Preocupación entre la afición rojiblanca tras una noche de caza de los ultras italianos

Roma - El encuentro entre la AS Roma y el Athletic Club ha despertado una gran ilusión entre los aficionados rojiblancos, que están llegando a la capital italiana poco a poco. El gran desembarco se espera para la mañana de este jueves, con una preocupación generalizada entre los hinchas que ya caminan por la ciudad. Como informó Relevo esta semana, la recomendación de la Peña Leones Italianos era la de tener cuidado lejos de la zona oficial destinada a la afición visitante y esconder símbolos rojiblancos. Había cierto temor al comportamiento de los ultras tanto de la Roma como de la Lazio y la noche del miércoles confirmó la situación.

En el barrio del Trastevere, donde las cervezas y las pizzas eran protagonistas, se pudo ver a varios grupos de ultras, vestidos completamente de negro y con comportamiento amenazante, en busca de aficionados vascos. Según cuentan algunos seguidores rojiblancos, estos radicales incluso robaron camisetas a aficionados por la calle en plena noche. Por el momento no ha reportado ningún incidente más allá de esos desagradables momentos, pero hay mucha preocupación entre la hinchada bilbaína.

Son muchos, consultados por este medio, los que dudan de si disfrutar de la jornada de hoy con la camiseta de su club, conscientes de que puede ser un peligro. Así, la Piazzale delle Canestre, punto oficial de encuentro para los aficionados del Athletic, se convierte en un punto de tranquilidad y seguridad para animar a los suyos escoltados por la policía. "Si quieren visitar Roma, que lo hagan con la bufanda cubierta, que no vengan con ikurriñas o símbolos antifascistas", explicaba Emiliano Gabrielli, uno de los líderes de la peña Italiako Lehoiak y conocedor de los entresijos de la ciudad.

Cabe recordar que el propio Athletic Club también informó en su web de ciertos mecanismos de seguridad y recomendaba a sus aficionados desplazarse al estadio en grupo en los autobuses lanzaderas gratuitos que partirán desde la mencionada Piazzale delle Canestre. Para el regreso, tras el encuentro, los autobuses esperarán en los tornos de la zona visitante para llevar a los aficionados al centro de la ciudad.

Precisamente para evitar problemas, las instituciones han prohibido cualquier marcha en grupo rumbo al Estadio Olímpico, como suele ser habitual en los desplazamientos masivos del conjunto vasco. "Está estrictamente prohibido cualquier tipo de marcha o desfile en dirección al Stadio Olímpico. Los infractores serán sometidos a medidas policiales".