El futbolista que se niega a abandonar su equipo de la Premier League pese a llevar tres años sin jugar

Irracional, absurda y un poco desesperante. Estos son los tres adjetivos que definen a la perfección la situación de Harry Arter estos últimos meses. El 22 de septiembre de 2020 era anunciado como nuevo futbolista del Nottingham Forrest. Desde entonces, solo ha podido disfrutar catorce partidos con el equipo y se ejercita con los reservas.

La última vez que Harry se enfundó la camiseta del Nottingham Forest fue el 9 de enero de 2021, en Copa, contra el Cardiff City (1-0). Una situación que tiene a ambas partes con posturas muy alejadas y que parece no tener remedio a corto plazo debido a que el futbolista no parece tener ninguna propuesta formal encima de la mesa.

Desde que llegó al Forest en 2020, solo ha podido disputar 14 partidos con el equipo. Todo lo demás, han sido cesiones. Primero se fue dirección Charlton y posteriormente recaló en el Notts County.

No obstante, el futbolista irlandés, pese a estar apartado de la primera plantilla, cobra aproximadamente 45.000 semanales y ha percibido desde su inicio unas £6,900,000 libras hasta el momento, según apuntan en Inglaterra. Lo que se traduce en unas 532,000 por partido disputado (14). Asimismo, el futbolista sigue empeñado en querer cumplir de forma íntegra su contrato, aunque parece que 2024 será su última temporada en Nottingham.

Por otro lado, el Nottingham Forest se ha convertido en uno de los grandes protagonistas del mercado en Inglaterra. Desde su vuelta, la Premier ha dado de alta 92 futbolistas por un valor de 324 millones. Ahora, tras ser acusado de irregularidades financieras junto al Everton, busca hacer una limpieza en la plantilla. Su gran objetivo es dar salida a Arter.

2015 fue un año triste para Arter. Harry y su pareja perdieron a su hija pequeña por razones que todavía se desconocen. Arter manifestó a The Guardian que fue un golpe que provocó un cambio sobre su forma de ver y afrontar las cosas. Tras este suceso, el jugador, por aquel entonces del Bournemouth, entendió lo frágil y efímera que es la vida y la suerte que tenía al poder ser futbolista de élite.

En 2017, con la visita del Manchester City al Vitality Stadium de Bournemouth, Pep Guardiola, volvió a enseñarle al mundo, tras el pitido final, su lado más humano. Tras confirmarse la victoria del Manchester City por cero goles a dos, el entrenador catalán salió al campo para felicitar a sus futbolistas y a los del equipo rival.

Guardiola fue especialmente atento y cariñoso con Arter, a quien felicitó por el hecho de estar esperando un hijo después de que hace poco más de un año el centrocampista inglés perdiera a su hija.