La despedida de Luka Modric es inolvidable: se detiene el partido, pasillo, muchas lágrimas... ¡y la sorpresa de Kroos!
El croata disputó ante la Real Sociedad su último encuentro en el feudo blanco, al que llegó en 2012, hace 13 temporadas, procedente del Tottenham.

En el undécimo aniversario de la Décima, conquistada en Lisboa el 24 de mayo de 2014 ante el Atlético de Madrid, Luka Modric dijo adiós al Bernabéu. Lo hizo después de 13 temporadas de blanco y una trayectoria sinigual que buscará culminar con el Mundial de Clubes, que se jugará este verano, entre junio y julio, en Estados Unidos. El centrocampista croata, asistente de lujo en el gol de Sergio Ramos que lo cambió todo, anunció su marcha del conjunto merengue en una emotiva publicación en Instagram. "Ha llegado el momento. El momento que nunca quise que llegara" escribió, dejando entrever su deseo de continuar una temporada más en la capital española.
El Bernabéu, consciente del futbolista que se despide, se vistió de lujo para despedir al 10. No lo hizo solo: Ancelotti, que asumirá las riendas de Brasil a partir del próximo lunes 26 de mayo, también dijo adiós al "club de su vida". En su caso, no continuará en el Mundial de Clubes y Xabi Alonso, su reemplazo, será anunciado este domingo. Precisamente el tolosarra compartió centro del campo con el croata en su etapa como madridista, dando forma e iniciando un legado, el más ganador de la era moderna, que perdurará para siempre en el Real Madrid.
En el estadio (lució mensajes de "gracias, Luka" y "gracias, Carlo" antes del inicio), todo parecía transcurrir con normalidad hasta que Modric, en su último trote como local, pisó el césped. La gente, en pie, inició una ovación unánime que continuó durante el encuentro (fue anunciado el último por la megafonía). Cada vez que el croata, que cumplirá 40 en septiembre, tocaba el balón, el sentir en el Bernabéu era especial. La nostalgia se apoderó de todos: de los más pequeños, de los mayores, de los turistas… y hasta de algunos periodistas, situados en la zona de prensa, que se mostraron especialmente conmovidos por presenciar el último baile del 10 en el feudo vikingo.
Despedida 'a lo Kroos'... con Kroos
Durante el encuentro, el adiós de Modric recordó al de Toni Kroos, que se produjo el 25 de mayo de 2024 en un partido ante el Betis: en el momento de su cambio (entró Chema por él en el 87'), el partido se detuvo y sus compañeros, acompañados por los futbolistas de la Real Sociedad, le brindaron una ovación a ensordecedora, a la altura de su legado y rendimiento como madridista, y le reconocieron como uno de los motores del Real Madrid más ganador de la era moderna.
Uno de los momentos más emotivos del choque llegó con la aparición de Kroos, que recibió a Modric en su llegada al banquillo. Juntos protagonizaron una de las imágenes de la temporada, poniendo fin a un legado sinigual que tardará en borrarse del imaginario colectivo.
@relevo_deportes 🤍 El Bernabéu se rinde ante Modric y Ancelotti. Este sábado el club blanco a homenajeado a Carlo Ancelotti y Luka Modric en su último partido en el Bernabéu. #tiktokfootballacademy #deportesentiktok #tiktokdeportes #modric #realmadrid #ancelotti ♬ Nirvana - Official Sound Studio
Pese a los más de 40 goles de Mbappé, líder del equipo en un curso gris, o a la garra de Fede Valverde, cada vez con más peso en el vestuario y, también, en la sala de máquinas merengue, la mayoría de camisetas tenían un denominador común: era el momento de lucir el 10 de Luka, en su último partido en el Bernabéu, su casa desde 2012, cuando el croata aterrizó en Madrid procedente del Tottenham.
En lo que a Modric se refiere, también se mostró especialmente conmovido ante su último encuentro en el Bernabéu. El centrocampista croata, en la última jornada de Liga, inició el duelo como titular y, aunque fue sustituido y recibió una ovación para el recuerdo, emergió, junto a Carletto, como uno de los nombres propios del día. "Te quiero, Modric" o "Luka, eres puro fútbol" fueron sólo algunas de las pancartas que decoraron el Bernabéu en la despedida del 10. Y no hay mejor resumen que ese.