Isaac Nogués, el campeón del mundo Sub-19 y futuro de la Selccción que se foguea en la G-League: "Magic Johnson siempre ha sido mi referente"

El baloncesto español se encuentra en un momento de reconstrucción, como se pudo ver en las últimas ventanas FIBA, en las que los de Scariolo consiguieron el pase al Eurobasket 2025. Sin embargo, por detrás viene una camada que ha conseguido muchos logros, entre los que destaca ganar el Mundial Sub-19 de 2023, como ya hiciera la generación dorada del baloncesto español. Hasta que lleguen esos jóvenes, tan solo Santi Aldama representa al baloncesto español en la NBA como jugador, aunque también Jordi Fernández como técnico está en la mejor liga de baloncesto del mundo. Pero hay más atractivos.

Además de los jugadores universitarios, Isaac Nogués está envuelto en el baloncesto profesional estadounidense, más concretamente en los Rip City Remix, el equipo afiliado de los Portland Trail Blazers en la G-League, dirigidos por otro español, Sergi Oliva. El base catalán, especialista defensivo, como demuestran sus 6 robos de balón en la final del Mundial Sub-19, ha llegado esta temporada a Estados Unidos a sus 20 años. Habla con Relevo para explicar cómo están siendo sus primeros meses y lo que le espera en el futuro.

La verdad es que muy bien, muy contento. Me he adaptado muy bien desde el principio, con los compañeros cada día mejor, y poco a poco cada vez más adaptado, aunque creo que estoy 100% adaptado en casi todos los aspectos, y mejorando a nivel deportivo, que es lo más importante.

No, no me han hecho nada. En mi equipo somos solo tres o cuatro novatos, pero no me han hecho novatada, aunque sí que se ríen de mí, porque soy el único español y hay algunas cosas que no entiendo, pero novatadas nada.

Llevaba un nivel base, con el que podía hablar con cualquier persona. Pero me he dado cuenta de que hay veces que me cuesta entender algunas cosas, sobre todo según el acento que tenga la persona. Pero traía una buena base, aunque estoy mejorando.

Sinceramente, mi padre fue jugador y me incitó a jugar al baloncesto. Si por mí hubiera sido, hubiera jugado al fútbol, aunque mi padre fue quien me hizo iniciarme en el baloncesto.

Mi padre llegó hasta el Junior del Barça.

Para mí no era muy 'heavy', para mí era una extraescolar más, en un equipo diferente. Aunque cuando las cosas se empezaron a poner más serias, seguía siendo igual. Jugué solo dos años en otro equipo que no fuera el Joventut, para mí era ir a jugar con mis amigos.

Desde pequeño, siempre, Magic Johnson ha sido mi referente. A la hora de jugar no tenemos nada que ver, pero ha sido mi referente.

Soy muy sincero con todo, y defensivamente me considero el mejor, desde pequeño he sido el mejor. Cuando era muy pequeño tenía mucha facilidad para robar balones, evidentemente cuando vas creciendo se complica más, pero no es algo en lo que me haya especializado, siempre ha ido conmigo. Cuando vas haciéndote mayor a lo mejor no es tanto robar balones, es defender en general, que no te anoten.

No llegué a entrenar con el primer equipo. Estuve 12 años en el Joventut y siempre fui muy importante en todos los equipos en los que estuve, siempre he estado bien valorado hasta que jugué con el Junior en Liga EBA. Yo no era de los mejores, era muy importante, pero no de los mejores. Al final se valora a un jugador por la capacidad de anotar, la capacidad ofensiva, poner a un jugador de 17-18 años que su especialidad es defender, no lo veían.

Doy ese paso porque no tengo muchas más opciones. La experiencia del Mundial fue muy buena, creo que el día en el que nos proclamamos campeones del mundo es el mejor día de mi vida, el día en el que más feliz he sido. Pero, durante todo el proceso, fue algo espectacular.

Me la dejé en el coche un día que la tuve que llevar a no sé donde, y la cogió mi madre. A ella le preocupaba que si me rompían el coche se la llevaran, así que está en casa de mi madre, en mi habitación debe estar.

Sí, fiché antes del Mundial y creo que era el único equipo interesado. Igual había alguno más, pero era la mejor opción.

