Carapaz explota contra el equipo de Ben O'Connor: "Se ve mucha prepotencia"

Richard Carapaz acometía La Vuelta a España como uno de los grandes favoritos para brindar un espectáculo inolvidable a los aficionados en esta edición. Su inicio no fue alentador, parecía desubicado, igual por el gran esfuerzo del Tour de Francia. Pero la situación dio un vuelco de 180º cuando en la etapa 9, la primera de alta montaña, asestó un golpe certero a los líderes de la general con un ataque a más de 80 km de meta. Su figura, de pronto, hacia temblar a Ben O'Connor, primero de la clasificación, que no quería más sustos. Y, parece habérselo tatuado en la cabeza, porque en la jornada desarrollada en Padrón le impidió, apoyado por su equipo, el paso a otros corredores y terminó con el ecuatoriano por los suelos a 92 km del final.

EF Education-EasyPost, equipo de Carapaz, no daba crédito a lo que había sucedido. El bloqueo intencionado de Ben O'Connor y sus gregarios al frente del pelotón acabó provocando la caída. El ecuatoriano cree que la causa fue generada por la prepotencia de poseer el maillot rojo, o así lo hizo ver en la previa de la etapa 12. "Está habiendo una falta de respeto muy grande. Se ve mucha más prepotencia, no recibí nada de ellos", declaró. El cabreo es palpable, ya que ocuparon todo el ancho de la calzada para impedir el paso de manera deliberada.

La Unión de Ciclismo Internacional (UCI) tomó medidas al respecto. Sancionó a varias ciclistas de Decathlon AG2R por obstruir al pelotón en continuas ocasiones, pero no por el incidente de Carapaz en concreto. El ganador del Giro tiene claro que se cayó por culpa de la acción del Decathlon. "Sí hombre, se vio muy claro".

"Hay muchas maneras de defender el maillot y de la forma que se está haciendo es muy triste. Yo no puedo juzgar, cada quién sabe lo que hace y espero que lo tengan en cuenta", expresó. Además, el dolor físico no fue lo único. Ben O'Connor y sus compañeros no hicieron ni el amago de conocer el estado de Carapaz tras el accidente. "Nada. Por lo menos uno espera que cuando cometes un error lo aceptas pero ni hablar, no recibí ninguna disculpa", explicó el ciclista ecuatoriano.

"Físicamente, no me pasó nada, fueron unos rasguños y no fue nada grave. Dio un poco de rabia porque se perdió el respeto en el pelotón y eso no puede pasar", dijo un Carapaz que cree que se cruzaron los límites de los códigos dentro del pelotón. Este suceso pudo ser aislado, pero ¿se podría repetir? El ciclista de EF Education-EasyPost les pasa la pelota a ellos: "Habría que hablar con ellos, son cosas que nosotros no podemos controlar".