BARCELONA 5 - YOUNG BOYS 0

En el Barça de Pedri, Lewandowski marcará hasta la jubilación

Los blaugrana pasaron por encima de un Young Boys que se presentó a Montjuïc esperando que la goleada no fuera demasiado abultada.

Lewandowski e Iñigo fueron dos de los goleadores del Barça./AFP
Lewandowski e Iñigo fueron dos de los goleadores del Barça. AFP
Jordi Cardero

Jordi Cardero

Hansi Flick se puso el traje para recibir el balón de las estrellas y su equipo jugó con la misma clase. Al ritmo de un Pedri estelar, al nivel de los mejores del mundo, y un Robert Lewandowski que participa menos pero marca más. No es que esta versión del polaco sea solvente, es que mejora exponencialmente al Barça en Champions. La goleada la endulzaron los regresos a Montjuïc de Frenkie De Jong y Ansu Fati.

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Rotó Flick en Pamplona y guardó sus mejores cartas para jugarlas en Champions. En Liga, el Barça se había ganado el derecho a respirar y en Europa no podía volver a fallar. No hubo rotaciones, no hubo sorpresas. Entró Ferran Torres en el once, retrasando a Pedri hasta emparejarlo a Marc Casadó, para paliar la ausencia de Eric Garcia, sancionado.

Volvieron los jugones y regresó el fútbol. Asentados en campo rival, el ritmo de balón fue suficiente para descorchar el marcador. Conectó Casadó con Ferran, este con Lamine y el canterano encontró a Raphinha al espacio. El brasileño mandó un pase al segundo palo sabiendo que allí aparecería el de siempre, Lewandowski. Un gol más para el polaco y un puntito más de confianza para el equipo en Europa. El Barça controlaba el partido pero sin aletargarse en posesiones largas. A partir de tres cuartos, aceleraba para finalizar.

Miraba Szczesny, invitado al palco, a sus compañeros. Y veía desde lejos a Iñaki Peña, impasible y lejos del balón. A su lado se sentaron Diego Kochen y Fermín. Cerca también estaban Christensen, Gavi o Dani Olmo. Todos ellos candidatos a la titularidad en un Barça que se ha acostumbrado a potenciar la escasez de recursos. Aunque todo es más fácil cuando tienes a la delantera inspirada. El nivel de química arriba es total.

Un Pedri 'iniesteando'

Lo intentó el Barça en varias ocasiones, hasta se llevó un pequeño susto de Ebrima Colley en la única jugada en que el Young Boys logró cruzar el centro del campo. En una acción dentro del área, un potente tiro de Pedri quedó muerto y fue esta vez Raphinha quien lo empujó a la red. La inercia blaugrana no es casualidad. Por dentro, los buenos se encontraban. Por allí se movía un Pedri que inesteaba. Y en la derecha bailaba Lamine, que siempre juega su partido. Siempre esperando el balón para endiablarse. Esta vez estuvo especialmente disfrutón.

No bajó el ritmo el Barça, que encarriló el partido antes del descanso. En una falta desde la banda, provocada por Lamine, Pedri lanzó un caramelo que Iñigo Martínez y el vasco anotó su primer gol como blaugrana. Lo celebró con rabia, consciente de que este año se ha ido sacando peso de una mochila cargada. El Barça llegó al descanso con Pedri disfrutando con el balón y Lamine disfrutando regateando. Hasta se atrevió a tirar una elástica. A falta de los segundos 45 minutos, al partido le quedaba tanto pulso como el que quisiera darle el Barcelona.

Ovaciones para Ansu, De Jong... e Iniesta

La primera ovación tras el descanso se la llevó Frenkie De Jong. El neerlandés saltó a calentar al segundo minuto. Vio de cerca el cuarto gol. Lanzó Raphinha un córner largo y cerrado e Iñigo dejó el balón en bandeja a Lewandowski. El polaco, que en su día le pedía a Xavi que pusiera a extremos que le nutrieran de balones, tiene ahora compañeros que juegan analizando constantemente dónde está. No necesita brillar para marcar. Ni siquiera aparecer. Así, podrá marcar goles hasta la jubilación.

En los primeros cambios, Flick tuvo buenos gestos. El alemán abrazó a Ansu Fati antes de que saltara al campo, mientras Montjuïc ovacionaba a Pedri. Se llevó todo el cariño del Lluís Companys, donde regresó más de un año después. Ansu jugó como el canario, de interior. Por delante, un Young Boys que intentó taponarse las heridas y no encajar más goles. Para disputar el último cuarto de hora entró De Jong y ocupó el pivote. Se llevó el aplauso de la grada, con algún tímido silbido de fondo.

La goleada la redondeó involuntariamente Mohamed Camara. El central del Young Boys, en el intento de despejar un centro tenso de Balde, mandó el balón a su portería. Los últimos minutos dejaron dos imágenes. La primera, el debut de Andrés Cuenca, el central que creció formando pareja con Cubarsí. La segunda, una tercera ovación de Montjuïc. Esta vez, a Andrés Iniesta. Y qué mejor homenaje del equipo de su vida y este recital futbolístico.

Ficha técnica

  • Barcelona : Iñaki Peña; Kounde, Cubarsí (Héctor Fort, min.63), Íñigo Martínez (Andrés Cuenca, min.84), Balde; Pedri (Ansu Fati, min.63), Casadó; Lamine Yamal (De Jong, min.75), Raphinha, Ferran; y Lewandowski (Pau Víctor, min.75).
  • Young Boys : Keller; Blum (Athekame, min.58), Camara, Zoukrou, Hadjam; Monteiro, Ugrinic (Niasse, min.58), Lauper, Colley (Virginius, min.73); Imeri (Lakomy, min.82) e Itten (Ganvoula, min.73).
  • Goles : 1-0: Lewandowski, min.8. 2-0: Raphinha, min.34 3-0: Íñigo Martínez, min.37. 4-0: Lewandowski, min.51. 5-0: Camara (p.p.), min.81.
  • Árbitro : Erik Lambrechts (BEL). Amonestó con tarjeta amarilla a Colley (min.36) y Ugrinic (min.40).
  • Incidencias : Partido de la segunda jornada de la Liga de Campeones disputado en el Estadio Olímpico Lluís Companys ante 45.097 espectadores. Un millar de seguidores del Young Boys estuvieron en las gradas e incluso encendieron algunas bengalas en la segunda mitad.