La mili de Fermín duró 380 días: "Ha sido agotador a la vez que precioso"

"Estoy muy orgulloso y muy feliz por todo lo que he vivido, pero lo más importante es el colectivo. Hemos hecho un gran torneo y lo merecíamos". Las palabras de Fermín tras el partido son un gran retrato del personaje. Sacrificado sobre el césped pero sereno ante los micrófonos. Tan pletórico de confianza jugando como tímido ante la prensa. Su generosidad es lo único que no se altera al quitarse las botas.

Resulta difícil pensar en una mejor manera de debutar en la élite que la suya. De soñar con una pretemporada en el Barça hace poco más de un año a consolidarse como alternativa de Xavi, levantar una Eurocopa y ser el abanderado de la campeona olímpica que rompió una racha de 32 años. "Ha sido un año muy bonito, todo pasó muy rápido" cuentan quienes le conocen.

El joven de 21 años es ya un veterano. Y lo es en el año de su debut. Con ese cartel se incorporó a la selección de Santi Denia y jamás puso una pega. Encajó el traje de líder como quien se prueba un saco a medida. Junto a Baena fueron los encargados de "transmitir calma a los compañeros para que tuvieran personalidad". Ejercieron el liderazgo desde la osadía y el atrevimiento, pero con el ejemplo como bandera.

La temporada ha sido eterna para un jugador que disputó su primer amistoso del curso hace más de un año -380 días- y hasta ayer seguía cabalgando con el balón. "Ha sido agotador a la vez que precioso", explica su círculo cercano. Tan difícil es cumplir sueños como imaginar algo así. Está ampliando su marco mental mientras descubre nuevos horizontes en el camino.

Con el oro colgado del cuello, Fermín ha cerrado su primer curso en la élite. Disputó 42 partidos con el Barça y marcó once goles -ocho en Liga-. Con La Selección fueron catorce encuentros -seis en la Sub-21- y siete tantos -seis en los Juegos-. Esta misma temporada disputó Liga, Copa del Rey, Champions, Supercopa de España, Clasificación para la Euro Sub-21, Eurocopa con la Absoluta y Juegos Olímpicos. Pero también la Primera RFEF. Fue en septiembre, en un parón de selecciones, cuando bajó a reforzar el Barça Atlètic de Márquez.

Fermín no se tomará un mes de vacaciones pero sí dispondrá de algunos días libres antes del apretón de manos con Flick. El de Campillo ha visto de reojo los primeros pasos del nuevo entrenador del conjunto azulgrana y quiere unirse cuanto antes al grupo. "Está ilusionado, quiere competir y ganar títulos con el Barça", revelan desde su entorno.

Tras idolatrar a Xavi Hernández, quien apostó ciegamente por él, ahora se encontrará con un nuevo mandamás en Barcelona. El fútbol de Flick nació para ser jugado por mediocampistas de su estirpe. A Fermín no le hace falta un nombre rimbombante ni un currículum deslumbrante, sólo hace falta dejarlo jugar.