Joel Embiid calienta la final olímpica entre Francia y el Team USA: "Me van a abuchear... les diré que la chupen"

A principios de octubre de 2023, cuando empezó a sonar que el Dream Team iba a regresar, liderado por LeBron James para los Juegos Olímpicos de París 2024, había algo que parecía claro: con ese equipo no estaría Joel Embiid. El pívot había dado su palabra a Francia de que defendería los colores del país galo, después de haber incluso obtenido la nacionalidad gala. El plan era perfecto: Victor Wembanyama y Embiid como pareja interior... O casi. Porque cuando al pívot de los Sixers le salió la oportunidad de unirse al 'Dream Team'... ¿cómo iba a rechazarlo?

Pese a que en 2022 había asegurado que jugaría con Francia (tras haberse nacionalizado pese a no haber vivido nunca allí), cuando en octubre del 2023 recibió la nacionalidad estadounidense -y con ella la posibilidad de jugar con EE. UU.- dio un plantón a la selección gala, que sentó bastante mal en la federación francesa y que indignó a la afición.

Todo aquello hizo que, nada más empezar los Juegos Olímpicos, Embiid fuese uno de los grandes focos. Más que nada porque el público francés no olvidaba que el que ahora estará en la final peleando por el oro con el Team USA en un principio debía haber estado ahí, pero en el otro banquillo. Y desde el inicio se lo dejaron claro. Los abucheos al pívot aparecieron desde el primer partido... hasta el último. ¿Y qué ha ocurrido? Que Embiid, unas horas antes de la final, no se ha cortado tampoco en criticar a la afición francesa e incluso ir más allá.

"La selección de EE. UU. frente a Francia... Me conozco, voy a interactuar y lo voy a disfrutar. Me van a abuchear, voy a volver y les diré que la chupen. Va a ser divertido", aseguró el pívot tras el entrenamiento de este viernes. Unas declaraciones que han calentado, sin duda alguna, esa lucha por el oro que tendrá lugar este sábado a las 21:30 horas.

Y es que, si algo ha quedado claro en estos Juegos de París 2024, es que Joel Embiid se ha convertido en el gran villano de la cita olímpica para Francia, el país anfitrión. Y, por tanto, su plantón y sus declaraciones son un aliciente más para que la afición ansíe, aún más, la victoria para llevarse ese oro olímpico como venganza por todo lo ocurrido.