIA le sancionó en octubre de 2023 con cuatro años de suspensión. Battaglino presentó una apelación ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo, pero la corte con sede en Lausana la ha desestimado recientemente, asegurando que el tenista no demostró cómo llegó la sustancia a su organismo. Así pues, Battaglino no podrá volver a competir hasta el 1 de febrero de 2027.

Battaglino dispara: «A uno, nada, y a mí, cuatro años»

El tenista, de 26 años, ha roto ahora su silencio en una entrevista publicada en 'Il Corriere della Sera y ha arremetido contra la ITIA. "El medicamento es el mismo y la cantidad era reducida. Pero a uno, nada, y a mí, cuatro años", ha señalado el tenista. En la sentencia contra Battaglino no aparece la cantidad de clostebol que hallaron en su organismo, mientras que de Sinner sí se sabe: 121 pg/mL del metabolito M1 en el primer control y 122 pg/mL en el segundo.

"Aquellos que no me conocen, tal vez leen el titular y juzgan, pero cuando cuento la historia completa todos me dicen que es una locura"

Stefano Battaglino

"Quiero dejar claro que estoy feliz por Sinner, a quien le deseo todos los éxitos del mundo. Pero yo estoy realmente decepcionado, muchísimo. Para el deporte, soy un apestado", ha añadido Battaglino. "Yo nunca he tomado nada, ni siquiera suplemento, pero me temo que los jueces viven en un mundo imaginario, el del US Open y Wimbledon, y que no tienen la menor idea de los demás niveles del tenis".

"En esos niveles, el control es prácticamente nulo (...) Si tienes entrenador, lo compartes con otros ocho tenistas, lo mismo ocurre con el fisioterapeuta. Y luego compartes habitaciones con otros jugadores, tomas vuelos nocturnos y taxis colectivos para ir a los torneos. ¿Sabes cuántos riesgos de contaminación hay?", ha explicado el jugador.

Battaglino, que trabaja en un negocio familiar hasta que se termine la sanción, insite en que es inocente. "Lo que más me molesta es que alguien piense que soy un dopado, es decir, que he consumido sustancias para hacer trampa. Eso no es así, nunca lo he hecho. Y aquellos que no me conocen, tal vez leen el titular y juzgan, pero cuando cuento la historia completa todos me dicen que es una locura".