ARABIA SAUDI

La vida de Nacho Fernández dentro y fuera del vestuario ayuda a Míchel a poner patas arriba el oligopolio del fútbol en Arabia

El Al Qadsiah venció al líder Al Hilal y aspira a clasificarse para la Champions asiática… y a ganar la Copa.

Nacho da la charla a sus compañeros antes de ganar al Al Hilal/Al Qadsiah
Nacho da la charla a sus compañeros antes de ganar al Al Hilal Al Qadsiah
Hugo Cerezo
Álvaro de Grado

Hugo Cerezo y Álvaro de Grado

Viendo los vídeos en el vestuario publicados por el Al Qadsiah tras su victoria ayer sobre el líder de la Saudi Pro League, el Al Hilal, el usuario podría preguntarse si han ganado un título. No hay copa de por medio, pero sí el sabor de las gestas, porque el conjunto recién ascendido y dirigido por Míchel venció al todopoderoso Al Hilal con un gol en el descuento de Aubameyang que les aúpa al tercer puesto, que otorga plaza para la Champions asiática. Enfrente estaban Bono, Koulibaly, Ruben Neves, Joao Cancelo, Lodi, Malcom... Un hito que no es casualidad.

Con Míchel en el banquillo, junto a su inseparable Juan Carlos Mandiá, su preparador físico Quique Sanz o su hijo Adrián, en la dirección deportiva Carlos Antón y Nacho Fernández como capitán, los españoles están liderando la revolución del equipo de Al Khobar, que ya ha ganado a tres de los cuatro clubes del Fondo de Inversión Pública de Arabia Saudita (PIF): el citado Al Hilal (2-1), Al Nassr (2-1) y Al Ahli (1-0). Se le escapó el Al Ittihad de Benzema. Por ahora. Pueden verse en la final de la Copa. Ambos están en semifinales.

La apuesta de Nacho al dar el sí a la propuesta de Al Qadsiah le ha salido casi perfecta. El casi tiene que ver con su desaparición de los planes de De la Fuente, único jugador que no fue convocado tras la Euro por decisión deportiva y ya fuera de la selección habitualmente. El resto le ha salido redondo al excapitán blanco, que compite, sufre y gana como si siguiera vestido de blanco. "Es un ejemplo para todo y todos", cuentan desde el club, dibujando escenas que ilustran su importancia.

Jehad Thakri, central de 23 años, es uno de los titulares habituales incluso formando defensa con Nacho. Por condiciones le ven con opciones de acabar jugando en Europa. "No se despega de él, en lugar de ir con los veteranos saudíes prefiere juntarse con Nacho". Es uno de los jugadores que trata de copiar todo lo bueno del madrileño. Los hábitos de Nacho, sus rutinas, dentro y fuera del campo, su trabajo en el gimnasio, su nutrición… Un combo que inspira a parte de sus compañeros. Como su charla de capitán, traductor simultáneo incluido, antes dela victoria: "Estamos en el momento y la situación perfectas. No tenemos nada que envidiar a esta gente. Disfrutar, sufrir y a ganar como siempre".

Porque culturalmente, en Arabia en general y el Al Qadsiah en particular, quieren avanzar en que todos los profesionales se comporten como tales y se vayan acercando a los estándares de la elite europea. Para ello, Nacho es la luz del faro que guía a la parte del vestuario menos profesionalizada. Allí compiten también Nandez, Gastón Álvarez (ex Getafe), Aubameyang, Casteels o Quiñones, todos ellos con pasado en Europa, el núcleo duro de un equipo que compite al más alto nivel y que amenaza ese oligopolio representado por los cuatro clubes del PIF. Ellos han ayudado a trasladar la cultura y el esfuerzo europeo a este campeonato, que por otra parte son necesarios para acercarse a los que ganan, que diría Luis Aragonés.

Ya desde antes del verano Míchel, Antón y presidencia (el club pertenece a la petrolera Aramco) trazaron las líneas maestras de la planificación. Querían una plantilla competitiva, con jugadores que no fueran exclusivamente a ganar dinero, sino a ayudar a armar un equipo en todo el amplio sentido de la palabra. Perfiles de todo tipo, no solo leyendas como Nacho o Aubameyang. Todos se sometieron a una entrevista personal para conocer no solo al futbolista. Por el camino se quedaron Morata o Dybala. Nada es casualidad en el Al Qadsiah. Bueno, sí. Ayer Nacho jugó con un brazalete que parecía la bandera de España. Una casualidad porque era una cinta especial en homenaje a una leyenda del club, pero que seguro el capitán lució con doble orgullo.