Éxtasis... y bajonazo: Mbappé marca un golazo para dejar atrás a Di Stéfano y luego se lesiona

Mbappé tardó nueve minutos en lanzar un mensaje de esperanza al madridismo y 35 en apagar de un plumazo la ilusión: se retiró con molestias en la parte posterior del muslo izquierdo. El francés, autor del 0-1 con un golazo, sintió poco después un pinchazo y, pese a que trató de aguantar, terminó por pedir el cambio y dejar su lugar a Rodrygo. El contratiempo preocupa... porque llega cuando parecía que el '9' había dejado atrás las dudas y empezaba a liderar de verdad al Real Madrid. Este miércoles por la mañana será sometido a pruebas en Valdebebas.

El galo firmó el primero en Bérgamo con una maniobra que recordó a su mejor versión y que ayuda a espantar la nebulosa de críticas que le rodea desde que empezó con el pie izquierdo su aventura en Chamartín. Tras recibir un pase filtrado de Brahim, el francés burló al capitán Djimsiti con un gran control orientado con la izquierda y fusiló acto seguido a Carnesecchi con la derecha. Ha marcado en tres de los últimos cuatro partidos.

La celebración, con el malagueño, Vinicius y Ceballos pegados a él, liberó parte de la furia acumulada por el delantero por sus penaltis fallados en Anfield y San Mamés y por no haber mostrado hasta la fecha todo su repertorio vestido de blanco. Además del gol, Kylian amenazó a la Atalanta con un disparo desviado por el meta en el 2' (la acción hubiese sido anulada por fuera de juego de subir al marcador) y volvió a probar a Carnesecchi con un disparo centrado en el 14'. En esa ocasión, aunque eligió el golpeo desde el pico del área, pudo haber cedido el balón para Vini, en mejor posición.

En cualquier caso, el crack de Bondy vuelve a mostrar retazos del Mbappé que maravilló al planeta con Francia y el PSG y que no apareció durante sus primeras semanas en Madrid. En Girona mejoró y anotó con un disparo cruzado y en Bérgamo mantuvo la inercia. Entremedias, precisamente, Canal+ emitió una liberadora entrevista en la que Kylian se sinceró y en la que negó tener depresión: "La gente nos ve como robots, pero nos afectan las críticas".

Con su diana en el Gewiss Stadium, el galo alcanzó los 50 tantos en la Liga de Campeones, una cifra redonda con la que iguala a una leyenda como Inzaghi y a Mo Salah, autor del gol que ha eliminado hoy al Girona de la Champions. Mbappé ya sólo tiene a uno a su compatriota Henry (que le azotó duramente hace un mes), a cinco a Müller y a nueve a Shevchenko. Di Stéfano e Ibrahimovic (49) quedan por detrás. Sólo Messi, que lo consiguió con 24 años y 284 días, consiguió llegar a esa cifra antes que el madridista (25 años y 356 días).

Así, y tras haber goleado ante Getafe, Girona y Atalanta y sólo quedarse a cero ante el Liverpool, el francés parece haber recuperado parte de la confianza perdida. Su resurrección ha llegado después del naufragio en San Mamés, tras el que colgó un revelador mensaje en sus redes que quizá haya surtido efecto: "Asumo toda la responsabilidad. Es un momento difícil, pero es el mejor para cambiar esta situación y mostrar quién soy". Después de eso, dos de dos.

La charla emitida por Canal+, grabada en el domicilio de Mbappé en Madrid antes de Bilbao pero emitida el domingo, también ha colaborado en que Kylian se descargue de varios pesos que le hacían mella, como las informaciones que le vincularon con una supuesta violación en Estocolmo ("no estoy implicado") o las teorías de que había colocado a su selección en un segundo plano ("amo a Francia; estoy deseando volver"). Con el apoyo innegable de su entrenador y de sus compañeros, el '9' genera ilusión entre un madridismo que había perdido cierta fe en él… y que asiste con deseo a su despertar y a que su lesión se quede en nada. Tras retirarse, el francés se metió directamente al vestuario. Mañana será evaluado para definir qué tiene y cuánto durará su baja.