¿Qué le puede aportar un nuevo entrenador a Nadal a estas alturas de su carrera?
Nadal solo tuvo dos entrenadores hasta los 30 años y desde entonces ha hecho tres incorporaciones. Gustavo Marcaccio ha sido el último en unirse.
Cuando están a pocos meses de cumplir los 37 años, los tenistas que no han colgado ya la raqueta (la mayoría) suelen pensar más en la retirada que en la posibilidad de ganar títulos de Grand Slam. Con Rafael Nadal nada de eso vale y la noticia adelanta por Relevo de que va a incorporar un nuevo entrenador a su equipo de trabajo es un rugido, una señal de que todavía le queda gasolina en el tanque.
Tras cerrar el 2022 con la conquista de dos títulos de Grand Slam y liderando esa carrera por la historia (tiene 22 grandes por los 21 de Djokovic y los 20 de Federer), Nadal vio cómo Francis Roig, entrenador suyo desde 2004, dejaba el equipo para emprender una nueva aventura por su cuenta.
El balear empezó su carrera con su tío Toni Nadal en el banquillo, en 2004 incorporó a Francis Roig y con esa dupla estuvo hasta que a finales de 2016 se incorporó al equipo Carlos Moyà. Un año más tarde, Toni dio un paso al costado y en diciembre de 2021 llegó Marc López. Moyà. Roig y López se repartieron los torneos de esta última temporada y tras la salida del segundo muchos dieron por hecho que Nadal, con 36 años ya en la mochila, no iba a incorporar a nadie para sustituirle.
Una voz cercana y sincera
Nada más lejos de la realidad: el argentino Gustavo Marcaccio se ha unido al equipo y viajará varias semanas al año junto a Nadal, además de participar en los entrenamientos en la Rafa Nadal Academy. "Es una buena incorporación al equipo y seguro que nos ayudará mucho para seguir el camino", señaló el propio Nadal en su mensaje de bienvenida. Pero, ¿qué le puede aportar un entrenador nuevo a Nadal a sus 36 años y habiendo ganado prácticamente todo?
"La influencia de los entrenadores en los jugadores ya formados es un porcentaje mínimo"
Entrenador de NadalEl español ha demostrado en este 2022 que de motivación va sobrado. Además, no necesita una sacudida a su carrera. La incorporación de Gustavo Marcaccio no se enmarca por lo tanto en la búsqueda de nuevas sensaciones, sino más bien en la posibilidad de encontrar una opinión más de alguien cercano, una persona que le hable desde la confianza. "Cuando me llamaron a mí, quisieron incorporar a alguien de fuera pero sin ser un total desconocido", señaló Moyà hace un par de años sobre su incorporación al equipo en 2016.
Con Marcaccio ocurre algo parecido. Se unió a la academia en 2021, pero antes coincidieron muchos años en el circuito, ya que el argentino fue entrenador de Juan Pico Mónaco, uno de los mejores amigos de Nadal dentro del vestuario. Han pasado infinidad de horas juntos.
Por aquella época, en 2012, Marcaccio habló precisamente del rol del entrenador en una entrevista con el canal BATEnnis. "La influencia de los entrenadores en los jugadores ya formados es un porcentaje mínimo. Podemos discutir, es valioso, pero no deja de ser mínimo", reflexionaba.
"La gente piensa que el entrenador tiene mucha más influencia y mucha más incidencia en los resultados de lo que realmente tiene", añadía. "La capacidad de manejar las situaciones es puro y exclusivo del jugador. Y la capacidad de ejecutar ciertos tiros o ciertos planteos de juego las tiene o no las tiene el jugador".
Está claro que Nadal tiene todas esas capacidades, pero el mallorquín sabe que siempre hay margen de mejora. "Rafa ha tenido la capacidad de adaptar su tenis según pasaban los años", indicaba Marc López a Relevo recientemente. "Desde que está Charly (Moyà) en el equipo, ha incidido mucho en acortar los puntos y en elevar la velocidad del segundo saque". Qué novedades traerá Marcaccio está por ver. Su primera parada juntos será la United Cup en Australia.