Carlos Corberán, el valenciano que arrasa en Inglaterra entre Bielsa y Marcelino: "Estudiaba teoría de sistemas para aplicarlo al fútbol"

Carlos Corberán (Valencia, 1983), se ha ganado el respeto de toda Inglaterra. Su gran trabajo como asistente de Marcelo Bielsa en el Leeds, su casi ascenso con el Huddersfield cuando eran el tercer presupuesto más bajo de la competición, y ahora el hecho de tener al West Bromwich Albion en playoff de ascenso tras llevarlo ahí el año pasado, han llevado a que hasta Jurgen Klopp elogie su forma de trabajar: "Sus equipos tienen una identidad de verdad, disfruto viéndolos". Valencia CF Valencia Club de fútbol

Sin embargo, es cierto ese dicho que dicta ''nadie es profeta en su tierra'' y ciertamente Carlos es todavía un desconocido para el gran público en España. No tanto para los clubes, de hecho la UD Las Palmas lo intentó firmar el pasado verano antes de apostar por Luis Carrión. Quizás por ello el técnico reconozca en esta entrevista en Relevo que se siente orgulloso de ser español y valenciano cuando es preguntado si le gustaría recalar en España o al frente de alguno de los clubes de su tierra.

Carlos atiende a Relevo desde Inglaterra para desgranar su fútbol. Su base nace de la 'escuela Villarreal' donde se formó y siempre gusta de tener el balón. Después lo perfeccionó al lado de Marcelo Bielsa con quien comparte una idea similar, pero en los últimos años ha incorporado aspectos de... ¡Marcelino García Toral! Que no es precisamente un técnico de posesión.

Con mucha tristeza, con mucha impotencia, ver que tu gente, tu ciudad, tu pueblo lo pasaban mal. Ver a gente sufrir genera un sentimiento de impotencia muy grande. Ver como han vivido las horas de catástrofe, las posteriores... Te deja durante muchos días una sensación de pena e impotencia porque empatizas con todos, tanto los conocidos afectados como los desconocidos.

Da la sensación de que no estaban viendo España cuando veían las imágenes, me preguntaban ¿Eso es España? ¿Eso ha podido pasar en pleno 2024? Evidentemente para las personas que no son españolas les quedaba como más alejado, pero a medida que pasaban los días han sido más conscientes de lo que hemos pasado.

Mira cuando uno es entrenador de fútbol estás absorbido de muchas cosas hasta que pasa algo gordo y en este caso fue una desgracia que te impacta. En ese momento me sentía obligado éticamente y moralmente a ver las noticias para saber como estaba mi pueblo, mi ciudad... Y esa pena al ver todo eso te absorbe emocionalmente. Yo he llevado ese sentimiento de pena interiormente y no me lo podía quitar ni entrenando.

Yo tuve la suerte de empezar a trabajar en el Villarreal que en ese momento tenía una identidad de juego con Pellegrini muy marcada que se aplicaba a todas las inferiores. Luego asistí a Juan Carlos Garrido y ver al Barcelona de Pep Guardiola... Te sometía, te mermaba. Quise aprender mucho de su propuesta y de la selección española de esos años. Siempre me ha gustado el fútbol desde la pelota y partí de esa base para inspirarme.

Pero te diría que mi evolución los últimos años ha sido más defensiva. Cuando empecé en esto pensaba "defiendo con el balón y así no me atacan", luego llegas a la élite y ves que has de controlar todos los registros, creo que he mantenido la esencia de hacer cosas con balón, pero tenía que hacerme fuerte defensivamente.

Defensivamente trato de basarme en la idea de dos entrenadores que me impactaron mucho: Marcelo Bielsa y Marcelino. Con Bielsa trabajé con él 2 años y su forma de defender es totalmente opuesta a la española, en España defendemos zonalmente, priorizando los espacios. Para Bielsa lo importante son los oponentes y recuperar arriba. Eso a mí me chocó mucho y me impactó, estar dos años con él a su lado me hizo basarme en eso.

El otro es Marcelino porque es un entrenador que maneja el 4-4-2 a nivel defensivo espectacular...

(Ríe) Claro, por eso son dos enfoques tan diferentes pero me han impactado los dos y al final intento coger unas cosas de uno y otras del otro para empezar a reflexionar sobre mi idea defensiva. Nosotros el año pasado fuimos de los equipos que más veces dejó la portería a cero y menos goleados. Y llama la atención, porque nuestra propuesta es de tener la pelota, desde el dominio del balón, partimos de esa premisa. Pero es verdad que con el paso del tiempo he intentado ampliar esa propuesta para adaptarnos a todos los momentos del juego. Para mí el fútbol es un binomio: defensa agresividad y solidez, ataque control y progresión. En ataque, que tengamos el control pero no pequemos de excesivo control y perdamos progresión. En defensa, que seamos un equipo sólido, pero no por eso perdamos agresividad para ir a presionar al rival.

