CICLISMO

España, con dos 'dream team' al Mundial más duro en años: "Es nuestro mejor bloque en mucho tiempo"

Mavi García, Juan Ayuso, Pello Bilbao, Carlos Rodríguez, Enric Mas, Paula Ostiz, Pablo Torres o Adrià Pericas, entre las muchas bazas rojigualda para la cita arcoíris de Zúrich.

Carlos Rodríguez, integrante del combinado masculino en los Mundiales de Zúrich 2024. /RFEC / SPRINT CYCLING
Carlos Rodríguez, integrante del combinado masculino en los Mundiales de Zúrich 2024. RFEC / SPRINT CYCLING
Fran Reyes

Fran Reyes

Desde que hace un año se anunciaron sus recorridos, surgió el 'adagio': los Campeonatos del Mundo de Zúrich 2024 presentaban el perfil más exigente y apto para los escaladores desde, como mínimo, aquella cita de Innsbruck en la que Alejandro Valverde consiguió un maillot arcoíris que saldaba una deuda histórica y redondeaba la carrera deportiva del 'crack' murciano. Para aprovecharlos, la selección española participará en todas sus categorías con sus mejores ciclistas disponibles. Una constelación de estrellas que, sueñan, tocarán las medallas que se resisten precisamente desde el 'Bala'. Seis años son demasiados para una potencia del ciclismo de carretera como España.

Dentro de la narrativa de la temporada, con los Tours de Francia como clímax en verano, los Mundiales son el gran truco final: la cita otoñal que, con su prestigio y magnetismo propios, es capaz de convocar a los mejores del pelotón para hacer un último y gran esfuerzo. Las selecciones Elite femenina y masculina españolas, de hecho, anticiparán su llegada a Zúrich para convivir, prepararse con mimo y disputar las pruebas en línea de sábado 28 y domingo 29 a pleno pulmón. Las contrarrelojes del domingo 22 quedan en segundo plano ante la ausencia de especialistas de primera línea en la nómina rojigualda.

En el caso de las mujeres, Mavi García será la jefa de filas. "Se está preparando en Sierra Nevada y confiamos en que llegará en condiciones óptimas a la cita", explica la seleccionadora Gema Pascual en conversación con Relevo. "Puede estar entre las diez primeras, tal y como lo estuvo en París. Si consiguiera estar entre las cinco, sería todo un éxito". La acompañarán la campeona nacional, Usoa Ostolaza; la rodadora gerundense Mireia Benito; y la burgalesa Sara Martín. Junto a ellas, dos sub23 que han impresionado en distintos momentos de la temporada: la escaladora vasca Eneritz Vadillo, podio en el Tour del Porvenir, y la poderosa ex triatleta barcelonesa Paula Blasi.

A nivel de nombres, la selección masculina es todavía más impresionante. Un 'dream team' con cinco hombres situados entre los 50 primeros del ránking UCI: Carlos Rodríguez (16º), Enric Mas (21º), Mikel Landa (27º), Juan Ayuso (29º) y Pello Bilbao (48º). Sólo salen de este privilegiado lote Alex Aranburu (53º), cuya potencia será muy útil; Pablo Castrillo (104º), sensación de la pasada Vuelta con dos victorias de etapa; y Roger Adrià (219º), excelente gregario de Primoz Roglic en la consecución de La Roja.

"Por nombres y palmarés, es el mejor bloque del que hemos dispuesto en mucho tiempo", confía el seleccionador nacional Pascual Momparler. "Todos vienen de hacer cosas muy bonitas esta temporada. No obstante, la presión es la misma que en citas anteriores. A nivel de estrategia, ya he hablado con los pilares del equipo. Estamos muy alineados y tenemos las cosas muy claras". Una condición necesaria a la hora de afrontar el reto de derrotar a Tadej Pogačar, que asustó en Canadá; al doble campeón olímpico, Remco Evenepoel; al arcoíris saliente, Mathieu van der Poel; y a corredores como Marc Hirschi, Richard Carapaz o Matteo Jorgenson que con sus recientes actuaciones se han ganado la vitola de favoritos.

"Va a ser el Mundial más duro de todos los que he dirigido", considera Momparler, en el cargo desde 2019. El desnivel acumulado, patrón oro a la hora de medir la exigencia del recorrido, indica que la anómala edición de Imola, durante la pandemia, fue un punto más escarpada; no obstante, la distribución de las subidas en la parte final y la naturaleza de las mismas concede a Zúrich una dimensión mayor. "Hay tres subidas en el circuito", explica el técnico español. "La primera y la última son llevaderas, de fuerza; pero la segunda es corta, de un kilómetro, con rampas importantes que propiciarán que los escaladores salgan a flote".

Gema Pascual coincide. "Se hablaba del recorrido más duro de siempre y no sé si es para tanto, pero sí sé que las carreras se van a hacer bastante duras", asevera. "La prueba en línea será un recorrido de eliminación, selectivo. En cuanto a las contrarrelojes, en la primera parte del recorrido hay un puertecito, con su correspondiente bajada, de exigencia considerable". En chicas competirán las vigentes campeonas nacionales de Elite y sub23, Benito y Blasi; en chicos, dos de los tres últimos rojigualdas CRI, Raúl García Pierna y David de la Cruz. "La segunda parte del recorrido, en cambio, sí es más plana; será lo único que hagan los juveniles".

Las pruebas de base son también esperanzas e incluso expectativas de medalla. Entre las juveniles féminas, Paula Ostiz viene de ser campeona europea CRI y de quedarse cerrada en el sprint masivo de la línea (6ª). En chicos, el catalán Adrià Pericas liderará un potente bloque donde también figurará el reciente medalla de plata continental Héctor Álvarez. En cuanto a los sub23 masculinos (no hay carrera equivalente en féminas, aunque sí entorchado), Pablo Torres, joya de UAE Team Emirates, será el cabeza de cartel.