La intrahistoria del amor de la estrella de la NBA Jaylen Brown por el Córdoba

Es una de las imágenes más llamativos de lo que llevamos de año. Es habitual que los jugadores de la NBA sean estrafalarios, arriesgados u originales — que cada cuál se quede con el adjetivo que más le guste — a la hora de vestir. Lo que poca gente o nadie esperaba era ver a una estrella de la NBA como Jaylen Brown, jugador de los Boston Celtics, vistiendo la ropa del Córdoba Club de Fútbol.

La franquicia, campeona de 17 títulos de la mejor liga de baloncesto del mundo, ha compartido en sus redes sociales un álbum de fotos de sus jugadores antes de montarse al avión para volar rumbo a Washington, donde este domingo juegan ante los Wizards. En ella, la gran sorpresa: Brown con un plumas del conjunto blanquiverde. Una imagen que no ha tardado en viralizarse en redes sociales y que ha impactado al propio club andaluz. "Buena elección de abrigo. Te esperamos en Córdoba para repetir la visita que nos hiciste en 2017", escribía el club en su cuenta de X.

Y es que la relación de Brown y la ciudad de Córdoba viene de lejos. En 2017, durante una gira de jugadores que viajaron a algunas ciudades españoles, Brown visitó la capital califa para una serie de actividades sociales y deportivas bajo la denominación de 'NBA Zone'. Quizás, la elección tuvo que ver por la coincidencia de colores de su propio equipo con los del equipo blanquiverde, porque también estuvo acompañado por la mascota de los Milwaukee Bucks, que también visten de verde y blanco.

A parte de ver La Mezquita, acudir a jugar con los jóvenes cordobeses en diferentes pistas de baloncesto callejero o recibir el cariño de miles de aficionados tras acudir al Hospital Reina Sofía, terminó acudiendo al Estadio de El Arcángel donde llegó a colocarse la camiseta del Córdoba C.F. y marcar un penalti con su zurda, eso sí, con Koki, la mascota del equipo andaluz, bajo los palos. Fue, en aquel momento, cuando el tres veces AllStar se quedó prendado de los colores del equipo y de su ropa que, siete años después, sigue formando parte de su armario. Y, por si fuera poco, la marca deportiva del abrigo confirma que lo compró temporadas después de su primera visita a la ciudad.

Además, su relación con Andalucía es estrecha. Muchas de sus vacaciones las disfruta en la costa de la provincia de Málaga, donde también organiza un campus para jugadores jóvenes y es habitual verle por la Costa del Sol acompañado de su séquito.