El dominio de Ducati desespera a los que tenían que hacerle sombra

Que Ducati iba a dominar este 2024 era algo por lo que se pagaba muy poco en las casas de apuestas al inicio del curso. Aunque, como siempre, la expectativa era que sus competidores pudiesen recortarles la distancia que los italianos les sacan, sobre todo KTM y Aprilia, porque los japoneses siguen atascados en sus proyectos, en un periodo de muchos cambios y de muchas pruebas. Ducati continúa mandando, pero con la sensación de que con esta GP24 consiguen hacerlo aún con más contundencia. Porque la actual versión de la Desmosedici ha mejorado a la GP23, como se puede ver en los resultados. 

"El año pasado con la 22 se ganaron bastantes carreras. Dicho por Ducati, hay un paso importante. Hay circuitos en los que se nota más, y circuitos en los que menos. Es verdad que no cambia la moto por completo, pero es verdad que el motor tiene algo más, tienen una aerodinámica diferente, que está hecha más para el neumático nuevo trasero que hemos tenido este año", nos decía Alex Márquez este domingo. En números, Ducati ha ganado nueve de las diez carreras disputadas (menos la de Austin que se llevó Aprilia con Maverick Viñales), todas con la GP24; y siete de los diez sprints (por tres de Aprilia), también todos con la última versión de su moto.

"Ya avisé el viernes que nos falta mejorar en gestión de carrera, que Ducati en eso ha dado un paso con respecto al año pasado", nos explicaba en Silverstone Aleix Espargaró. "Van muy fácil ellos, tienen siempre algo más el domingo. Yo para ir a su ritmo destrozo el neumático. Y hoy, si coges la clasificación, la verdad es que habla por sí sola. Lo he intentado todo, creo que he pilotado a un nivel muy alto, y he sido la única Aprilia en medio ahí de todas las Ducati. Pero todas las primeras son Ducati y poco más que eso se puede decir".

De hecho, el domingo las ocho Desmosedici terminaron entre los diez primeros, incluyendo a Franco Morbidelli, que tuvo que cumplir con dos vueltas largas de penalización por haberse llevado por delante a Marco Bezzecchi en el arranque del sprint del sábado. "Hoy he hecho mi récord de cambiar de mapas, arriba, abajo, freno motor, potencia, lo he intentado todo para tratar de minimizar su ventaja lo máximo, pero es bastante frustrante. No queda bien que lo diga, pero muchos de los pilotos que estaban en el grupo de los diez primeros eran bastante más lentos que nosotros. Pero Ducati ha dado un paso muy grande con la gestión de neumáticos, y al final de carrera no puedes hacer más".

Espargaró verbalizaba bien la frustración que se vive tanto en su fábrica, Aprilia, como en KTM, los que tenían que formar la oposición. Los austriacos arrancaron bien el año con su teórico número 1, Brad Binder, que fue segundo en Catar los dos días, aunque el sudafricano ha terminado perdiendo el camino. Ese puesto de liderazgo en la casa centroeuropea lo ha asumido ahora Pedro Acosta, el único debutante en la categoría, que consciente de la desventaja que tienen está usando esta parte del año en trabajar pensando ya en 2025. El murciano, que arrancó con fuerza la temporada, está ahora en un proceso de entender cómo están trabajando en Austria y qué hay que cambiar para disminuir esta distancia que Ducati les saca.

"Yo me he llevado un golpe de realidad grande en las carreras en las que soy competitivo", nos reconocía Espargaró, que salió con fuerza en la carrera de Silverstone para incluso establecer el nuevo récord de la pista a rueda de Jorge Martín y de Pecco Bagnaia. "Mira dónde están las KTM, las demás Aprilia, les he sacado más de 15 segundos, creo, y aun así no me ha valido para luchar por el podio ni de lejos. Así que ahora mismo estamos lejos". Y eso que este verano se ha trabajado duro en Aprilia, que aterrizó en Inglaterra con un nuevo carenado que retocaba en unos veinte puntos distintos su anterior versión, buscando dar agilidad a su prototipo en los cambios de dirección sin perder en la zona de tracción para la salida de las curvas.

"No me preocupa, pero sé que podemos hacer mejores resultados", nos decía un desdibujado Maverick Viñales. "Le debe preocupar a la fábrica. Desde hace cuatro carreras no conseguimos ser competitivos ni estar cerca de los primeros. Deben de estar ellos preocupados por cómo salir de esta situación, porque no va a ser fácil. Yo pienso que somos nosotros los que hemos ido a peor, porque tampoco han hecho tiempo tiempos estratosféricos", apuntaba con sentido crítico. KTM también llevó algunas modificaciones y ahora espera dar un paso hacia delante en la prueba de casa, la del fin de semana próximo en el Red Bull Ring. Un paso porque este trazado puede sacar las virtudes de su moto, aunque siguen perdiendo mucho en los que les favorecen menos. Y es que una clave de la Ducati es que va bien en cualquier sitio, y eso está haciendo ir a la competencia con la lengua fuera. Con medio Mundial por disputar.