El 'boom' por la camiseta de la Dana como ejemplo del poder de la 'marca Valencia': ventas a nivel Champions

El Valencia Club de Fútbol y su gente vivieron un momento único y emocionante el pasado sábado en Mestalla. En los anales de la memoria quedará el homenaje de la entidad y las 44.000 almas que se congregaron en el estadio a todos los afectados por la DANA, los impactantes silencios, los sonidos de la dolçaina y el tabaret o el cántico del himno regional. Mestalla volvió a ser el punto de referencia de la ciudad de Valencia (tras coger el testigo del bonito homenaje en el Ciutat de València), y volvió a quedar claro que, pese a la situación deportiva y social que vive el club, su gente trasciende a ello.

La importancia de la marca Valencia CF supera a la mala gestión de Peter Lim o de cualquier máximo accionista que tenga la entidad. La mejor prueba de ello es cómo el conjunto de Mestalla en su último año ha aumentado de 15M en concepto de abono, taquilla, etc. A casi los 20M totales entre taquilla (6M), abonados y socios, así como las zonas VIP donde ya hay un sold out total para todo el año y elevan la cifra a los 13,7M de euros. De hecho, la entidad consiguió aumentar la afluencia con respecto a la campaña anterior con 43.592 personas y una asistencia media del 93% de los abonados.

Pero los datos de Mestalla no son los únicos que sirven para constatar esta situación. En lo que respecta a ventas, el club también ha aumentado en todos los sentidos: ha ejecutado 144.000 operaciones en sus tiendas oficiales (venta de equipaciones, camisetas, detalles, obsequios etc.) llegando a una facturación total de 6,7 millones de euros, aunque de esa parte un buen pellizco va para Puma, que a fin de cuentas es la productora original de las camisetas.

El mejor ejemplo son las camisetas a los afectados por la DANA que el club puso a disposición de sus abonados: se hizo un pedido de 1.000 camisetas que 'volaron', posteriormente otro de 1.500 que también han volado y ahora, únicamente, queda un pequeño remanente... que lo normal es que se agote pronto también.

Todos los datos expuestos llevan a que, hoy por hoy, las cifras de ventas tanto en taquilla como en tiendas estén a los niveles del Valencia que jugaba Champions con cierta asiduidad, con un equipo que ni mucho menos se le parece y una situación deportiva muy lejana a ello.

A falta de una inversión deportiva potente, la entidad se centró en trabajar la identidad histórica del Valencia CF como club, algo que trascendiera al presente de la misma. Una estrategia que se pudo ver reflejada en claros ejemplos como la camiseta inspirada en La Lonja de la Seda (2021), la camiseta inspirada en los diseños del pintor Sorolla (2021) o, sin ir más lejos, la camiseta negra de este año con la filigrana de la Senyera en dorado de fondo. Todo símbolos arraigados

Ese desarrollo, como el de poner Mestalla como el centro de muchas campañas de marketing, etc., ha propiciado que las coherentes críticas a la situación deportiva se hayan desligado de la vinculación social al club y que, por ello, las empresas sigan viendo en el conjunto de Mestalla un filón que este año supondrá ingresos de 16,5 millones de euros para el club en concepto de patrocinios, llevando los ingresos totales de comercialización y publicidad a un total de 21M (6M más que el año anterior).