Rafa Nadal y una foto de hemeroteca bendicen al nuevo rey de los jóvenes

El brasileño Joao Fonseca (145º ATP) ganó el torneo ATP NextGen (el 'Masters Sub-21' del tenis masculino), derrotando en la final al estadounidense Learner Tien (122º), por 2-4, 4-3 (10/8), 4-0 y 4-2, este domingo en Yedá (Arabia Saudita). Fonseca, el jugador más joven de esta edición (18 años), ganó los cinco partidos disputados esta semana en la competición. Sucede en el palmarés al serbio Hamad Medjedovic en un torneo creado en 2017 y que tiene en su palmarés a estrellas actuales como el italiano Jannik Sinner (2019) o el español Carlos Alcaraz (2021).

"Estaba muy nervioso antes del partido, sabía que iba a ser difícil", contó Fonseca, que tuvo como espectador de lujo en el partido a la leyenda española Rafa Nadal, recién retirado. Después del partido, Nadal (38 años) se acercó a felicitar a Fonseca por su éxito.

"Había jugado una final contra Learner en júniors, en el Abierto de Estados Unidos en 2023, sabía cómo juega. Es un chico estupendo y un gran jugador, sabíamos que iba a ser difícil, mental y físicamente. Pero lo he conseguido", festejó. Fonseca, ganador más joven de la historia del torneo a sus 18 años, y Tien (19 años) se habían enfrentado ya el jueves en la fase de grupos y el brasileño también había sido el ganador entonces, por 4-0, 4-0, 1-4 y 4-2.

El año 2024 ha sido el de la gran eclosión de Fonseca, que había empezado el mismo en el puesto 730º de la ATP. Fue cuartofinalista este año en el torneo de Rio de Janeiro. "Cuando voy a un torneo, necesito creer que puedo ganar. Ahora que he ganado, me cuesta creerlo. Estoy muy orgulloso de lo que he logrado", sentenció.

Si todo sigue según su curso, Joao Fonseca hará grandes cosas en el tenis. Desde luego, ya está avalado por una leyenda como Rafa Nadal, que acudió a la pista para mostrarle su respeto a él y a todos los nuevos talentos del tenis. La imagen fue de las más virales de una tarde que presentó al vigente rey de la juventud.

En 2014, con tan solo siete años, un chaval veía desde la grada a su ídolo Rafa Nadal competir en Río de Janeiro. Ahora, diez años después, el chico que soñaba con dedicarse al tenis ha cambiado las tornas con el manacorí y es él el que le felicita y aplaude desde la grada. El tiempo demostrará si esta imagen pasa a la posteridad del deporte o, por el contrario, se queda en anécdota.