La inesperada estampida que provocó la irrupción de un policía nacional en Pekín: "Eh, chicos. ¡Aquí tenéis otro oro!"

Cuando David Cal ganó su segunda medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Pekín, un 23 de agosto de 2008, todos los periodistas españoles allí presentes enfilaron hacia la sala de prensa para escuchar al palista de Cangas de Morrazo. Mientras esperaban que apareciera el gallego, irrumpió en la estancia un miembro de la federación al grito de "eh, chicos. ¡Aquí tenéis otro oro!". Saúl Craviotto y Carlos Pérez acababan de ganar la final del K2 500 metros.

Nadie lo esperaba. Craviotto y 'Perucho' apenas hacía diez meses que paleaban juntos y los Juegos Olímpicos de Pekín fueron su segunda competición como pareja, lo cual explica que la prensa española no diera un duro por ellos. Además, se enfrentaban a Ronald Rauhe y Tim Wieskotte, que hacía ocho años que no perdían en una gran cita, desde su bronce en los Juegos de Sídney en el año 2000.

Los tumbaron por 91 milésimas, pero al llegar a la meta, Craviotto y 'Perucho', creyeron ser segundos. La foto finish determinó que eran oro y marcó el inicio de la leyenda del piragüista catalán, que con su bronce en la prueba de K4 500 en los Juegos de París, junto a Rodrigo Germade, Marcus Cooper y Carlos Arévalo, se erige en el deportista español con más medallas de la historia, superando las cinco de, precisamente, David Cal.

A Craviotto (Lleida, 1984) la pasión por el kayak le viene de familia, pues su padre Manuel también fue piragüista de la Selección y Saúl dio sus primeras paladas enganchado a la piragua de su progenitor. Con 15 años, abandonó su casa para enrolarse en el Centro de Alto Rendimiento del CSD en Madrid.

Y ocho años después, contra todo pronóstico, fue campeón olímpico en Pekín. Le siguieron una plata en K1 en Londres 2012, un bronce en K1 y un oro en K2 en Río de Janeiro 2016 y otra plata en K4 en Tokyo 2020. Y el bronce obtenido este miércoles en París 2024. Un palmarés único para un deportista que no cierra la puerta a disputar otros Juegos Olímpicos.

Pese a sus éxitos, Craviotto no vive exclusivamente del piragüismo. Con 18 años, hizo las oposiciones a Policía Nacional. Durante la época de estudio, compaginó los libros con los entrenamientos en piragua y con un trabajo de electricista junto a su padre. Obtuvo una plaza y desde entonces conjuga su faceta de deportista de élite con la de agente de la autoridad en el Cuerpo Nacional de Policía. 'Perucho', por cierto, también era policía cuando ambos ganaron el oro en Pekín.

En París, Saúl Craviotto ha hecho historia con su sexta medalla olímpica al sobrepasar a David Cal como el más laureado de los deportistas españoles en los Juegos. Y todo empezó con el grito de un miembro de la federación y una estampida provocada por el inesperado triunfo de dos agentes de la autoridad que competían juntos desde hacía unos pocos meses.