Este cuento no ha acabado y lo que queda por hacer

La Selección puso este martes punto final a una de sus concentraciones más duras. En el inicio de la misma, la cumbre en Oliva sirvió como punto de inflexión para marcar un antes y un después en el conflicto de las jugadoras con la RFEF. Entonces, y tras reuniones que llegaron hasta las cinco de la madrugada, las tres partes implicadas (CSD, RFEF y jugadoras) acordaron un compromiso de entendimiento.

Este acuerdo es sólo la base de todo lo que queda por hacer y resolver tanto en el ente federativo como para evitar otro caso Rubiales, en el que se ha abierto un proceso judicial. Para supervisar que todos los cambios se van produciendo y dar forma al documento que firmarán RFEF, CSD y futbolistas, se creó este miércoles la Comisión Mixta, que volverá a reunirse para rubricar este acuerdo el "9 o 10 de octubre".

Las futbolistas cumplieron con uno de los condicionantes de este pacto: quedarse en la concentración y jugar los dos partidos con la Selección. Mientras, se fueron dando algunos de los cambios que pidieron las futbolistas, como la reestructuración de la secretaría general, con la salida de Andreu Camps, o de Integridad, con Miguel García Caba. Se trata de dos de los nombres claves para Rubiales, siendo el primero su mano derecha durante su mandato. También tenía el tic verde la dimisión del ya expresidente, aunque esta se produjo con anterioridad a la reunión.

Estos movimientos eran primordiales para que las jugadoras creyeran que esta vez sí que habían tenido en cuenta sus reclamos. O, mejor dicho, que habían entendido el por qué debían de producirse. Sin embargo, la salida de Rubiales, Camps y Caba no son suficientes en esos cambios estructurales que piden las futbolistas, pues son las caras visibles tras las que hay otras figuras que también impedían continuar con los cambios estructurales que piden las futbolistas.

Tras una "discriminación sistemática" en el femenino, tal y como ellas mismas han señalado, se han señalado a diferentes áreas. Las internacionales no han dado nombre y apellidos de manera pública, pero sí que han enumerado los ámbitos en los que se precisa una profunda renovación.

Aquí aparece un apartado con una relevancia mayúscula: el organigrama del fútbol femenino. Sin Jorge Vilda en el banquillo, el resto de personas que trabajan y dirigen esta sección no han variado y tampoco se ha anunciado su organización oficial. De hecho, la sustituta del ex técnico de la Selección fue precisamente su segunda y mano derecha durante estos años, Montse Tomé. Esta puso su cargo a disposición de la RFEF tras la polémica Asamblea de Rubiales junto a otros nombres destacados como Kenio Gonzalo y otros nueve miembros del cuerpo técnico de la Selección.

Ninguno de ellos ha dejado su puesto. Y su comportamiento de presión a las futbolistas en medio de la crisis, como la convocatoria de Montse Tomé o la no citación de Jenni Hermoso para "protegerla" sin haber preguntado a la propia jugadora por esta cuestión, añadió crispación con nombres como el de la seleccionadora. Pese a esto, los resultados deportivos y el transcurso de la última concentración, en la que se ha ido calmando todo, parecen haber dado una tregua a la entrenadora.

No obstante, no es un movimiento urgente en el que hayan ejercido presión. Las internacionales han insistido en que ellas no ponen, ni quitan a nadie. Pedro Rocha fue quien decidió que Montse Tomé fuera la seleccionadora y sólo él puede decidir que no siga. Además de estos nombres, quedan sobre la mesa otras figuras como los actuales responsables del fútbol femenino de la RFEF, Ana Álvarez y Rafa del Amo. Ambos han dirigido esta sección en los últimos años, con la discutida gestión del conflicto de 'Las 15' hace unos meses.

Por otro lado, las futbolistas también señalaron que son necesarias variaciones de la estructura en comunicación y marketing. La idea es que se se iguale la estructura en todas sus áreas al masculino, por lo que el proceso no apunta a ser ni rápido, ni sencillo. Al mismo tiempo, se está desarrollando un procedimiento judicial por el caso Rubiales. En este momento, se está llevando a cabo la toma de declaraciones de los testigos propuestos por los abogados de ambas partes que ha aceptado el juez.

De este modo, en los próximos días pasarán por la Audiencia Nacional nombres como el de Albert Luque, Rubén Rivera y el ex seleccionador nacional Jorge Vilda. Estos lo harán como investigados. En calidad de testigos irán a tomar declaración tres jugadoras, Misa, Alexia y Paredes, tras el turno de Rafa Hermoso, hermano de Jenni Hermoso, entre otros. Es posible que se añadan nuevas declaraciones en función de lo que todos ellos aporten como pasó con Vilda. También faltaría la declaración ante el juez de Jenni Hermoso.

De manera simultánea a todo este proceso, la Selección afrontará la clasificación para los Juegos Olímpicos a través de la Nations League. Por el momento, es primera de su grupo tras ganar los dos partidos que ha jugado ante Suecia (2-3) y Suiza (5-0). España jugará en apenas un mes ante Italia y Suiza a domicilio. Los partidos, que se jugarán en Salerno y Zúrich los días 27 y 31 de octubre, serán claves para encarrilar el billete europeo.

Tras la fase de grupos, llegará una 'final four' en la que sólo los dos finalistas se asegurarán su participación en las Olimpiadas. España, como vigente campeona del Mundial, es una de las favoritas para la cita en París 2024. Un objetivo deportivo que deberá conseguir en medio de un periodo delicado, con un movimiento que pretende cambiar el fútbol en España. Ya se han consumido las que se esperan que sean las semanas más duras, aunque el camino no será ni corto, ni sencillo. La evolución y el cambio serán la meta.