Aston Martin lucha contra el tiempo en el momento más incierto desde que llegó Fernando Alonso
Tras la salida de su director técnico y el pésimo rendimiento en pista, el equipo británico se reestructura a contrarreloj para ser competitivo en 2026.
El peor enemigo de Aston Martin es el tiempo. Si su plan es ganar carreras en 2026 y el Mundial en 2027, llegan tarde. Y a Fernando Alonso, con 43 años, tampoco le sobran páginas en el calendario. El equipo británico se encuentra en un momento clave tanto para su presente como para su futuro dentro de su ambicioso proyecto. Ese que arrancó con el fichaje de Sebastian Vettel en 2020 y, más tarde, con el del asturiano en 2022.
La escudería de Silverstone está llena de millones pero pide tiempo a gritos. Las prisas siempre son malas consejeras y a Aston Martin, que ha ido cayendo este año en la parrilla, le han terminado pudiendo. El primer afectado ha sido Dan Fallows, ya exdirector técnico, que llegó como una estrella para diseñar un coche campeón.
El equipo ha entendido que no podía seguir al frente más tiempo tras los malos resultados: el invierno de 2025 lleva tiempo marcado en rojo para presentar en 2026 un monoplaza competitivo. Será el primer año con nueva reglamentación y podrá marcar el devenir de Aston Martin. Por ahora, las cuentas no salen: han sido el penúltimo equipo en las últimas tres citas cuando hace año y medio peleaban por podios. Ocho se llevó Alonso.
Aston Martin Aramco announces change to technical leadership team.
— Aston Martin Aramco F1 Team (@AstonMartinF1) November 12, 2024
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El declive está siendo tremendo y había que ponerle freno. En la fábrica de Silverstone, el mandamás Lawrence Stroll ya se empieza a desesperar pensando en las desorbitadas inversiones que lleva tiempo acometiendo. Desde los sueldos de los campeones Vettel y Alonso hasta sus nuevas instalaciones.
La moderna fábrica, el nuevo túnel de viento y el renovado simulador, el fichaje del superingeniero Adrian Newey, el de otros cerebros como Enrico Cardile o el nuevo CEO Andy Cowell, el acuerdo con Honda como nuevo motorista para 2026 o los combustibles Aramco. Con una alineación así, es complicado estar mejor colocado para optar a todo.
Hasta que Newey se ponga a trabajar en marzo, se abre un periodo incierto. El británico no solucionará de la noche a la mañana los problemas del bólido pero se espera que pueda cambiar las cosas. Mientras, hay muchas preguntas en el aire. ¿Quién será director técnico tras el periodo temporal de Bob Bell? ¿Qué ocurrirá con Mike Krack y Tom McCullough, dos cargos grandes? ¿Cuánto peso tendrá Newey y qué cambia tras el comunicado sobre Fallows?
En caída libre
El talento de Alonso para exprimir el coche es la guinda para colocar el monoplaza arriba. El caso es que el equipo británico está ahora más lejos que nunca de sus ambiciosos planes. En la primera parte de 2023, tenían el segundo coche más rápido y, desde mitad de año, se llevan desplomando... hasta hoy.
Este curso solo han retrocedido. No es que el proyecto tiemble, simplemente atraviesa un momento fundamental para reaccionar y estar listos para el nuevo reglamento. El tiempo corre en contra de 2026 y de 2027, cuando su piloto estrella ya tenga 45 años. A la 'pérdida de galones' de Dan Fallows, que seguirá en la estructura, se podrían sumar otras decisiones de peso, especulan medios internacionales.
Lawrence Stroll siempre ha destacado que su obsesión es ganar. No piensa en otra cosa como experimentado hombre de negocios. Ha gastado y gastará lo que haga falta por convertirse en campeón del mundo. En un momento de profundo valle como el actual, está demostrando que no le va a temblar el pulso. Con Fallows o con quien sea.