Paula Badosa se inclina ante el mazo de Aryna Sabalenka en las semifinales del Open de Australia
La española cede por 6-4 y 6-2 y no puede con la mejor tenista del momento. Sin embargo, Australia le ha demostrado que puede soñar con algo grande.

Al inicio del segundo set, Paula Badosa apoya mal un pie y se va al suelo. Suelta la raqueta en el aire y ella queda boca abajo, tendida sobre la Rod Laver Arena. Enseguida enseña el pulgar, está bien. Y al otro lado de la red, Aryna Sabalenka, su rival, su amiga íntima, se ríe. Badosa responde también con una sonrisa y una mirada cómplice. Durante unos segundos, la española y la bielorrusa se relajan y sueltan toda la tensión que llevan acumulando más de una hora.
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— #AusOpen (@AustralianOpen) January 23, 2025
Porque el partido, toda una semifinal del Open de Australia, está siendo una auténtica batalla. Palo tras palo, porrazo tras porrazo, la número uno consigue doblegar finalmente la resistencia de Badosa y pone fin a su tremenda aventura australiana por 6-4 y 6-2. Dice adiós Badosa a su primera gran oportunidad en un Grand Slam, pero en el vuelo de vuelta tendrá muchos motivos para sonreír: más allá de que haya pisado por primera vez las semis de un grande, la tenista de 27 años se ha demostrado a sí misma que todavía tiene mucho que decir en esto del tenis.
Y eso es algo que hace unos meses parecía una quimera, cuando estaba infiltrándose, poniéndose inyecciones de cortisona en la espalda después de consultar con médicos de medio mundo porque no encontraba solución a la rotura de vértebra que sufrió en mayo de 2023. Pero tras muchos meses de oscuridad, la catalana ha conseguido por fin dar carpetazo a ese capítulo. Ahora ya puede soñar en grande. De momento, ya se ha asegurado regresar al top ten de la WTA, un lugar que no ocupaba desde octubre de 2022.
Su sueño, dicho por ella misma hace un par de días, es ganar un Grand Slam. Motivos tiene para creer en algo así. Aunque para ello tendrá que contar con un tropiezo de Sabalenka. Porque la bielorrusa ahora mismo no tiene rival. Es demasiado superior, demasiado fuerte, demasiado lista y demasiado competitiva. La número uno del ranking se enfrentará el sábado en la final a la ganadora del duelo entre Iga Swiatek y Madison Keys.
El momento en el que Badosa empezó a perder
La pupila de Pol Toledo arrancó el partido con mucho carácter y llegó a estar 2-0 y 40-0 con su servicio. Fue el momento crucial del partido, porque Badosa no pudo anotarse ese juego y lo que le vino después fue un auténtico vendaval.
"Yo no sé cómo lo he hecho en ese momento. Yo ya estaba pensando en los siguientes juegos, pero he podido dar la vuelta a ese momento tan importante...", ha indicado Sabalenka nada más acabar el partido. "Ha sido un partido muy difícil y estoy feliz de verla de nuevo en su mejor nivel. Ha sido una gran batalla y estoy muy feliz de estar otra vez en la final", ha añadido Sabalenka, que busca su tercer Open de Australia consecutivo.
La bielorrusa ha bromeado además sobre su amistad con Badosa. "Pase lo que pase después de un partido, vamos a ser amigas. Es duro, porque son batallas y las dos queremos todo", ha dicho la número uno antes de añadir con humor: "Espero que siga siendo mi amiga. Sé que me va a odiar en las próximas horas, pero después seremos amigas y podremos salir e irnos de compras"