Mira yo llegué al Leeds para entrenar el filial y lo compaginaba con ayudar a Marcelo, pues me llamó el director deportivo del Huddersfield porque se habían enfrentado a nuestro filial y le había gustado la propuesta. Una vez allí, con el tercer presupuesto más bajo llegamos a la final del playoff en Wembley pero perdemos ante el Nottingham Forest... Pero el dueño del Nottingham me llamó porque le gustó la propuesta y me fichó para el Olympiakos, club del cual también es propietario. Después de ahí yo quería parar porque llevaba los años de Bielsa, Huddersfield... Pero es que fue aterrizar en Valencia, tenía una comida con mi familia... Y recibí la llamada del West Bromwich Albion y obviamente no le podía decir que no, pese a que iban últimos.

La verdad es que ha sido un mercado muy raro y difícil porque aunque teníamos un nuevo propietario y el año pasado jugamos el playoff, afrontamos el mercado con la obligación salarial y de Fair Play Financiero de tener que quitarnos a los jugadores que más ganaban, en total teníamos que bajar un 30% la masa salarial. Hicimos un mercado muy difícil con un gran reto que era, a un club de una gran envergadura como es West Bromwich, pues hacer esos movimientos. Empezamos con una plantilla con pocos recursos pero el inicio de liga... quizás esa limitación nos unió y rendimos muy bien, con cinco victorias y un empate, y eso nos llevó a tener una sensación más de ilusión que de realidad.

Cuando vienes de una dinámica buena has de pensar: "Estoy a una semana de vivir una crisis" y te pongo un ejemplo nuestro. Empezamos cinco victorias y un empate, en una semana se nos lesionaron los dos mediocentros. Perdemos en el minuto 90, 3-2 en el campo del Sheffield, luego viene el Middlesbrough a los dos días, con la derrota todavía sin digerir a la plantilla, y perdemos 0-1, y el siguiente partido lo empatamos. Pum, crisis. En una semana. Cuando vienes de una racha buena estás a una semana de una crisis.

Yo no lo considero un loco, diría una persona entregada en vida al fútbol y lo que conlleva. Las personas que son capaces de que su vida profesional esté por encima de la personal, son personas de una entrega difícil de comprender por otro tipo de personas. Pero te lo definiría como un genio por completo, no solo por lo que se ve, sino por lo que no se ve.

Como lidera, como maneja la victoria, como maneja la derrota. Te diría que en cualquier charla prepartido o reflexión postpartido tiene una carga tremenda, él tiene una capacidad de diagnosticar la realidad enorme. Él siempre dice que en el fútbol lo fácil es especular con el futuro y no analizar lo que ha pasado y estoy de acuerdo. Esa capacidad de diagnóstico y análisis es de una persona que es un genio.

Es un requisito indispensable vivir el trabajo como él para trabajar con él. Es como con las parejas, si hay algo que ven de manera diferente muy importante será difícil que se prorrogue en el tiempo, pues esto igual. Yo no soy exfutbolista, pero he sido un apasionado del fútbol toda la vida, cuando empecé en el Villarreal al acabar las jornadas tarde, me iba a la Universidad de Valencia a estudiar postgrados de teoría de sistemas complejos. Matemática pura, pero que pensaba que me podía dar conocimiento. La búsqueda de conocimiento siempre ha sido mi motivación así que cuando estaba con él, cuantas más horas pasaba más me nutría.

Yo creo que tiene que haber una evolución constante, pero es verdad que a la hora de implantar tus ideas requiere de más tiempo que luego quizás cuando el equipo las ha captado ya no es necesario. Mira nosotros por ejemplo antes de los partidos en las concentraciones me gusta estar 15' individualmente con cada jugador para analizar el partido previo que han jugado, me gusta reflexionar con ellos para que entendamos el fútbol de la misma forma. A raíz de trabajar con Marcelo Bielsa vi los frutos que da repetir el proceso con regularidad ¿Le desgastan al jugador esos 15' de concentración hablando conmigo? Bueno es que detrás de esos quince minutos hay mucho trabajo propio. Para mí las concentraciones son momento de trabajo no de relajación, para ellos de relajación salvo 15 minutos.

Es una persona que siempre me ha gustado como defienden sus equipos, he coincidido con él alguna vez y he podido hablar con él, además gente de su cuerpo técnico es cercana a mí. Soy muy aficionado a ver fútbol del que no me toca a mí, siempre que tengo tiempo libre mi staff y yo nos distribuimos varios equipos de equipos que no son ingleses. En verano hacemos lo mismo, este me lo pasé viendo el Leverkusen. Porque una vez estamos en la vorágine de la competición solo te centras en tu equipo y en el próximo rival porque no tienes tiempo material.

