El cambio de dieta que ayudó a Nadal a estirar su carrera al máximo: "No come carne ni embutido ni queso"
Nadal estuvo sin una pauta dietética hasta que en 2013 contrató a una nutricionista. "Solía comerse un bote de Nutella y beber tres litros de Coca Cola al día", llegó a decir un rival.

Rafael Nadal coge un cuchillo, lo hunde en el bote de Nutella y se unta una buena rebanada de pan. Repite el proceso unas cuantas veces durante el desayuno en el hotel. Para comer le espera un plato de pasta gigante en el club. A la hora de la cena, tras su partido, se zampa un entrecote con patatas fritas con un par de Coca Colas en un famoso restaurante del centro de París.
Esa era, a grandes rasgos, la rutina de comidas de Nadal en sus primeros años de reinado en Roland Garros. "Solía comerse un bote de Nutella y beber tres litros de Coca Cola al día", llegó a decir el tenista Janko Tipsarevic. Seguramente exageraba un poco el jugador serbio, pero lo cierto es que Nadal estuvo muchos años comiendo lo que le daba la gana, sin importarle el azúcar, la grasa o los hidratos.
Sin embargo, con el paso de los años, el tenista balear fue entendiendo que una dieta equilibrada era algo fundamental en el deporte de élite, que era algo obligatorio si quería tener una carrera larga y exitosa. Por eso, en su empeño por permanecer en la excelencia, en 2013 decidió contratar los servicios de una nutricionista, Gemma Bes, para que le ayudara a comer mejor, a prevenir lesiones y a recuperar mejor. Fue una decisión difícil porque los deportistas no suelen cambiar lo que funciona y Nadal llevaba una trayectoria impresionante: por aquel entonces ya había ganado más de diez Grand Slam y alcanzado el número uno.

La nueva nutricionista de Nadal
"Soy una persona que se ha ido concienciando con los años. A día de hoy el mundo está más enfocado en cómo cuidarse. Cuando yo empecé, cuando tenía 12 o 13 años, el conocimiento de salud, alimentación y suplementación era muy inferior al de ahora", decía el propio Nadal en 2022 durante un acto en Madrid. "Yo me he dado cuenta de la importancia de la alimentación mucho más tarde. Cuando alguien se acostumbra a hacer las cosas de pequeñito es una cosa que evoluciona de manera natural. A mí me ha costado mucho esfuerzo. A día de hoy soy muy consciente de que cuidarse, cuidar tu cuerpo, es vital. No solo para practicar deporte, sino para tener una salud y una vitalidad necesaria para ser feliz", añadía el balear.
Cuando Nadal pronunció esas palabras, a finales de octubre de 2022 en Madrid durante la presentación de su nueva línea de complementos alimenticios, Gemma Bes ya había dejado de ser su nutricionista personal. Ese cargo lo ocupa desde hace un par de años Nuria Granados, que también es la responsable del área de nutrición del RCD Mallorca desde 2017. Es el último eslabón de una cadena de decisiones que permitieron a Nadal cambiar sus hábitos alimenticios y, en consecuencia, estirar al máximo su carrera.
Granados se encontró a un deportista muy maduro y muy preocupado por cada alimento que llegaba a su plato. "Sabiendo la dificultad que entraña realizar cambios en la dieta de cualquier persona, el que Rafa siga estando dispuesto a aceptar cambios cuando ha ganado todo lo que ha ganado comiendo de una determinada manera, es otra muestra más de su humildad y de su grandeza", respondía a Relevo Granados en una entrevista realizada a finales de 2023.
La dieta antiinflamatoria de Nadal
"No se trata de cambiar de forma radical nada de lo que ha hecho, sino de ir haciendo reajustes, sustituyendo algunos alimentos por otros que también le gusten pero que sean mucho más nutritivos, de incrementar o reducir cantidades, de ajustar la ingesta en pista... Algunos cambios requieren mucho más esfuerzo que otros o incluso un tiempo previo de mentalización, pero no le cuesta nada aceptar los cambios", añadía la doctora en Nutrigenómmica.
En los últimos años, el exnúmero uno ha llevado a cabo lo que se conoce como dieta antiinflamatoria, con muchas verduras de hoja verde, frutos rojos y grasas saludables. "La base de la alimentación de Rafa consiste en pescado, verduras, ensaladas, arroces, patata y frutos secos", indicaba Nuria Granados.

