VALENCIA CF

¿Puede el Valencia no irse al Nuevo Mestalla? "Mestalla tiene espacio de sobra para hacer un estadio moderno 24/7"

La organización UVAM señala que una reforma en Mestalla supondría un euro gastado por cada tres euros gastados en hacer el Nuevo Mestalla.

El esqueleto del Nuevo Mestalla. /Archivo.
El esqueleto del Nuevo Mestalla. Archivo.
Nacho Sanchis

Nacho Sanchis

El Valencia Club de Fútbol ha depositado su futuro en el Nuevo Mestalla. La reanudación del nuevo feudo será una realidad a partir del próximo mes de enero, el Ayuntamiento ha dado ya luz verde para ello y la entidad ha llegado a un acuerdo con Goldman Sachs por valor de 121 millones de euros para refinanciar su deuda y negocia otro de 325M, todo para poder ser solvente a corto plazo mientras construye el estadio.

El Valencia fía su futuro a los ingresos que espera del nuevo feudo una vez lo construya (según los cálculos de la entidad superiores a los 25M solo en concepto de actividades no deportivas), para volver a ser solvente por sí mismo y empezar a devolver los préstamos. Sin embargo, toda esta jugada financiera sumada a que el proyecto de estadio siempre ha levantado críticas en un sector de la afición, ha llevado a que una pregunta ronde en el ambiente: ¿Puede el Valencia quedarse en Mestalla y no cambiarse al nuevo estadio?

Varios expertos en la materia y aficionados del Valencia CF han querido darle respuesta en una comparecencia. Iván Cabrera (Director de la escuela de Arquitectura en la Universidad Politécnica), Ernesto Colomer y Rafael Rueda, (expertos en ingeniería de caminos y profesores en la UPV), Jorge Milla (doctor en derecho financiero) y Josep González (ingeniero industrial), han presentado una alternativa en un acto convocado por el colectivo de aficionados 'Últimes Vesprades a Mestalla'.

"Técnicamente, Mestalla y su reforma es viable, los tres anillos son independientes entre sí y eso facilita su reforma, además no necesitas reformarlo todo de una, al ser independientes puede ser una reforma progresiva en función a la capacidad económica que tenga el club en cada momento, la reforma tendría una vida útil en función de lo que se quisiera proyectar, pero lo bueno de que sean anillos independientes puedes ir actualizándolos por separado", explicó Iván Cabrera.

"Mestalla no solo es que permita reformarse, es que Mestalla tiene una superficie comercial de 10.000 metros pendientes simplemente de tabicar, con eso se podrían obtener ingresos extraordinarios. Se construyeron dos torres para que hubiera bares y se pudiera aprovechar 24/7, que es justo lo que nos 'venden' ahora para irnos al Nuevo Mestalla. Cuando el actual ya lo tienen hecho", explicó Ernesto Colomer. El coste sería estimativamente entre 110 y 130 millones, un coste muy inferior al que supone el cambio al Nuevo Mestalla.

"Nos dicen que el estadio nuevo van a costar 200M, pero pensamos que los 300M se van a superar, Mestalla se puede reformar hasta donde se alcance no hace falta una reforma brutal sino progresiva, el resultado final es por cada euro que te gastaras para quedarte en Mestalla sería 3 euros gastados en el Nuevo", explicó Colomer.

Esa alternativa de reforma del viejo Mestalla fue planteada después de una serie de críticas documentadas al último proyecto del Nuevo Mestalla presentado por la entidad que se puede concluir en tres grandes ejes: Que en el proyecto hay indefiniciones que harían en cualquier obra pública que lo cancelasen, que a la cubierta se le ha dado una vida útil de 50 años cuando debiera ser de 100 años y no cumple la normativa valenciana, y que el hormigón ha sufrido un deterioro superior al que se plantea en el proyecto.

También se incidió, de nuevo de manera justificada, en que económicamente no es sostenible el hecho del supremo endeudamiento al que se va a ver sometido el conjunto che. De hecho, sobre esos ingresos independientes del fútbol que el Valencia espera tener se apuntó que "no se va a construir terciario comercial porque lo han vendido todo", no hay que olvidar que la entidad ha vendido el terciario a la empresa Atitlán. Y sobre los ingresos que el club aspira a conseguir se apuntó que "con el Roig Arena, no sé hasta qué punto van a poder competir, ellos ya tienen conciertos cerradísimos".

De hecho se plantearon tres ejemplos de cambios de estadios fallidos. El Centenario de Montevideo, que la sociedad de allí ha evitado que se derrumbe y se va a reformar. El cambio que hizo el Espanyol de Sarriá al Olímpic y al actual "desde entonces solo hay que ver sus clasificaciones", explicaba Cabrera. Y el estadio de los Alpes de la Juventus, que se construyó para el Mundial de Italia y tuvo que ser derruido a los 20 años porque la capacidad era tan elevada que en los partidos de la Juventus quedaba desangelado.