Rudy Fernández, un último baile antes de cumplir con la promesa a su padre

Rudy Fernández vestirá la camiseta del Real Madrid una temporada más. Era un secreto a voces que él mismo se encargó de recordar hace unos días en la presentación de su campus: "Me queda un año más de contrato, según estipula el contrato, que está casi hecho". Hoy ya no hay casi y el conjunto blanco ha hecho oficial la renovación de uno de sus capitanes por una temporada más.

En sus 12 temporadas defendiendo la camiseta blanca Rudy ha ganado 23 títulos: 3 Copas de Europa, 1 Copa Intercontinental, 6 Ligas, 5 Copas del Rey y 8 Supercopas de España. Además, con el Madrid ha sido elegido 2 veces en el quinteto ideal de la Euroliga (2012-13 y 2013-2014), 2 veces en el quinteto ideal de la Liga (2012-2013 y 2013-2014) y ha logrado 1 MVP de la Supercopa de España (2012), 1 MVP de la Copa del Rey (2015) y 1 MVP de la final de la Liga (2017-2018). Un palmarés inigualable que ahora podrá seguir ampliando.

A sus 38 años el balear, que aterrizó en el Real Madrid en 2011 tras su paso por la NBA, no piensa todavía en la retirada. De hecho, sigue manteniendo la ambición como forma de combatir el tiempo. Y siempre con un objetivo en mente: hacer historia y convertirse en el primer jugador de baloncesto con seis Juegos Olímpicos a sus espaldas. Lo tiene a tiro y esa es la gasolina que le mueve para renovar con el conjunto blanco y seguir siendo referente en la selección.

"Puede ser que llegue a la Olimpiada. Le prometí a mi padre que la Olimpiada sería mi último torneo y creo que será así a nivel profesional; ahí espero terminar mi carrera en la Selección española", recordaba hace unos días el jugador balear, que está a siete partidos de superar a Juan Carlos Navarro como el jugador que más veces ha vestido la camiseta del conjunto nacional. Un récord que puede batir este mismo verano, al formar parte de los 16 convocados por Sergio Scariolo para el Mundial. Un campeonato que ya ha conquistado en dos ocasiones.

Antes de llegar a París, Rudy tendrá la oportunidad de seguir ampliando su palmarés con el Real Madrid. Sin tanto protagonismo en la cancha como en temporadas anteriores, Rudy ha vuelto a ser una pieza fundamental en los esquemas de Chus Mateo, que ha encontrado en el balear la experiencia necesaria para llevar las riendas del equipo en momentos delicados como fue la eliminatoria de cuartos de la Euroliga ante el Partizán o en la Final Four conquistada por los blancos.