Pues estoy viendo el Barça de Flick por el tema de la línea y como reducen espacios, es algo que siempre me ha gustado y ellos lo llevan a un nivel altísimo, lo que tiene sus pros y contras. De hecho justo antes de esta entrevista me estaba descargando el partido que jugaron ante la Real Sociedad. El otro equipo que quiero ver este parón es precisamente el Villarreal de Marcelino.

(Ríe) Mira, Carlos Corberán ficha a los 12 años por infantiles del Valencia, mi padre trabajaba en el banco de Valencia y él no me podía llevar a entrenar. Mi abuelo me dijo con 12 años "¿Quieres ser portero del Valencia?" y yo le dije que claro que era mi ilusión. Y me dijo: "Si esta es tu ilusión tu abuelo hará un sacrificio y te llevará a los entrenos a los partidos y donde haga falta, pero entiende que en esta vida para cumplir objetivos uno tiene que aprender a sacrificarse". Yo tenía 12 años, me sé la vida de mi abuelo (D.E.P) de memoria, porque él me llevaba a entrenar siempre. En la Guerra Civil española su padre falta y él con ocho años saca adelante a su familia y se iba a currar. Con solo ocho añitos. Entiende que yo no me puedo quejar.

A ver yo soy valenciano, siempre me han gustado los equipos que jueguen bien al fútbol. Yo he sido capaz de admirar momentos de juego del Madrid, del Barça, del propio Valencia, del Villarreal de Marcelino... Admiro el juego por encima de los equipos. Ahora bien, soy valenciano y por encima de eso, me considero un valenciano con mucho orgullo de mi tierra y en este momento de apuro más.

(Ríe) Me considero muy valenciano por encima de valencianista. He estado 6 años en el Villarreal por lo que hacia ellos también tengo un sentimiento muy grande, cuando ganaron la Europa League vi a Llaneza, a Roig, a utilleros... Me emocioné porque piensa que son personas con las que estuve seis años de mi vida. Cuando vi al Valencia ganar la Copa del centenario igual, sentí un orgullo tremendo por igual. Ese es el sentimiento valenciano que tengo.

Con pena, uno lo ve con pena. En Valencia hay un sentimiento que es muy especial, yo el campo de Mestalla no lo he defendido como local, he ido como visitante con el Villarreal, pero es un campo que marca, que te marca. El ruido de Mestalla... Intimida a los equipos que pasan por ahí, la afición del Valencia es una afición con un sentimiento muy especial por su club. Ver la división que hay no es bonita, el momento del club tampoco. Uno espera que puedan volver a ser lo que eran como club y como ciudad.

Después de una temporada como la pasada, que fue una temporada buena, creo que siempre es un momento en el que suelen salir posibilidades y la gente pregunta por como es tu situación. Siempre es bonito que pregunten y se informen sobre ti porque es el reconocimiento a la labor de uno, y más si viene de España.

Mi objetivo es ser el mejor entrenador que pueda llegar a ser, ese es mi día a día, vivo con esa obsesión. Cuando me reúno con mi staff no nos decimos las cosas buenas, nos decimos lo que hay que mejorar, lo bueno ya lo sé. Dicho todo esto, te lo repito me considero muy orgulloso de ser español... Y valenciano.

Bueno en parte es más íntimo porque cuando apuestan por ti lo hace una persona, un vínculo personal. Creo que te hace aumentar más la responsabilidad

Sí, pero siempre vas a depender de decisiones de personas ya sea un director deportivo, una junta o un dueño. Creo que la visceralidad la marca mucho el país, en Inglaterra por ejemplo se deja trabajar a los entrenadores, se les respeta muchísimo. Yo cuando me fui del Huddersfield me fui y eso que tenía contrato hasta 2027, un dueño chino y un CEO británico. La palabra proyecto en Inglaterra todavía existe.

En España existen más los equipos que los proyectos. En general aquí hay más respeto por el entrenador: prensa, entorno etc. Creo que en España los clubes deben asegurarse bien de qué entrenador quieren fichar y de hecho creo que los procesos de selección cada vez son más sofisticados también allí, para acertar. Yo siempre que me he reunido he dicho que han de estar muy convencidos de ficharme porque la plantilla debe sentir que yo soy el entrenador del club, en las buenas y en las malas, porque solo así puedes cambiar las cosas que no funcionan bien

Claro, que sepan quien manda y quien toma las decisiones. Al final como líder de un grupo eres el que diagnostica la situación y decide a donde hay que ir. El hecho de que quede claro quien manda reduce posibilidades de que alguien se desvíe.

Bueno es que he trabajado con Víctor Orta y solo puedo decirte que es una de sus grandísimas virtudes, que tiene muchas, es que cuando él apuesta por un entrenador apuesta de verdad. Va a hacer un proceso de selección riguroso, pero cuando ficha a alguien lo hace porque cree que es la apuesta adecuada y lleva esa apuesta hasta a poner su cargo a disposición por él. Con eso dio estabilidad a un momento de inestabilidad.