Cuántos mundiales de F1 tiene Flavio Briatore

La Fórmula 1 es un microcosmos muy particular, del que emanan personajes pintorescos que no tendrían sentido en otro contexto. Se trata de un mundo marcado por el exceso a todos los niveles: velocidad, lujo, fiestas… en el que únicamente las personalidades más grandes que la vida son capaces de sobresalir. De todos ellos, pocos han demostrado un aura mayor que Flavio Briatore. Para el público español, el eterno socio de Fernando Alonso durante los días de vino y rosas del asturiano en la F1. Sin duda alguna, uno de los jefes de equipo más recordados en la historia de la categoría reina del automovilismo.

El magnate italiano llegó al Gran Circo de la mano de Benetton, empresa con la que previamente había hecho carrera en el mundo de la moda. Concretamente, ocupó un papel clave en la política de expansión de esta en Estados Unidos, lo que le convirtió en una firma conocida a nivel global. Por ello, cuando la compañía textil adquirió el equipo Toleman de F1, envió a Briatore para ejercer de director comercial en un rol puramente administrativo. Sin embargo, rápidamente el italiano se abrió paso como el principal rostro de la nueva escudería.

A lo largo de su larga y prolífica carrera en la máxima categoría del automovilismo, Flavio Briatore ganó tres Mundiales de constructores y cuatro Mundiales de pilotos. Lo hizo asociado a los equipos Benetton y Renault, siendo el segundo una continuación directa del primero.

El primer gran movimiento de Briatore en la Fórmula 1 fue el fichaje de Michael Schumacher para Benetton en 1991. Se trató de un movimiento muy polémico en su momento, ya que se produjo tras el debut del alemán con Jordan en Bélgica. Aquello supuso la queja pública de Eddie Jordan, que defendía que el Kaiser tenía contrato con su equipo y, por lo tanto, no podía correr con Benetton el siguiente Gran Premio.

En 2020, el magnate italiano defendió su versión de los hechos en el podcast Beyond the Grid: "Jordan no tenía contrato con Michael Schumacher. El contrato era muy simple: una carrera, y Jordan esperaba 300.000 o 400.000 euros del patrocinador TicTac. En el contrato con Michael ponía 'o encuentras el dinero o nuestro contrato es nulo'. Yo le di el dinero a Willi Weber -manager de Schumacher- y le dije: 'Te pago para que corra con nosotros, no quiero dinero de su patrocinador. Los 400.000 euros, yo te pago y tú mandas el dinero a Eddie Jordan'. Luego fuimos a Monza y él no tenía contrato. No hablamos con Eddie, y él protestaba diciendo que tenía contrato, pero no era así".

Aquello terminó en los tribunales británicos, que le dieron la razón a Briatore. Deportivamente el italiano también se demostró más que acertado, pues la unión de Schumacher con Benetton no pudo salir mejor. El alemán fue campeón del Mundo en 1994 y 1995, además, el equipo Benetton ganó el Mundial de constructores en 1995. Fueron los primeros grandes éxitos de Briatore com máximo responsable de un equipo de F1, aunque no los únicos.

A lo largo de los años, Briatore se ha ganado la fama de saber identificar el talento antes que nadie. Esta reputación le viene en gran parte por su apuesta firme por Fernando Alonso en los inicios del asturiano. El dúo se conoció en 1999 y, eventualmente, el italiano se convirtió en el manager del piloto español. Tal fue su relación que, pese al interés de Ferrari, Briatore le convenció para continuar juntos. En 2001 le llevó a Minardi, lo que supuso su debut en la F1. Lo hizo tan bien que en 2002 le reclamó para Renault, aunque como piloto reserva. Finalmente, en 2003 se produjo su debut en el equipo azul.

Con Renault, Fernando Alonso ganó los Mundiales de 2005 y 2006. Además, aquellos dos años la escudería francesa fue también campeona en la clasificación de constructores, redondeando así el palmarés de Briatore en la Fórmula 1.

Alonso se marchó del equipo del rombo en 2007 y este no volvió a alcanzar nunca las cuotas de éxito que tuvo hasta la fecha. El asturiano regresó en 2008 pero el equipo ya no era competitivo. Por su fuese poco, en 2009 sucedió el Crashgate, una maniobra por la que Briatore ordenó a Nelson Piquet Jr estrellarse a propósito y que le terminó costando el puesto al magnate italiano. En 2024, Alpine anunció el regreso de Briatore al equipo como supervisor especial.