El hilo de esperanza del tío Toni antes de que Rafa Nadal se despida en la Copa Davis: "Hacía tiempo que no le veía así"

Transcurridos más de tres meses desde que Rafael Nadal disputó en los Juegos Olímpicos de París su último partido oficial, algo menos si uno cuenta la lucrativa exhibición en Arabia Saudí, la cuenta atrás no hace más que acercarnos al final del camino. Solo restan 14 días, esto es, dos semanas exactas, para que el manacorí se vista de corto en las finales de la Copa Davis de Málaga, la última cita de su legendaria carrera como tenista profesional.

Qué mejor momento que este, por lo tanto, para valorar su estado de forma con la persona que más tiempo le ha acompañado en la pista. Toni Nadal, padrino de honor de 'Moviéndonos por la vida', una campaña impulsada por la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), la Asociación de Cáncer de Próstata (ANCAP) y Bayer, ha atendido a Relevo este martes en la capital para analizar los últimos días de su sobrino como profesional.

"Le estoy viendo entrenar muy bien estos últimos días", ha asegurado el técnico mallorquín, compañero de viaje de su sobrino desde su debut en la élite, allá por 2001, hasta el cierre del curso 2017, cuando Rafael unió su camino con Carlos Moyá. "Hacía tiempo que no le veía entrenar con la misma intensidad".

Eso sí, Toni no ha visto problema en aclarar que su visión, valiosa, pero subjetiva, se ajusta únicamente a lo visto en los entrenamientos "Claro, no es lo mismo el entreno que la competición", advierte en Madrid. "Lo que he visto estos días me augura un gran nivel, un muy buen nivel, pero después hay que aplicarlo el día de la competición".

"Por eso creo que tanto él como David Ferrer [seleccionador del equipo español de la Copa Davis] tendrán que esperar a ver las evoluciones en los días previos al inicio de la competición en Málaga", añade Nadal, de 61 años.

Hace solo unos días, durante el desarrollo de la Six Kings Cup en Arabia Saudí, el propio Toni Nadal ejerció como comentarista en la señal de DAZN. Allí vio a un Rafa diferente al que acostumbraba, más lento, más lastrado físicamente.

"Soy una persona bastante lógica y que no le suele pedir peras al olmo", explica a este medio. "Sabía cómo estaba Rafael [en Arabia Saudí]. Sabía que sus movimientos no iban a ser lo eléctricos que eran antes, así que cuando narré esos partidos no esperaba encontrarme al Rafael del US Open 2013 o el de Wimbledon 2008 o Roland Garros 2008".

"Sabía y sé que voy a ver a otro Rafael", sentencia quien levantó 17 títulos de Grand Slam a la sombra de su sobrino, para muchos, el mejor deportista español de todos los tiempos. "Sé que voy a ver a otro Rafael. Es algo que ahora mismo tengo asumido. Soy consciente de que el nivel está lejos de aquella versión".