Ni cortinas, ni pizzas, ni puño cerrado de Joan Laporta: el cierre de mercado más tranquilo que se recuerda en Can Barça

"Cerrado por vacaciones" se podría haber colgado perfectamente en las oficinas del Camp Nou y los despachos de los ejecutivos de la dirección deportiva en la Ciudad Deportiva de Sant Joan Despí. Tras la lesión de Marc Bernal, el mercado azulgrana se revolucionó durante unas horas. Hasta que la realidad hizo bajar a Deco y compañía a la tierra. Sin estar en la regla 1:1 y sin fair play era imposible acometer cualquier operación, otra operación al margen de las de Pau Víctor y Dani Olmo. Es poco habitual que el mercado de fichajes del Barça sé de por cerrado 24 horas antes.

No se recordaba una matinal tan tranquila en Sant Joan Despí desde hacía muchos años. Ni tan siquiera el director deportivo, Deco, que se fue a Oporto a celebrar su cumpleaños, se ha dejado caer por su despacho. Solo se ha visto a Joan Laporta, que se ha reunido con Flick para darle explicaciones sobre el mercado. Esta mañana, entrenamiento previo al partido ante el Valladolid y rueda de prensa del alemán. Despachos vacíos. Otros ocupados. Pero sin el ritmo frenético y angustioso de un último día de mercado.

Desde la llegada de Joan Laporta, en 2021, los mercados azulgranas han estado marcados por la austeridad económica ante la dificultad de poder operar con normalidad. Este verano parecía que sería distinto. Pero la realidad fue otra. No se recuerda una noche de mercado tan tranquila en los últimos años. Ni pizzas, mamparas, cortinas, persecuciones, faxes o puños arriba del presidente celebrando un fichaje de última hora.

No hay verano e invierno sin pizzas, que suelen ser la cena habitual en la Ciudad Deportiva durante las noches de cierre de mercado. La temporada pasada se acabó de firmar las llegadas de los Joaos y las salidas de Abde y Eric Garcia durante las últimas horas de mercado entre pizzas cuatro quesos y margarita. Acabó siendo un día de locos. A primera hora se confirmaba la marcha de Eric al Girona para liberar fair play y poder activar el aterrizaje de los Joaos, que llegaron a la Ciudad Condal a primera hora de la tarde. Dos furgonetas negras esperaban a los portugueses en la Terminal Privada del Aeropuerto de Barcelona.

Las famosas persecuciones para captar el momento también han pasado a mejor vida este verano. Cancelo y Joao Félix se marcharon al Hospital de Barcelona para pasar la revisión médica y posteriormente firmar los respectivos contratos en la Ciudad Deportiva. Y los medios de comunicación no perdieron detalle. Las pizzas también son habituales entre la prensa. Pizzas o sushi. Dependiendo de la persona. Es el manjar escogido por los periodistas durante los últimos mercados.

Era su primer mercado de invierno, Laporta cerró tres operaciones que aumentaron el nivel de la plantilla en el segundo tramo de temporada. Llegaron Adama Traoré, Dani Alves y Aubameyang. Este último lo hizo sobre la bocina. Y con puño arriba del máximo mandatario culé y pulgar levantado por parte del futbolista gabonés. Su fichaje peligró durante muchos momentos. La operación se cerró a última hora. Y Laporta lo festejó eufórico. Todo esto, antes de una mampara que pusieron en el pasillo donde están los despachos de los ejecutivos deportivos para impedir, ahora, grabar cualquier instantánea.

Tampoco habrá prisas en los despachos de la Ciudad Deportiva. Los azulgranas anunciaron la incorporación de Luuk de Jong en enero de 2021 a las 1.24 horas, pero minutos más tarde lo quitó de la web para volver a ponerlo pasadas las 3:30 de la madrugada tras revisar LaLiga toda la documentación del acuerdo entre Barça y Sevilla. Poco después salía Mateu Alemany, el que fuera director deportivo del club en esa época, cerca de las 4:00. Algo impensable y surrealista. Ninguna de estas imágenes que han marcado los últimos mercados del FC Barcelona y que están en la retina de periodistas y aficionados se vivirán durante la jornada de hoy.