Ya es un clásico del Clásico: Vinicius y Gavi se citan entre piques mientras Ancelotti pide "cabeza"
El brasileño protagonizó un sonado encontronazo con el culé en el último Real Madrid-Barça. Llega a la final tras sus rifirrafes con Maffeo.

Vinicius (24 años) va de prueba en prueba. Si después de su expulsión en Mestalla le midió Maffeo, enemigo íntimo, este domingo se reencontrará con otro de los rivales con los que ha tenido sus más y sus menos: Gavi. El '7' y el culé mantuvieron un sonado intercambio de pareceres en el 0-4 del Bernabéu y se vuelven a ver las caras… con un título de por medio y todavía más tensión. Flick pretende mantener al de Los Palacios en el once pese al regreso cautelar de Dani Olmo.
Con la tendencia del blaugrana a caer hacia los costados en las ayudas, la Superfinal garantiza que se retarán en un buen puñado de acciones. Y nadie olvida lo que sucedió en octubre. Con Gavi recién ingresado en el campo (entró en el 87'), el internacional español buscó a Vinicius y le picó con el resultado. "Cuatro", gritó, y repitió el gesto con la mano. El carioca prendió y, según El Chiringuito, le contestó con una réplica fatal: "Sí, sí, pero el lunes me voy a por el Balón de Oro". Antes lo recordó sus "dos Champions".
Como contó paso a paso Relevo, el The Best jamás dudó de que ganaría el galardón de France Football. La noche anterior, cuando un estupefacto Florentino Pérez confirmó que Rodri iba a pegar el sorpasso, la noticia pilló a Vinicius rodeado de toda su familia y de un nutrido grupo de amigos para festejar hasta la madrugada lo que supuestamente se avecinaba. Como quien hace una preboda. Y al final del baile, y cuando ya había prometido un Rolex a sus compañeros como agradecimiento, se topó con la pesadilla. Cuando fue oficial, Gavi no tardó en felicitar a su compañero de Selección: "Muy merecido".
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— DAZN España (@DAZN_ES) October 28, 2024
Esos apenas cinco minutos en el Clásico de ida en LaLiga estuvieron plagados de choques y tiranteces. Vinicius, en un lance, llegó hasta a referirse a la estatura de Gavi. Ancelotti y el cuerpo técnico le recordarán a su estrella que no caiga en las provocaciones, aunque en ocasiones su temperamento no responda a los consejos ni a lo acordado previamente. Tras su roja en Mestalla, por ejemplo, el vestuario dio un tirón de orejas al brasileño y le hicieron ver que se había equivocado con su reacción ante Dimitrievski. Él aceptó el error, lo asumió… y en el siguiente partido, contra el Mallorca, no cayó por poco en la misma trampa.
Ancelotti le cambió en el 88' y ese factor evitó que se metiese de lleno en la tangana final, desencadenada por una colleja de Bellingham a Maffeo. Dos miembros del staff, uno de ellos Davide, tuvieron que sujetar al '7' para evitar que saltase. Luego, el canal Jijantes emitió un vídeo grabado desde el túnel de vestuarios donde se observa como al brasileño tienen que agarrarlo entre dos para frustrar que se vaya a por Morlanes. "Tú, a casa", le decía al centrocampista.
Maffeo quiso buscarle desde el inicio (ya en el 10' fingió una agresión en una actuación patética) y lo encontró. Hoy más que nunca, la caseta insistirá a Vinicius en que se mantenga frío. Gavi tiene otras cuentas pendientes con madridistas: con Ceballos ha protagonizado empujones feos y hasta tirones de pelo. De la Fuente medió entre ambos para que sellasen la paz cuando se encontraron en la Roja.
Vini, ante Kounde
En lo puramente deportivo, el '7' se medirá hoy a Kounde y no a Araujo, su habitual kryptonita en los Clásicos y que parece tener un pie en la Juventus. En el Bernabéu el carioca fue capaz de percutir en su espalda (el francés tiende a ganar altura y dejar espacios) y sólo su falta de acierto en el remate y la de Mbappé impidieron que los blancos se marchasen por delante al descanso. Luego llegó el desastre. Hoy, y con otra Supercopa en juego, tienen una oportunidad idónea para resarcirse.