Messi se sincera: "Mi último partido en un Mundial será en una final, es lo más"

Messi quiere culminar y elevar la narrativa de su carrera erigiéndose campeón del Mundial. Y durante el camino, está poniendo su nombre a varios récords. Con el primer gol de Argentina ante Croacia, desde los once metros, Leo se ha convertido en el máximo goleador de la albiceleste en los Mundiales. Además, la asistencia a Julián Álvarez en el tercer gol argentino le sitúa como el futbolista que más goles ha generado en una Copa del Mundo (19). Argentina ya está en la final.

Durante los primeros minutos del duelo, Messi se tocó el muslo y todo un país contuvo la respiración durante un buen rato. Fue solo un susto. El diez se presentó al punto de penal gracias a la falta que Julián Álvarez le sacó a Livakovic, héroe de Croacia durante el torneo. La colocó al ángulo. Fue su undécimo gol en un Mundial. Con el tanto a Países Bajos empató a Batistuta. Con éste, alcanza el primer puesto.

Es su quinto gol en este Mundial, lo que le sitúa en su mejor marca en el torneo. En 2014, cuando Argentina cayó en la final ante Alemania, Leo se marchó con cuatro. Además, con los goles ante Croacia, Países Bajos y Australia, también se ha convertido en el único jugador argentino en marcar en tres rondas de un Mundial.

No falló desde los once metros y, además, repartió dos asistencias. Si Messi ya era el jugador con más MVP en la historia de los Mundiales, ante Croacia sumó uno más. Es el cuarto de este torneo, el décimo en su carrera. Messi, sin embargo, dijo que él se le habría dado a Julián, autor de dos goles.

 La entrega del premio fue el pretexto para mandar un mensaje. "Le pido a la gente que confíe, este grupo es una locura". "Me acuerdo de mi familia, es lo más importante. Las pasamos malas y buenas, ahora toca disfrutar. Pienso en toda la gente que está en Argentina, que seguro que es una locura también", añadió Leo.

"Este grupo, más allá de la fortaleza, sabe leer cada partido. Sabe sufrir cuando hay que sufrir, tener la pelota cuando hay que tenerla. En cada momento sabemos qué tenemos que hacer", reflexionó Messi sobre una Argentina camaleónica. Comenzó regalando el balón a Croacia, marcó dos goles al contragolpe y luego aletargó el encuentro hasta que los balcánicos se vieron incapaces.

Quien tuvo muy claro cómo describirlo fue Scaloni. "A veces parece que lo decimos porque somos argentinos y pecamos de egoísmo porque es argentino decir que es el mejor de la historia. No hay ninguna duda. Lo vengo diciendo desde hace tiempo y tengo el privilegio de poder entrenarlo y hacerlo es emocionante. Cada vez que lo ves te genera algo y no sólo a los argentinos. Hay poco más que decir de él. Es una suerte y un privilegio que tenga puesta la camiseta albiceleste", relató el seleccionador.

Hasta el entrenador rival, Dalic, opinió sobre él. "No creo que haya mucho más que decir sobre el talento de Messi. Ha sido en los últimos 15 años el mejor jugador del mundo. Hoy ha sido muy peligroso y su calidad ha decantado el partido. Está jugando al máximo. Es el Messi que esperábamos ver", expuso.

El capitán repasó el camino de la albiceleste hasta la final. "El primer partido fue un golpe muy duro para nosotros", comentó sobre la derrota ante Arabia Saudí. Es un desgaste mental muy fuerte jugar cada partido como si fuera una final. Jugamos cinco finales y por suerte pudimos ganarlas todas", explicó el diez.

Sus compañeros, no podía ser de otra manera, también tuvieron palabras para él. "No hay palabras para describirlo. Que aparezca en una semifinal muestra lo gran jugador que es y nos pone contentos por él y por el grupo", dijo Mac Allister. También el Cuti Romero: "Leo es una locura, todos saben lo que es como jugador, pero no tanto la clase de persona que es. Es un referente, un tipo que siempre va a por más. Le han pegado tanto que se vuelve a levantar y va en búsqueda de nuevos retos. Ganó una Copa América, es un referente como otros, Di María, Kun, que ya no está".

Messi culminó su obra de las semifinales con una asistencia memorable. Recibió escorado, con la marca del imperioso Gvardiol pegada a su espalda. Y a pesar de eso, Leo logró deshacerse del central girándose para asistir a un Julián Álvarez que le esperaba en el corazón del área. Fue la octava asistencia de Messi en los Mundiales. Nadie, entre goles y asistencias, generó tantos goles en un Mundial como él. Desde que se recogen datos (1966), ha producido los mismo que Miroslav Klose, Ronaldo Nazario y Gerd Müller.

Después de hablar en conferencia de prensa, el argentino se paró también en zona mixta. Eran más de las 2:30 de la madrugada en Catar, aunque el crack quiso tener también unas palabras para los periodistas que aún le esperaban. "Mucha felicidad por conseguir esto y por poder terminar mi recorrido en los Mundiales jugando mi último partido en una final", dijo. Esas palabras sorprendieron, porque anunció que se será su último Mundial sin que se le preguntara por ello. ¿Lo será? "Sí. Seguramente que sí. Son muchos años para el siguiente y no creo que me dé. Terminar de esta manera es lo más".

Además, sobre su isquio aseguró que está "bien, bien", tranquilizando a todos los seguidores después de llevarse la mano a esa zona en varios momentos del partido. Por último, lanzó un mensaje a todos los argentinos: "Que disfruten, es nuestra sexta final. Que no tengan duda de que vamos a dar el máximo, como hasta ahora. Más allá de ganar o perder la gente entendió que hay que disfrutar. El proceso fue extraordinario. Todos queremos levantar la copa, ser campeones del mundo, pero es un partido de fútbol y puede pasar de todo. Ojalá esta vez sea diferente".