Los capos del tenis mundial justifican el criticado adiós a Nadal en la Davis: "Fue la despedida que Rafa quería"

Nada más consumarse la derrota de Carlos Alcaraz y Marcel Granollers ante Botic Van de Zandschulp y Wesley Koolhof sobre la rapidísima pista del Martín Carpena, la organización de la Copa Davis activó todos los protocolos para homenajear a Rafael Nadal, que en ese preciso momento, sentado en el banquillo del pabellón malacitano, acababa de poner punto y final a su carrera deportiva.

Comenzó entonces un homenaje de despedida que emocionó —y agotó— al mejor tenista español de todos los tiempos, pero que también recibió críticas. La llamativa ausencia de Toni Nadal y el vídeo proyectado en el pabellón malacitano, ideado para rendir pleitesía a la trayectoria de Nadal, pero plagado de futbolistas y sin la epicidad que se espera de un adiós legendario, concentraron el grueso de los juicios negativos.

Ni Roger Federer ni Novak Djokovic estuvieron presentes en Málaga. Todo se limitó a unos emotivos mensajes por redes sociales. Una estampa algo fría, más aún si cabe por las comparaciones con otras leyendas —Federer entre ellas— y por el contexto deportivo: una derrota a contrapié en los cuartos de final de un torneo en el que se esperaba a España en la final, brindando un digno homenaje al mejor tenista de su historia.

Solo cinco días después, y justo antes de que arrancara la final de la Copa Davis entre Italia y Países Bajos, el presidente de la Federación Internacional de Tenis (ITF), David Haggerty, y el director de las finales del torneo, Feliciano López —que es, a su vez, excompañero y amigo de Nadal—, han atendido a los medios de comunicación para valorar el devenir del torneo. Y como era de esperar, el adiós del manacorí no ha tardado en salir.

"Creo que deberíamos centrarnos en el hecho de que Rafa haya elegido la Copa Davis como el último torneo de su carrera más que en seguir hablando de su ceremonia de despedida", ha señalado López, director también del Mutua Madrid Open. "Sinceramente, lo hicimos lo mejor que pudimos. Ahora es momento de poner el foco en eso, en el hecho de que eligió la Davis como su último torneo".

Es entonces cuando Haggerty, que en un primer momento no había sido interpelado para responder a la pregunta, se suma a la conversación. "Quiero añadir algo más", ha comentado en la sala de prensa del Carpena. "Rafa es un jugador increíble y deja un legado que ha inspirado a millones de personas y jugadores de todo el mundo".

"Por ello, creímos que era muy importante escuchar lo que Rafa quería, es decir, saber cómo quería ser homenajeado. Y eso es exactamente lo que hicimos", ha sentenciado el directivo estadounidense. "Escuchamos lo que nos dijo y cumplimos. Al final, la gente puede tener las opiniones que quiera y pensar que la despedida estuvo bien o estuvo mal, pero para mí lo más importante es que hicimos la ceremonia que Rafa quería. Y, para ser honestos, más aún siendo quien es, creo que fue una gran velada".