"Los consejos que yo le doy van sobre todo encaminados a cubrir los requerimientos nutricionales según las circunstancias del momento en el que se encuentre. En pretemporada se establecen objetivos de composición corporal, se incrementa la ingesta de proteína y se distribuye a lo largo del día; en periodo competitivo se incrementa el consumo de carbohidratos o si hay que recuperarse de una lesión se intenta dar el soporte nutricional más adecuado. Lo ideal es que la alimentación sea lo más personalizada posible".
Los alimentos no recomendados y el chocolate
Si antes Nadal comía entrecotes, pizza y fritos semanalmente, ahora lleva años cuidando todo casi al milímetro. "Los alimentos no recomendables para Rafa son los mismos que para la población general: alimentos con muy poca densidad nutricional o incluso, con ingredientes que restan más que suman. Me refiero a todos estos productos ultraprocesados con ingredientes de muy baja calidad, con grasas no saludables como las grasas trans o con un exceso de azúcares añadidos", señalaba Nuria Granados.
"Por la noche antes era un espectáculo con el chocolate. Cenaba, me lavaba los dientes y después volvía a recaer. Ahora ya tomo menos por la noche"
Además, hay otros alimentos que están muy limitados en su dieta. "No come ni carne ni embutidos ni queso", añadía la nutricionista sobre el campeón de 22 Grand Slam. "Se dice que existe una forma de nutrirse e infinidad de alimentarse y el objetivo es intentar cubrir los elevados requerimientos nutricionales del deportista de élite y eso se puede hacer dando a elegir según las preferencias personales. Por ejemplo, de los cuatro grupos de alimentos ricos en proteínas que se consideran saludables, Rafa opta por pescado y frutos secos".
El trabajo de Nuria Granados no termina a la hora de determinar qué alimento debe comer o evitar. También realiza análisis de cómo le sientan para ir ajustando todo. "Si al analizar las ingestas se detecta una carencia de una determinada vitamina o mineral o un desequilibrio entre proteínas, grasas y carbohidratos, pues se plantean los reajustes", indica.
Hay un alimento poco recomendable al que Nadal, sin embargo, nunca ha renunciado. Es cierto que cada vez se limitaba más, pero el chocolate es y será una de sus válvulas de escape. "Yo tengo muy buen autocontrol en la pista, que no me enfado nunca, que no tiro la raqueta, pero en eso me cuesta. Por la noche antes era un espectáculo con el chocolate. Cenaba, me lavaba los dientes y después volvía a recaer. Ahora ya tomo menos por la noche. Con leche me sabe mejor, pero es menos sano...", decía entre risas el propio Nadal en El Hormiguero en 2020, cuando confesó que incluso su mujer le esconde los botes de Nutella en casa. "A veces encuentro el botecito de Nutella detrás del todo..."

¿Qué come Nadal en un día de partido?
Nuria Granados, de 62 años y que en su carrera ha asesorado a futbolistas, tenistas, ciclistas, triatletas, nadadores y atletas, explicaba también la dieta que ha seguido Nadal en los días en los que hay competición. "En el día de partido se incrementa el consumo de carbohidratos, se modera el consumo de proteínas y se baja el de grasa. También se disminuye el consumo de fibra. Si la recomendación general es comer los cereales integrales, en días de partido se opta por versiones refinadas", detalla. "El consumo de carbohidratos se completa antes, durante y después del partido con las opciones dentro de la gama de complementos destinada a deportistas: barritas de cereales, geles, bebidas deportivas, gominolas, recuperadores…".