Sí, totalmente. Llegaron ofertas de algunas universidades, pero ya había firmado con Huesca. Pero sí, yo creo que hubieran llegado más ofertas, seguro.

No las sé, si te soy sincero. Una vez firmé, me centré en Huesca, después de la final me lo dijo mi representante, pero no entramos en detalle, no es porque no te las quiera decir, sino porque no las sé.

Aprendí mucho, sobre todo con mi entrenador Rafa Sanz, que me ayudó mucho durante todo el año. Mis compañeros que ya habían jugado en esa liga me ayudaron mucho. Cuando juegas coges experiencia, pero para mí era una Liga EBA mejorada, igual que la Liga EBA me parece una Liga Junior mejorada. Se nota el cambio de nivel en la calidad de los jugadores.

Me llega por mi representante, que íbamos a apuntarnos al draft de la G-League. Después pasan tres o cuatro meses hasta que me entero del equipo que me ha elegido, y en mi mano está si ir para allá o quedarme, y decido irme a Estados Unidos.

Sólo firmé por un año.

Yo me presento totalmente a ciegas, sin saber donde puedo ir. No es hasta 3 días antes del draft, el 7 de julio recuerdo, que sé que hay 3-4 franquicias interesadas, hasta ese momento yo no sabía nada.

No es muy habitual. El primero fue Izan (Almansa) y el segundo he sido yo, no es nada habitual. Nunca lo había pensado, ni el año pasado siquiera. Siempre había pensado en hacer carrera en España o en Europa, en Francia, Italia… pero siempre en Europa.

Con Izan hablé mucho porque en todo el proceso estábamos juntos en la Selección, en el Eurobasket Sub-20. Estamos del 10 de junio al 21 de julio, más de un mes juntos. Lo del draft lo sé el 10 de julio, hablé mucho con él, preguntándole y él me resolvía todas las dudas.

Muy bien, no te voy a mentir. Se juega a un ritmo que a mí me gusta, es difícil también porque defensivamente tienes que estar muy atento, porque hay gente muy buena, con mucho talento. Pero estoy adaptado, me gusta, es muy divertido jugar rápido y con gente tan buena, tanto contrincantes como mis compañeros, estoy muy bien.

Jugamos contra un chico que nos metió 43 puntos (Jaden Shackelford), y siempre confío mucho en mí, en mi defensa, pero cuando lo defendí, aunque creo que lo defendí bien, me metió canastones, un chico muy muy bueno. De mi equipo, que me sorprendan, te diría que hay seis que me sorprenden desde el día uno. James Bouknight es el primero con el que empecé a entrenar y es espectacular, es el jugador que más talento tiene con el que he compartido pista, está jugando en la G- League porque no pudo jugar durante 6 meses, pero es jugador NBA, es puro talento, es una locura.

Los he visto, pero no en pista. En el fisio, en el gimnasio, en el restaurante… pero en pista no. Me ha sorprendido el físico, son muy grandes, en la G-League ya me sorprenden los físicos, pero son muy grandes.

El nivel me ha sorprendido mucho. Lo profesional que es la liga. El nivel de seguridad, de fans..., no me lo esperaba así, el nivel es mucho más alto de lo que yo me esperaba.

Hay veces que no hay mucha gente porque juegas a las 12 de la mañana un día laborable. La liga no pone los horarios para que vayan los fans, aunque sí que hay partidos con mucha gente, pero sí, sobre todo hay mucho scout de la NBA, eso sí.

Lo de que no se entrena, cuando ya empiezas la liga es complicado. Por ejemplo, esta semana tenemos partido lunes, miércoles, viernes y domingo, entonces entrenas el día de partido, pero es "work through", entrenamientos en los que repasas jugadas y haces tiro, porque ese mismo día tienes partido. Luego, al día siguiente es post y previa de partido, entonces el entreno tampoco es muy duro. Los entrenos antes de empezar la liga, a lo mejor llegaba al pabellón a las dos y me iba a las seis, estaba 3-4 horas entrenando. Una vez empiezas la competición, hay 50 partidos y no puedes estar todos los días entrenando.

