El sacrificio de Carlos Moyà por entrenar a Nadal, contado por su "hermano": "Modificó su estabilidad emocional por creer en Rafa"
Roberto Carretero, comentarista de Movistar Plus+ e íntimo de Moyà, explica en Relevo la especial relación que ha habido entre el campeón de 14 Roland Garros y su entrenador.
"Te quería preguntar por tu amigo Carlos Moyà", le dice el periodista a Roberto Carretero en el palco de Movistar Plus+ en el Martín Carpena durante las Finales de la Copa Davis. "Dirás por mi hermano", responde el comentarista y extenista con una sonrisa. Hay pocas personas que conozcan tan de cerca a Moyà como Roberto Carretero, aquel niño prodigio del tenis que colgó la raqueta con 26 años.
Nacidos con un año de diferencia -Carretero es de agosto de 1975 y Moya de agosto de 1976-, el madrileño y el mallorquín hicieron buenas migas desde que empezaron a coincidir en categorías inferiores y mantienen hasta día de hoy una relación más que estrecha.
"Es la persona que más quiero en este mundo como amigo", se arranca Carretero en una conversación con Relevo. "Porque somos polos opuestos, pero siempre hemos estado muy unidos, desde siempre. Me ha enseñado a ser mejor amigo, mejor padre, mejor persona y mejor compañero de vida. Es una persona muy especial, que parece que está al margen, pero no lo está. Para mí como persona es el número uno. Nunca te va a fallar, nunca te fallará", insiste el hombre que lleva casi dos décadas poniendo voz al tenis en Movistar Plus+.
Eran tan amigos, que Carretero fue el culpable del fugaz paso de Moyà en la televisión. Después de retirarse en 2010, el primer número uno del tenis español y campeón de Roland Garros en 1998 estuvo un tiempo comentando partidos en Movistar Plus+. Fue antes de empezar su andadura en los banquillos, primero con Milos Raonic y desde 2016 con Nadal.
Moyà aceptó el reto de entrar a formar parte del equipo técnico que todavía dirigía Toni Nadal y en el que también estaba Francis Roig. Con el paso del tiempo, tanto Toni como Francis dejaron el equipo y Moyà se quedó al mando, ayudado por Marc López y Gustavo Marcaccio. Viéndolo con perspectiva, fue una decisión más que acertada, pero en aquel diciembre de 2016 había muchas dudas alrededor de Nadal, que llevaba dos años y medio sin levantar un Grand Slam y que estaba viendo cómo Novak Djokovic y Andy Murray mostraban un nivel absolutamente superlativo.
A eso había que añadir las propias dudas que tenía Moyà, que tuvo que hacer un gran sacrificio. Así lo recuerda Roberto Carretero: "Carlos es una persona que tiene su día a día y su vida muy organizados. Es una persona muy talentosa en todos los aspectos y lo tiene todo muy organizado. Y desde que empezó a trabajar con Rafa, que es una persona que por sus lesiones y su manera de ser va y viene mucho... eso es algo que Carlos nunca lo había aceptado en su vida. Sin embargo, por creer en Rafa, por amistad, por ilusión, ha modificado toda esa estabilidad emocional que siempre tiene por estar con Nadal".
Carretero se refiere a todas las idas y venidas que hay en la rutina de un tenista como Nadal. Tantas lesiones, tantas semanas de incertidumbre, tantas giras canceladas... "Rafa siempre te tiene al filo, que si lo deja, que si no lo deja, que si seguimos, que si no, que luego gana un Grand Slam cuando estaba a punto de dejarlo... Todo eso tiene enganchado y es lógico que Carlos necesite ahora un tiempo de tranquilidad con su familia", señala el que fuera campeón de Roland Garros júnior en 1993 y del Masters de Hamburgo en 1996.
Efectivamente, Moyà estará un tiempo sin entrenar. Lo dijo él mismo en Málaga horas antes del adiós definitivo de Nadal. "Mis planes ahora son estar unos años en casa, tranquilo, con mi mujer y mis hijos. Viajar y estar con ellos. Han sido ocho años... que al final te sientes un poco cansado y vacío, no sería honesto empezar ahora con alguien, no tengo la energía", dijo el entrenador en El Partidazo de Cope. "Me apetece estar en casa y dejarlo con Rafa exige un período de luto por mi parte... Hay una conexión emocional importante porque no he estado con un jugador más. He estado con un amigo, con el que he vivido cualquier historia que te puedas imaginar en todos los ámbitos".
De lo que pocas dudan es de que el teléfono de Moyà va a sonar mucho próximamente. Y que al otro lado estarán algunos de los mejores jugadores del mundo. "Le lloverán ofertas, pero tardará en elegirlas", cree Carretero, su "hermano".