Marcelino no descarta la salida de Danjuma y le deja un 'recado': "Queremos futbolistas que respeten las decisiones del entrenador"

Arnaut Danjuma (27 años) no tiene ni mucho menos garantizada su continuidad en el Villarreal a pesar de marcar ante el Atlético en la primera jornada. El neerlandés, un foco de problemas en los últimos tiempos (en 2022 fue apartado y regresó este verano), ha vuelto con fuerza... pero eso no le vale para obtener la garantía de quedarse.

"Queremos tener la mejor plantilla posible. Ya han venido tres futbolistas para reforzar la parte ofensiva, además de la incorporación de Yéremy Pino, del que ahora podemos disponer, y con Danjuma son cinco. Veremos cuál es la solución final", recordó esta mañana el técnico Marcelino García. Ante la pregunta directa de si el delantero se quedará esta temporada, el asturiano realizó una larga exposición para justificar que su futuro se encuentra en el aire. Cabe recordar que al ex del Everton, ahora con distinta actitud, le condenaron los malos comportamientos en su etapa anterior y que durante un tiempo estuvo repudiado por el vestuario.

"Los que se queden deben aceptar el rol que les toque en cada momento", afirmó Marcelino. "Yo no puedo asegurarle la titularidad a nadie. Primero, porque no sería justo con los demás. Si no eres capaz de asumir absoluta profesionalidad cuando juegas 90 minutos y cuando juegas cero, es mejor que no estés. Deseamos a un perfil de futbolista que nos dé las mismas respuestas a nivel de cohesión de grupo y exigencia en el entrenamiento cuando sale de inicio y cuando no", añadió.

El entrenador, además, apuntó que "los buenos equipos se forman a través de plantillas en las que sus futbolistas tienen calidad profesional y humana en cuanto al respeto a las decisiones de los técnicos y los compañeros". "Si un futbolista no juega puede enfadarse conmigo, pero no aceptar esa situación es no respetar a sus compañeros. Así entiendo yo el colectivo. Con los que piensan así son los que nos tenemos que quedar", dijo para terminar. Su mensaje se entiende como un recado para el atacante, que goza de ofertas para salir. Su agente, de hecho, se pasó por Vila-real la semana pasada para estudiarlas y analizarlas con el club.