No, es algo que me gusta mucho más. Los jugadores lo que queremos es jugar, entrenas porque tienes que entrenar, pero todo jugador lo que quiere es jugar. Además, es una manera de que si juegas mal el lunes, sabes que el miércoles o el jueves tienes otra oportunidad, y sino el sábado, tienes muchas opciones para jugar bien, para arreglar tus errores, a mí me gusta jugar mucho más tres o cuatro veces que una por semana.

A Sergi no lo conocía antes de venir aquí, porque en principio no iba a ser el entrenador. En Cataluña conozco a muchos entrenadores, pero a Sergi no le conocía. Y lo que me pide es que siga dando el nivel defensivo que tengo, que es por lo que la franquicia me ha fichado, pero también me anima a seguir trabajando en mejorar mi tiro, que si estoy sólo, que tire, que siga trabajando en los atributos ofensivos que más me cuestan.

La rotación no depende de mí. Al haber jugadores 'two-way' la rotación es más corta, porque son jugadores que tienen que jugar muchos minutos, es cuando no están cuando te tienes que ganar la confianza de poder jugar estos partidos, es algo que no depende de mí. Si no están los 'two-way' y no juegas, es algo que te tienes que ganar.

Está claro que el tiro de tres es algo que tengo que mejorar. Para mucha gente es vital para poder jugar, yo también creo que es muy importante y por eso lo trabajo prácticamente cada día.

Sinceramente, no pienso mucho en el futuro ahora mismo estando aquí, es un poco indeciso. Si estuviera en España, tendría claro que el objetivo sería jugar en ACB el año que viene, que siempre ha sido mi objetivo, pero ahora estando aquí no sé qué voy a hacer el año que viene. Todo dependerá de cómo juegue este año, porque solo tengo un año de contrato.

Sinceramente, pasa porque los equipos no dan oportunidades. Yo creo que no se fían, no sé porqué. Sin embargo, ahora estamos viendo como se les ha dado oportunidades a Rafa Villar, Mario Saint-Supery o Rubén Domínguez y lo están haciendo bien, muchos jugadores están teniendo su primera oportunidad en ACB y están jugando muy bien. Sino, lo que pasa es que los jugadores se van a Estados Unidos, a la liga universitaria, pero te aseguro que el 95% de estos jugadores si le diesen la oportunidad en el equipo ACB, ellos se quedaban. Un caso que no, es el de Aday Mara, que se va de todas formas, pero muchos otros que están en Estados Unidos, si se les hubiese dado la oportunidad, se hubieran quedado seguro.

Sí, cada uno coge su rumbo, pero son casos distintos. Izan es un caso aparte porque es un jugador con las cualidades para jugar en la NBA, tanto físicas como técnicas, es un jugador diferente a los demás. Yo creo que el baloncesto español tiene muy buen futuro.

A Juan (Núñez) y a Izan. Y un poco más pequeños, a Mario Saint-Supery y Hugo González, aunque nunca he jugado con ellos, pero los he visto y son superiores a los demás de su generación. De mi generación hay mucho nivel, Jordi Rodríguez, Aday, Lucas Langarita…

A mí me hace ilusión, porque es una generación muy top. La suya es una generación que todos han tenido una carrera brillante, y es un orgullo que nos comparen.

Es una generación que llevamos muchos años juntos, nos conocemos todos muy bien. Lo de 'La Familia' no es por hablar, realmente es cierto.

Me llevo muy bien con muchos. Te podría decir que con Lucas Langarita me llevo muy bien. Jordi (Rodríguez) y Rafa Villar, que también son catalanes, son casi como mis hermanos. Baba, David Gómez, Izan… me dejo nombres, nos llevamos muy bien todos. Cuando se acaban las concentraciones de la Selección seguimos hablando. Con Sediq Garuba también me llevo muy bien, en general con todos.

Lucas tiene mucho talento, ofensivamente es muy bueno, puede tirar, puede penetrar, salta mucho… a mi encanta como jugador. Igual tiene que mejorar la defensa, pero tiene nivel ACB.

Sin duda, ojalá poder ganar confianza en mi tiro y hacer una buena temporada que me haga dar otro salto más la temporada que viene, o poder seguir por este camino.